Hasta hace unas semanas, se había anunciado que Vera Carrizal, agresor de la saxofonista María Elena Ríos permanecería en prisión domiciliaria, sin embargo, esta resolución fue disuelta el día de ayer y se determinó que el proceso continuará con Vera Carrizal desde prisión.
A través de redes sociales, María Elena Ríos ha brindado información sobre el proceso y su acceso a la justicia, atravesando por una constante revictimización, jueces que la excluyeron y el temor de que su caso quede en absoluta impunidad. Ahora, ha publicado un video donde indicó que Vera Carrizal no saldría de prisión.
“La resolución se pudo revertir y mi agresor continuará llevando su proceso en prisión”, indicó Elena Ríos vía Twitter.
Paralelamente, en la información que publicó pidió a la ciudadanía y a las autoridades que su caso no quedara rezagado, pues durante esta resolución, Vera Carrizal mostró una actitud hostil y violenta en su contra, pero también, en contra de su abogada, por lo que ha señalado que a estas alturas, continúa temiendo por su vida y la de sus allegados.
Finalmente, condenó el actuar de Teódulo Pacheco Pacheco del Circuito Judicial de la Mixteca, ubicado en Huajuapan de León, pues de acuerdo a Animal Político, el juez había anunciado a los medios que Vera Carrizal se encontraba muy enfermo, por lo que se determinó la prisión domiciliaria. Acto seguido, María Elena Ríos señaló el proceso revictimizante que se ejerció en su contra, pues en reiteradas ocasiones, fue silenciada, excluida e ignorada por Pacheco Pacheco.
“Por favor, no me deje sola presidente López Obrador”, indicó la saxofonista.
En ese llamado, también exhortó a la secretaria de seguridad Rosa Icela Rodríguez, al fiscal de Oaxaca, Fernando Rodríguez y finalmente, a Salomón Jara, gobernador, pues considera, se han mostrado indiferentes ante la situación y no han hecho mayor pronunciamiento al respecto, dejándola en una situación de vulnerabilidad abandono estatal.
El proceso legal de María Elena Ríos aún no termina, y este anuncio es apenas el inicio de una batalla de resistencia para encarar al estado mexicano.
“No permitamos que el miedo nos doblegue, tenemos que transformarlo en fuerza, fortaleza, en grito, en un llanto que permita que nuestras lagrimas florezcan en nuestras causas justas y legítimas”, mencionó.
La ley ácida lleva el nombre de María Elena Ríos
El pasado 2 de marzo, el Congreso de Puebla aprobó la Ley Malena. Esta ley busca el reconocimiento de los ataques con ácido como un delito independiente y no un agravante, así como el considerar penas más severas contra la persona responsable del crimen.
De acuerdo con El Financiero, con la Ley Malena, se impondrá una pena de entre ocho y hasta 30 años de cárcel en el Código Penal del Distrito Federal, mediante diversos agravantes para castigar la violencia ácida, que será considerada como tentativa de feminicidio cuando las lesiones “provoquen deformidad o daño físico permanente en algún órgano interno, externo u ocasione la pérdida del oído o la vista”.
A su vez, el Ministerio Público tendrá la obligación de garantizar la reparación del daño integral, adecuada, eficaz, efectiva y proporcional a la gravedad del daño y las instituciones de salud deberán llevar un registro de las víctimas de los ataques con ácido.