Jasbeer Kaur, a los 25 años, estuvo embarazada de tres niñas, la doctora le recomendó abortar ya que sería difícil criar a tres hijas. Es decir, le sugirió practicar un feticidio por cuestión de género que es la acción intermedia entre el aborto y el infanticidio, se diferencia del aborto porque aquí la finalización del embarazo no es voluntaria.

En la India y China se realizan 666 mil 300 feticidios femeninos anuales, son los mayores generadores de desaparecidas en el mundo. Incluso su balanza de sexos está descompasada con 112 niños por cada 100 niñas.

Debido a esto, en la India está prohibido decir el sexo del bebé. Kaur recuerda que la decisión de tener a sus trillizas no le gustó a su esposo ni a sus suegros. "Ninguna niña había nacido en la familia de mi esposo en tres generaciones. Y dijeron que no iban a permitir que vinieran al mundo tres de golpe. Me dieron un ultimátum: aborta o vete", rememora Kaur. Y se marchó.

La comunidad considera que la decisión de Kur , sobre tener tres hijas, es penosa. Sin embargo, ella piensa lo contrario. "La gente aquí en mi pueblo a menudo me dice: 'Pobrecita, deberías haber tenido al menos un hijo en lugar de tres hijas'. Y les digo: '¡Ahórrense esa basura! Soy mujer y estoy orgullosa de haber criado a estas chicas que ahora son adultas", relata.

Lee: Narco usa a mujeres como esclavas sexuales y halcones, delicado: Segob

Matrimonio infantil y mutilación genital femenina

No sólo el feticidio pone en riesgo la vida de las mujeres. Ya que nacen la bebés, a los 12 años, de repente los padres han decidido que su hija ya no asistirá más a la escuela y se casará con el vecino que le triplica la edad. A los 16 años deciden mutilarle los genitales. 

Pero desde los cuatro años, esta niña escucha a sus padres quejarse porque es una carga, ya que no fue niño, explicó Natalia Kanem, directora de  el Fondo de las Naciones Unidas para la Población (UNFPA, por sus siglas en inglés).

Kanem espera que para 2030 se logre acabar con la mutilación genial femenina y el matrimonio infantil, por ello es necesario lograr la igualdad de género donde se involucren hombres y jóvenes que también luchen por los derechos de las mujeres.

Lee: Covid puede retroceder acceso a educación de niñas en Latinoamérica

Este 2020, se estima que 4,1 millones de niñas serán sometidas a la mutilación genital. En total, 200 millones de mujeres en el mundo han sido sometidas a esta violencia. Hoy, en un solo día, 33 mil 000 niñas menores de 18 años serán obligadas a casarse, en la mayoría de los casos con hombres mucho mayores que ellas. Se sumarán a los 650 millones de esposas que fueron forzadas a enlazarse antes de alcanzar la mayoría de edad.

En Guatemala el matrimonio infantil está presente. En 2015, el Código Civil de Guatemala permitía las uniones desde los 14 años ellas y 16 ellos. Y los cambios que se produjeron desde entonces dejaban la puerta abierta a los enlaces entre menores. Hasta 2017. En esta lucha participó la activista de 19 años Alejandra Teleguario, quien asegura que este fue un avance importante pero aún hay datos preocupantes.

Durante esta cuarentena, de enero a mayo de 2020 se han registrado 46 mil 863 embarazos de mujeres de 10 a 19 años. Una cantidad alarmarte, donde se observa que la educación sexual sigue siendo un tabú en el país, comenta Teleguario.

Los derechos por las mujeres no pueden esperar

Lee: Tlalpan, GAM y Venustiano Carranza, más peligrosas para las mujeres

Las mujeres no pueden esperar, sus derechos no pueden dejarse de lado debido a la emergencia sanitaria por covid-19, huracán o nada. “Deben ser una prioridad. Es lo que exigen los Objetivos de Desarrollo Sostenible [ODS]", reclama Kanem en una entrevista para El País.

También, las mujeres se ven limitadas a seguir con sus estudios. En opinión para la directora de UNFPA es irónico que no quieran tener hijas. “Encontramos que muchos quieren chicos para que, cuando sean adultos, les mantengan. Pero a veces eso no sucede e incluso tienen problemas para encontrar esposa. A veces es por cuestiones religiosas o porque es el hombre el que hereda y perpetúa el nombre de la familia”.

Pero esto puede cambiar, si se dan los recursos para que los ancianos cuentan con seguridad económica o se pone en valor que una hija educada también cuadra de sus mayores, podría evitar estas acciones que coartan la vida de las mujeres.