Que Kamala Harris se convirtiera en la primera mujer afroamericana de ascendencia india en llegar a la presidencia de Estados Unidos sería un hito histórico. Un momento de gran relevancia para la lucha por la igualdad de género y la representación de las mujeres en la política en el país, donde la paridad de género en los cargos aún no es alcanzable.
Según el recuento del Centro para Mujeres en la Política Estadounidense (CAWP, por sus siglas en inglés) para 2024:
- Más de una cuarta parte de los miembros de la Cámara de Representantes y una cuarta parte de los senadores estadounidenses son mujeres.
- De los 310 funcionarios elegidos a nivel estatal en los 50 estados del país, casi el 32% son mujeres, incluidos 12 gobernadoras y 22 vicegobernadoras.
- Casi el 33% de los legisladores estatales son mujeres.
En entrevista para La Cadera de Eva, Arlene Ramírez Uresti, internacionalista y profesora de la Universidad Iberoamericana, y Yadira Gálvez académica de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, analizan las implicaciones que tendría para Estados Unidos ser gobernado por primera vez por una mujer.
Foto: Cuartoscuro
Principales desafíos
Aunque la candidatura de Kamala Harris ha representado una evidente revitalización anímica al Partido Demócrata, luego de que Joe Biden se bajara de la contienda presidencial, lo cierto es que el camino para llegar a gobernar Estados Unidos no está libre de obstáculos y resistencias debido a su género y raza, en un país que históricamente ha estado marcado por el racismo.
La identidad racial de la vicepresidenta de Estados Unidos ha sido motivos de ataques en su contra, el ejemplo más reciente ocurrió este miércoles 31 de julio cuando Donald Trump, candidato republicano a la presidencia sugirió ante la Asociación Nacional de Periodistas Negros en Chicago que Kamala Harris “se volvió negra de repente”.
“No sabía que era negra hasta hace unos años, cuando por casualidad se volvió negra. Así que no sé, ¿es india o negra?”, dijo Trump.
Aclaremos este tema: Kamala Harris es hija de padre jamaicano y madre india, ambos migraron a Estados Unidos. Estudió en la Universidad de Howard, una de las universidades históricamente negras más destacadas del país. Como senadora, fue miembro de la Bancada Negra del Congreso y apoyó la legislación de sus colegas para reforzar los derechos electorales y reformar la policía.
La religión es otro factor importante en la política estadounidense, por lo que especialmente en temas como el aborto, Kamala Harris es una figura disruptiva en este sentido, ya que su agenda progresista y a favor de la interrupción del embarazo choca con los principios religiosos de muchos estadounidenses, donde el 65% se describe como cristiano y el 43% como protestante, según un estudio de 2019 de Pew Research Center.
“Los Estados Unidos son todavía considerados un Estado teocrático, juran sobre la Biblia, todo está basado en la filosofía político-religiosa. Sería un precedente en una sociedad puritana, romper un paradigma que les ha limitado la participación a las mujeres" (Arlene Ramírez Uresti, internacionalista)
De acuerdo con Arlene Ramírez Uresti otros contrapesos que Kamala Harris puede enfrentar son: el establishment político en el Partido Demócrata, debido a su falta de apoyo inicial para su candidatura, la oposición de grupos conservadores y la falta de apoyo de algunas comunidades, como los bautistas negros, debido a su posición en temas como el aborto.
Así como el sistema de equilibrio de poderes en Estados Unidos: el Congreso y el Senado, puede limitar la capacidad de Harris para implementar su agenda si no tiene el apoyo de estas instituciones.
¿Un gobierno feminista?
La académica Yadira Gálvez menciona que por la trayectoria de Harris y la agenda del Partido Demócrata se esperaría un compromiso mucho más fuerte con la igualdad de género y su impulso. Un tema que ha sido muy importante en su agenda, tanto al interior de Estados Unidos como al exterior.
