El invierno está cada vez más cerca y con él se acercan los frentes fríos y las mañanas heladas. En esta época del año no sólo basta con mantenernos abrigadas, también es necesario cuidar nuestra piel e hidratarnos. 

De acuerdo con un estudio de la Universidad de Portsmouth en Reino Unido, las mujeres somos más sensibles al frío porque la circulación de la sangre en nuestro cuerpo es más uniforme, aunque también influyen aspectos como el metabolismo, la actividad física, la edad, etc; sin duda, nuestra sensibilidad no sólo  afecta nuestra percepción, sino también la salud de nuestra piel. Por eso, hoy te traemos cinco productos que puedes utilizar para cuidarte del frío.

1. Crema con manteca de karité

La manteca de karité es uno de los ingredientes que debes buscar cuando se habla de cremas humectantes, esta tiene propiedades humectantes y regeneradoras, ideal para tus manos.

2. Bálsamo labial

Sabemos lo molestos que son esos labios partidos por el frío, por eso debes traer un bálsamo labial en tu bolsa 24/7. De todo nuestro rostro, los labios son una de las partes más sensibles ante el frío. Si puedes buscar uno que contenga vitamina E, sería ideal.

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3. Mascarillas faciales hidratantes

Este es el momento ideal del año para darle un boost de hidratación a tu carita, agrega mascarillas hidratantes en tu rutina de noche, puede usarlas una vez por semana y verás tu piel te lo agradecerá cuando el frío sea más intenso.

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4. Aceites corporales

¡No te asustes! El aceite le hace bien a nuestra piel, nutren y humectan de forma diferente nuestra piel, ayudan a minimizar las zonas ásperas de nuestras articulaciones y deja una sensación de suavidad, el aceite de almendras, el de coco y el de argán son nuestros favoritos. Sólo asegúrate de elegir el adecuado de acuerdo con tu tipo de piel y estarás protegida.

5. Gel de aloe vera

El aloe tiene capacidades regenerativas, si olvidaste hidratarte y te quemaste con frío, puedes aplicar aloe vera para calmar esas sensaciones de ardor y resequedad. Es mejor si utilizas en su forma natural, pero si no lo encuentras así, también puedes utilizar productos hechos a base de aloe como geles y cremas.

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¡Ahí lo tienes! No permitas que el frío te haga daño.