Andrés Roemer, escritor y economista mexicano se encuentra refugiado en Israel luego de múltiples denuncias por acoso y abuso sexual, su huida del país apaciguó el proceso, pues se encuentra sin avance alguno y totalmente detenido por incomparecencia. Ahora, ha interpuesto una demanda civil en contra de una de las cinco mujeres que lo señalaron como su agresor sexual, el motivo: haber dañado su honor, moral y patrimonio al referirse a él como abusador.
Esta demanda se inició desde agosto del 2022 como una orden directa de Andrés Roemer a uno de sus abogados y se encuentra interpuesta en el juzgado 51 de la Ciudad de México, este proceso realizado entre intermediarios es prueba contundente de lo impensable que es para el escritor pisar tierras mexicanas ante cinco órdenes de aprehensión. Sobre esto, se podría discutir su extradición, pero México e Israel no tienen un tratado para estos asuntos y ante este escenario, el proceso de Andrés Roemer podría quedarse detenido por años o tal vez, por siempre.
Es así, que tenemos a un agresor sexual litigando con total impunidad a miles de kilómetros de México y que, además, ha convertido esta distancia en su mejor arma para burlar el sistema mexicano. Un acto que se repite con frecuencia cuando se trata de hombres con poder que poseen la facultad de huir del país y no presentarse jamás ante los juzgados dejando en total vulnerabilidad a las víctimas.
Esta denuncia civil supone que ante lo acontecido, una de las mujeres lo expuso en redes y le generó serios daños a su imagen pública que lo presenta al mundo como un economista, escritor y catedrático de alto renombre, sin embargo, que se utilizara “agresor sexual” en su contra derivó en una seria afectación a su moral y en el entendido económico, el abogado de Andrés Roemer expondrá sus despidos en Universidades luego de darse a conocer el hecho, el rompimiento de sus contratos con TV Azteca y la retención que realizada por la Unidad de Inteligencia Financiera a sus cuentas, explica la abogada y periodista Ximena Ugarte para El País.
Andrés Roemer se ampara en el daño moral; la denunciada es periodista
La ley en la que se está amparando Andrés Roemer es la Ley de Responsabilidad Civil para la Protección del Derecho a la Vida Privada que estipula una penalización al periodista que haga abuso de su acceso a la información para difundir vida privada, herir el patrimonio moral y la imagen. Textualmente, el artículo 14 sobre el Derecho al Honor estipula lo siguiente:
El carácter molesto e hiriente de una información no constituye en sí un límite al derecho a la información, para sobrepasar el límite de lo tolerable, esas expresiones deberán ser insultantes, insinuaciones insidiosas y vejaciones, innecesarias en el ejercicio de la libertad de expresión y derecho a la información. Por lo tanto, la emisión de juicios insultantes por sí mismas en cualquier contexto, que no se requieren para la labor informativa o de formación de la opinión que se realice, supone un daño injustificado a la dignidad humana. (Artículo 14, Capítulo II: Derecho al Honor de la Ley de Responsabilidad Civil para la Protección del Derecho a la Vida Privada).
Cinco mujeres lo acusaron de abuso sexual ante la Fiscalía, mientras que un aproximado de 60 más, relataron en redes sociales que Andrés Roemer las había acosado y hostigado sexualmente. En este contexto, la única que ha recibido esta denuncia -intimidación- es una mujer periodista.
El motivo fundamental para este proceso, es que la víctima ejerce esta profesión y se le ha señalado por haber vulnerado las libertades de Andrés Roemer, es decir, que su denuncia se sostiene en que la periodista realizó un trabajo periodístico infundado donde hizo uso de su poder como comunicadora para abusar de su libertad de expresión y dañar la moral de su agresor.
Sobre esto, la abogada Ximena Ugarte comparte para El País que todas las expresiones que realizó la periodista no fueron como profesional, sino en calidad de víctima como cualquier otra mujer que exige justicia ante la Fiscalía.
Asimismo, se alega que no existe ninguna sentencia en nuestro país que declare culpable a Andrés Roemer de algún delito y “mucho menos de cualquiera de los que se le han imputado públicamente”, y es que, en un sentido estricto y burocrático, estas líneas son totalmente ciertas. No existe y tal vez, jamás existirá porque el proceso de Andrés Roemer está congelado a menos que Israel entregue de manera amistosa al escritor para que pueda darse seguimiento y se le imputen los delitos de los que se le acusan.
Sin embargo, lamenta la abogada Ximena Ugarte, para el estado mexicano Andrés Roemer no es un sujeto que sea prioritario para extradición, pues es más probable que se entable una conversación con Israel para extraditar a Tomás Zerón de Lucio, exfuncionario en temas de Seguridad Pública que ejerció durante los sexenios de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto. En este contexto, Andrés Roemer goza de impunidad y comodidad en tierras israelíes.
Finalmente, la especialista señala para el medio que sustancialmente, Roemer intenta probar que su víctima publicó la agresión sexual que vivió con la intención de dañarlo y sentenció que aunque la Fiscalía de la CDMX ha incorporado avances, existe una saturación de miles de casos de abusos y agresiones lo que entorpece el acceso a la justicia para todas las víctimas. Asimismo, afirmó que esta situación es lamentable pues se trata de una clara desigualdad donde esta clase de hombres poderosos, aunque agresores, consideran que tienen derecho a una imagen que guardar; “no ocurriría lo mismo si el acusado fuera un hombre que no tuviera poder político o económico."