El manejo o control de las emociones puede ser un asunto complicado para algunas personas. En el caso de las mujeres, muchas veces nos cuesta trabajo sentirnos enojadas y si lo hacemos de inmediato sentimos culpa. En el caso de los hombres expresar la felicidad resulta complicado. En el tema de las emociones también hay un estereotipo de género. Sin embargo, tanto hombres como mujeres debemos permitirnos sentir

En algunas ocasiones las emociones se autorregulan pero en otras no. La razón o el pensamiento desaparecen y sólo se queda el sentimiento. La psicóloga Silvia Álava dice para El País que cuando “sentimos algo muy fuertemente, se activa demasiado e impide que el cerebro funcione y puedas razonar más allá”,  podemos percibir que hay una educación emocional nefasta.

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¿Cómo saber si estamos respondiendo bien o mal a nuestras emociones?

La falta de habilidades para gestionar las emociones es un tema en el que se ha ocupado la psicología y la psiquiatría. Ambas disciplinas han desarrollado terapias respaldadas por científicos para tratar los temas emocionales. La terapia cognitiva conducta se ha enfocado en este problema.

También existe la terapia de aceptación y compromiso. Esta consiste en experimentar lo que sentimos sin juzgarlo. La regulación vendrá a partir de la aceptación. Es como si te va a visitar un viejo amigo, no le cuestiones ni juzgas por qué está en tu casa, lo invitas a pasar y le preguntas ¿qué te trae por aquí? ¡Y listo! Así debemos hacer cuando nos visita el enojo, la tristeza, la alegría o la sorpresa.

Claves para controlar las emociones

1. Identifica lo que sientes

El primer paso es identificar lo que estás sintiendo. El ejercicio es reconocer si lo que sientes es tristeza o asco. Quizá ya hayas vivido las seis emociones básicas: la alegría, tristeza, enfado, miedo asco y sorpresa. Aunque puede haber un mix de ellas.

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2. Deja sentirte

En algunas ocasiones podemos sentir varias emociones a la vez, nos enfadamos por algo que en realidad nos duele, al juzgarnos no podemos identificar lo que estamos sintiendo. El chico que te gusta dejó de escribirte y te enoja, en realidad, te duele porque sientes su indiferencia -podría ser-.

“Hay que entender que las emociones son completamente instintivas, que irrumpen y no se pueden evitar. Y hay que dejarse sentirlas, comprenderlas y gestionarlas para que no nos dominen. Cuando estás triste es así y punto, y además tienes derecho a estarlo”, explicó la psicóloga Elena Dapra.

3. En qué parte del cuerpo sientes esa emoción

Un ejercicio para reconocer lo que estamos sintiendo es identificar en qué parte del cuerpo se siente. La alegría se refleja en la cara, a través de una sonrisa, el enojo en el ceño o se pone tiesa la cara o la tristeza que puede sentirse en el pecho.

Después deber ir de reversa, cómo fue que llegaste a esa emoción. No se trata de que tengas toda una investigación sino que seas consciente de los eventos que desataron eso que sientes.

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Al final, el objetivo es aprender a escucharnos a nosotros mismos, dicen las expertas. Las emociones son información sobre lo que nos ocurre”, aclara Álava.  Ya que nos permitimos sentirlas sigue reflexionar sobre ellas e identificar qué nos estamos diciendo a nosotros mismos.

TIP: Un consejo de la psicóloga Dapra es hacerle frente a lo que sientes, ya sea hablando contigo frente al espejo, con un autorretrato o llevar un diario. Pese a esto puedes tener una ataque de enojo o euforia. Sin embargo, si estás en contacto contigo serán menos las veces que tengas una reacción no deseada.

Con información de El País

(Diana Juárez)