“Recordemos sus posicionamientos en la ONU sobre la igualdad de género y la democracia; el anuncio que hizo en 2022 sobre la iniciativa para promover la igualdad de género en Centroamérica y, por supuesto, el que durante el gobierno de Joe Biden se puso en marcha la Primera Estrategia Nacional sobre Equidad e Igualdad de Género (Estrategia de Género)” (Yadira Gálvez, académica de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM)
Aunque Harris ha sido una defensora de los derechos de las mujeres y las minorías, que una mujer llegue al poder no siempre garantiza que gobierne con una agenda de género y que esta sea su prioridad, como documentamos en esta nota cuando hablábamos del panorama político de México frente a su primera presidenta.
Al respecto, la internacionalista Arlene Ramírez Uresti criticó a Kamala Harris por no haber hecho lo suficiente para promover la agenda de género durante su vicepresidencia, a pesar de tener la oportunidad de hacerlo y que justamente esta falta de acción es un "lastre" que ha contribuido al déficit de perspectiva de género en las políticas públicas en Estados Unidos.
Según Arlene Ramírez Uresti, Kamala Harris debió incidir en las siguientes políticas públicas durante su vicepresidencia:
- Agenda de género: promover la igualdad de género y abordar temas como la violencia contra las mujeres, la brecha salarial y la representación de las mujeres en puestos de liderazgo.
- Salud: abogar por un enfoque preventivo en temas de salud, incluyendo la educación sexual y la salud reproductiva.
- Migración: trabajar para abordar la crisis migratoria de manera más efectiva, incluyendo la protección de los derechos de los migrantes y la reforma de las políticas de inmigración.
- Políticas públicas con perspectiva de género: trabajar para integrar la perspectiva de género en todas las políticas públicas, para asegurarse de que las necesidades y experiencias de las mujeres sean tomadas en cuenta en la toma de decisiones..
- Acceso igualitario a los servicios públicos: asegurar que las mujeres tengan acceso igualitario a los servicios públicos, incluyendo la educación, la salud y la justicia.
"De nada sirve tener una mujer presidenta en Estados Unidos o en cualquier otro país si no hay un impacto en las políticas públicas, si seguimos teniendo estructuras patriarcales que siguen dictando la política pública" (Arlene Ramírez Uresti, internacionalista)
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Temas prioritarios para Harris
Para que la presidencia de Kamala Harris sea un paso hacia un futuro más inclusivo y diverso en la política de Estados Unidos, Yadira Gálvez espera que su campaña incluya la perspectiva de género y el feminismo en sus propuestas electorales. Temas como el aborto, salud materna y sanidad, serán relevantes para hacer contraste frente a la campaña de Trump.
Arlene Ramírez Uresti, señala que otros temas importantes son: educación sexual, acceso igualitario a los servicios públicos, crisis de fentanilo y migración, en este último tema destaca que Harris debe abordar el tema de manera efectiva, especialmente porque ha sido criticada por su manejo en el pasado.
Relación con México
"Sería un momento histórico maravilloso", dice Arlene Ramírez Uresti al preguntarle sobre cómo sería la relación con México si Kamala Harris llegara a ser presidenta de Estados Unidos al mismo tiempo que nuestro país tiene a su primera presidenta: Claudia Sheinbaum.
Pero más allá del hito, la internacionalista menciona que esto podría generar una sinergia entre las dos mujeres líderes y que podrían trabajar juntas en temas importantes para ambos países.
La presidencia de Harris también podría tener un impacto en la política exterior y la relación de Estados Unidos con otros países, especialmente en temas como la migración y el cambio climático.
“Tenemos que aprovechar este momento y no desperdiciar el espacio que se está abriendo, tenemos que ser congruentes y trabajar para que haya un impacto real en la sociedad" (Arlene Ramírez Uresti, internacionalista)
Por su parte, Yadira Gálvez destaca que, si bien es importante el que una mujer pueda ser electa presidenta de Estados Unidos, no podemos perder de vista las elecciones al Congreso (Cámara de Representantes y Senado).
Ni olvidar que Kamala Harris todavía no es nominada oficialmente, pues a pesar de que ya empezaron las votaciones a distancia la Convención Demócrata será del 19 al 22 de agosto y que será después de esa fecha cuando veamos quién la acompaña en la fórmula para ver la tendencia de la candidatura y que empiecen a delinear las propuestas electorales y su agenda de trabajo.