Es una realidad que, hoy en día, hay miles de niñas y niños que no conocen la vida sin pantallas; el desarrollo de las nuevas tecnologías se ha vuelto parte de la cotidianidad desde hace varios años, pero son las nuevas generaciones de infancias quienes han nacido con ello y evitar que naveguen por internet parece ser una tarea imposible.

Debido a este crecimiento exponencial del internet y los celulares, las niñas y niños se encuentran sumamente expuestos a la marea de información que existe en internet y cuando se encuentran en crecimiento las dudas que no pueden ser preguntadas a sus madres y padres sobre la sexualidad se ven respondidas por videos pornográficos que en nada se parecen a la realidad, debido a esto, el psicólogo y sexólogo Felipe Hurtado afirma que es urgente incorporar una educación sexual integral desde los niveles básicos de primaria.

De acuerdo con un informe de la asociación Save The Children, 70% de los adolescentes consume pornografía, esto significa que su concepción sobre la sexualidad está basándose en una industria que explota y cosifica a las mujeres, así mismo genera nociones incorrectas sobre las relaciones sexuales y refuerza los estereotipos de género, es por ello que Hurtado insiste en brindar información correcta y concreta a las niñas, niños y adolescentes sobre la sexualidad para que así puedan contrastarla con la que se viraliza en redes sociales o lo que se exhibe en la pornografía.

Hoy en día, a los 11 años ya se dispone del primer móvil con acceso libre a internet y deben tener una información correcta que contraste con esa información y que no sea solo el porno lo que eduque a la gente joven, afirma el psicólogo y sexólogo Felipe Hurtado.

Además de evitar que las niñas, niños y adolescentes se eduquen con la pornografía que existe en internet, la educación sexual integral es necesaria desde la etapa infantil porque el reconocimiento del cuerpo puede ayudar a identificar cuando una niña o niño está sufriendo algún tipo de abuso sexual y así actuar de manera más rápida y eficaz.

Educación sexual para reconocer el abuso

Cuando hablamos de sexualidad no solo hablamos de placer sexual o de relaciones sexuales, hablamos de identidad, de orientaciones, de relaciones consensuadas, de ausencia de violencia, subraya el psicólogo y sexólogo Felipe Hurtado para el portal Efeminista.

Así mismo, Hurtado afirma que las agresiones sexuales se producen por el sistema patriarcal donde el hombre considera que tiene “derecho a utilizar a las mujeres como algo propio y que, asociado a cualquier tipo de signo que considera que la mujer acepta tener relaciones sexuales, se deja llevar y no controla”.

Esos mensajes, afirma, hay que combatirlos no solo con leyes, que son la parte punitiva, sino que deben ir acompañados de una “educación en valores que trabaje la igualdad. Tiene que haber detrás una educación para que la persona sepa discernir, si se mete en una página web, si es o no es correcto”, afirma Hurtado para Efeminista.

Aunque la educación sexual siempre ha estado en las leyes no se ha hecho nunca en el currículo educativo obligatorio, porque la sexualidad está sujeta al mundo de los valores y hay familias que están en contra de ello, comenta Felipe Hurtado.

Educación sexual sin tabús

El tema de la sexualidad se ha convertido en un tabú por diferentes cuestiones que están ligadas principalmente a las religiones, al sistema patriarcal y a la interpretación que se le ha dado a lo largo de los años, así mismo se considera que la mujer fue mayor victima en todo esto ya que la religión la hizo ver de manera impura y en forma de pecado, con simples “pruebas” como la menstruación o la lactancia, algo tan natural que perjudico el goce sexual incluso en la actualidad, afirma el artículo El Tabú Sexual más allá de la Moral.

Estos tabús cargados de moralidad han logrado que la educación sexual sea casi nula; según datos del Consejo Nacional de Población, las juventudes en México inician su vida sexual entre los 15 y 19 años de edad, en promedio. El 97% de ellos conoce al menos un método anticonceptivo, sin embargo, más de la mitad no utilizaron ninguno en su primera relación sexual.

Con cifras como estas, es urgente implementar educación sexual integral desde etapas muy tempranas y esto no significa que las niñas y niños serán expuestos a temas que quedan fuera de su comprensión, más bien es necesario modificar cada uno de los temas de acuerdo al nivel escolar en el que se presentan para así lograr la comprensión deseada e ir escalando con los conocimientos presentados de acuerdo a las edades.

De acuerdo con el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA, por sus siglas en inglés), la educación sexual integral permite a las y los jóvenes proteger y promover su salud, su bienestar y su dignidad al ofrecerles las herramientas necesarias en materia de conocimientos, actitudes y habilidades.

La educación sexual integral es condición previa para ejercer plena autonomía corporal, lo que exige no sólo el derecho de tomar decisiones sobre el propio cuerpo, sino también la información para tomar estas decisiones de manera sensata. Debido a que tienen como fundamento los principios de derechos humanos, los programas de educación sexual integral ayudan a fomentar la igualdad de género y los derechos y el empoderamiento de las y los jóvenes, afirma UNFPA.