El pasado 23 de enero del año presente, Diego Urik fue declarado culpable por el feminicidio de la maestra Jessica González, quien era su pareja sentimental, pero no fue hasta el día 15 de febrero que el juez Ariel Montoya Romero sentenció a 50 años de cárcel al feminicida, además de esto deberá pagar un millón 246 mil pesos por reparación económica del daño y 12 sesiones de tratamiento psicológico a los padres y hermanos de Jessica.
Así mismo se informó que el feminicida cumplirá su sentencia en el Cereso Lic. David Franco Rodríguez, también conocido como Mil Cumbres, ubicado en Morelia, Michoacán. A pesar de que Urik pidió no estar presente cuando sen dictara sentencia, la Fiscalía General del Estado de Michoacán (FGE) negó su petición.
En total, fueron presentadas 120 pruebas con las que se determinó que Urik es culpable del feminicidio de Jessica González. Entre los elementos mencionados, el juez determinó que hubo saña, crueldad y nulo arrepentimiento sobre el feminicidio de Jessica ocurrido en Morelia el pasado 21 de septiembre del año 2020.
Las acciones que ejecutó fueron evidentemente con desprecio a la mujer, vulnerando con ello su derecho a la integridad psíquica, física y a su dignidad como persona, afirmó el comunicado de la FGE.
Ante la sentencia dictada, la familia de Jessica expresó su alivio al finalmente terminar el proceso, pero la madre de Jessica afirmó que, a pesar de ser la pena máxima, no es suficiente ya que esto no le regresará a su hija y tampoco cree que la compensación económica pueda reparar el daño causado por el feminicida y señaló que no es una garantía que él pague lo que se indicó.
La crueldad con la que lo hizo se vio más que clara y el juez lo tomó en cuenta, pero se me hizo poco, no esperábamos más […] (Respecto a la reparación económica) ¿Qué me van a reparar? O que me diga cómo lo va pagar, ni siquiera lo va pagar, no es una reparación del daño, eso es algo estúpido, ni siquiera se ve comprometido a pagar absolutamente nada, afirmó Verónica, madre de Jessica.
Horas antes de que el juez diera a conocer la resolución final del caso, un grupo de mujeres feministas realizaron una manifestación a las afueras de Centro de Readaptación Social (Cereso) Lic. David Franco Rodríguez en donde, además de acompañar a los familiares de Jessica, exigían la pena máxima para el feminicida; al conocer por fin la sentencia de Urik, las colectivas y familiares de la joven festejaron al grito de “¡se logró!”, mientras globos blancos y lilas recorrían el cielo de Morelia.
Ni una más: el feminicidio de Jessica
El pasado 21 de septiembre del año 2020 la maestra Jessica González fue reportada como desaparecida ante la Fiscalía General del Estado de Michoacán, cuatro días después el cuerpo sin vida de la joven que a penas tenía 21 años fue encontrado con múltiples golpes y signos de violencia sexual cerca del fraccionamiento donde vivía Diego Urik quien al ser el principal sospechoso fue buscado por las autoridades, pero él ya había salido del estado.
El 30 de septiembre del mismo año fue detenido en un hotel de Jalisco, el juicio comenzó en junio de 2022, medios locales de Michoacán aseguraron que Diego Urik tuvo 12 abogados durante el proceso legal e incluso se reportó que, mientras estaba detenido, el joven tenía un dispositivo móvil con el que mantenía comunicación con sus familiares: así mismo se afirmó que el padre del feminicida amenazó a la familia de Jessica tanto dentro del penal como a través de mensajes de texto.
Fue así como, después de un largo proceso en donde los actores claves fueron los amigos del feminicida al testificar en su contra, la Fiscalía General de Justicia del Estado de Michoacán pudo dictar una sentencia a Urik.