¿Alguna vez te has preguntado qué tanto daña al cuerpo de las mujeres el uso recurrente de zapatos de tacón? Existen muchos productos para la belleza y apariencia femenina que resultan ser realmente dañinos para la salud de las mujeres, entre ellos se encuentran los zapatos de tacón.
Se piensa que el uso de tacones estiliza la figura de las mujeres, favoreciendo áreas como los glúteos y las piernas.
Más allá de la apariencia del cuerpo femenino, en muchos lugares los zapatos de tacón son sinónimo de elegancia o “buena presentación”. Así, los tacones afectan principalmente a las mujeres que trabajan en oficinas, donde la vestimenta comúnmente usada implica el uso de zapatillas.
En Japón la escritora y actriz Yumi Ishikawa, inició todo un movimiento en contra del uso obligatorio de tacones para las mujeres en espacios laborales. Ella trabajaba en una funeraria, donde asegura que la obligaban a llevar tacones de entre 5 y 7 centímetros, lo que le provocaba serios dolores.
Yumi Ishikawa. Fotografía tomada de internet.
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¿Cómo afecta el uso de tacones a las mujeres?
Datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), revelan que un 70 % de las mujeres entre los 20 y 60 años usan tacones con regularidad. A pesar de que estéticamente lucen bien, el uso recurrente de tacón puede provocar problemas de salud que se hacen notorios con el paso del tiempo.
Los zapatos de tacón hacen que el pie sostenga el peso del cuerpo en un solo punto, por lo tanto, hace que se desequilibre y, en consecuencia, causa un exceso de trabajo para los músculos y huesos.
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“En resumen, el uso regular de tacón no sólo nos hace adoptar una postura antinatural, sino que puede perjudicar nuestra salud”, asegura Mejor con salud, un sitio especializado en medicina
Investigaciones han demostrado que las mujeres sufren hasta cuatro veces más problemas en los pies que los hombres, y gran parte de estos problemas son consecuencia del uso frecuente de tacones.
De acuerdo con expertos, al inclinar el cuerpo hacia adelante, se hace un gran esfuerzo sobre la columna vertebral y con el paso del tiempo, puede derivar serios problemas en la columna.
Además, la altura del zapato obliga a los dedos a forzar su posición. Esto genera una constante presión que puede acabar desarrollando callosidades, juanetes o dedos de martillo.
También, la rodilla se sobrecarga al usar tacones porque la tensión se incrementa y produce flexión de la articulación, para después necesitar un equilibrio mediante la contracción del cuádriceps y recto anterior de la pierna.
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“Todos estos cambios biomecánicos también pueden provocar a largo plazo el envejecimiento y desgaste de los discos intervertebrales. Por lo que puede ocasionar futuros problemas en los huesos, la columna y la espalda”, afirman expertos.
“No podemos dejar de mencionar que el uso frecuente de tacones también afecta el sistema circulatorio de las piernas. Puede causar trastornos vasculares, dolores, hinchazones y la aparición de esas antiestéticas venas varices”, agregan.
Debido a todos los problemas de salud generados por el uso regular de tacones, se recomienda evitar su uso de forma cotidiana, y priorizar el uso de zapatos cuyo tacón no supere los dos o tres centímetros de altura.
Con información de: Mejor con salud