Las mujeres de la vida contemporánea tenemos muchas actividades, pocas veces nos damos el tiempo para pensar y proyectar un negocio. Quizá la vida de Coco Chanel pueda darte un empujoncito para convertirte en una mujer emprendedora.
Para ser emprendedora debes conectarte contigo misma y saber qué idea, producto o servicio innovador puedes ofrecer. Como lo hizo Coco Chanel, la diseñadora francesa que se convirtió en ícono de la alta costura.
Chanel fue una aliada del feminismo porque liberó a las mujeres de los corsés y lo redujo a prendas más cómodas, sencillas y elegantes. Incluso, confeccionó los primeros trajes sastre, instauró el pantalón y el corte de pelo a lo garç.
Gabrielle “Coco” Chanel vivió en un orfanato que marcó el resto de su vida, incluso influyó en la confección de su ropa, se inspiró en los uniformes que portaba. Su éxito se debe a su confianza y grandes habilidades.
"Me molesta que la gente diga que tuve suerte. Nadie ha trabajado más duro que yo", dijo la diseñadora más famosa del siglo XX sobre su carrera.
¿Qué podemos aprender de Chanel para ser mujeres emprendedoras?
1. PASIÓN: Chanel aprendió a coser en el convento, trabajó en una tienda de ropa hasta que decidió poner la propia. Compró unos pocos sombreros y los transformó con su estilo innovador y revolucionario. No son los medios sino la actitud.
2. INNOVACIÓN: Chanel se salió de los estereotipos de moda e implantó el suyo. Así que no tengas miedo de ser diferente, cree en ti misma.
3. RELACIONES PÚBLICAS: La pobreza no fue un impedimento para que Chanel no supiera relacionarse con empresarios, pintores, políticos y personas con poder económico que le permitieron darse a conocer dentro de estos círculos; fue así como sus productos siempre fueron apetecidos por las altas damas de sociedad. ¡Hazte de amistades, socios y contactos que te ayuden a fortalecer tu empresa!, deja a un lado los prejuicios, así como ella.
4. PERSEVERANCIA: A lo largo de su vida empresarial, durante la primera y segunda guerra mundial, Coco tuvo que cerrar sus tiendas con cuatro mil empleados. Esto no la venció, a sus 71 años volvió abrir por tercera vez sus tiendas. Podrás perderlo todo, pero si confías en tu producto y estás dispuesta a arriesgar, volverás a imponerte hasta convertirte en leyenda.
5. PROACTIVIDAD: Coco Chanel siguió trabajando hasta los 81 años de edad. Cuando haces algo que te gusta, la inspiración y creación vendrán solas. La juventud no es una limitación, nunca es tarde para que emprendas esa idea que tienes en mente.
Por último, nosotras tenemos una herramienta de nuestro lado que no tenía Chanel, la tecnología, así que aprovéchala, puede ser útil para que te conviertas en una emprendedora.
(Diana Juárez)