En conferencia magistral, Sayak Valencia, activista queer y transfeminista, se posiciona ante los cuestionamientos que se hicieron desde el CEIICH UNAM sobre la teoría queer y la defensa de los derechos de la comunidad trans. “El transfeminismo no es una superación del feminismo, sino un posicionamiento contra el generismo”, dijo.

En la conferencia magistral “Políticas post-mortem y resistencias transfeministas” por Sayak Valencia nos habla cómo se narran los transfeminicidos y feminicidios y expone el nuevo concepto que está desarrollando: “la política post-mortem”.

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Ella consdiera que la muerte no es el final, sobre todo en las luchas feministas, ya que después de la muerte hay una repotlitización.

“El afecto mantiene vivo al otro, una forma de organización afectiva, se crea una comunidad por los que no están y se crea justicia”.

“No como algo que se clausura, es el afecto que mantiene vivo eso, prevalece una forma de organización afectiva… Es una forma de organización de las luchas, política post-mortem”, dijo la académica transfeminista.

Sobre esto dio citó el cimarronaje en Colombia, las madres buscadoras en el norte, las caravanas de madre migrante, la activista aclara que no expone esto como un esencialismo del sujeto madre sino como la politización de sujetos que se agencian, que cuidan y sostienen la vida desde hace mucho tiempo, no por que sean madres sino porque el parentesco se trabaja desde el afecto.

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LOS CUERPOS DE LAS MUJERES

La activista queer y transfeminista Sayak Valencia lanzó la pregunta “¿por qué los 43 son más importantes las muertas de Juárez?”, a manera de reflexión del posicionamiento del Estado ante el número de feminicidios que existe en México.

“Los 43 son una comunidad de lucha, hay una comunidad que los cobija y hace guiños contra las dictaras en el Cono Sur como los desparecidos en Chile, es el resto dignificado de esas personas, no es el cuerpo masacrado, casi nadie quiere identificarse con los trozos de carne de cuerpo”, dice en conferencia la activista queer tras comparar cómo se muestra desde los medios a estos desparecidos versus los feminicidos.

“Hay que mostrar los rostros de estas mujeres, no hay que reproducir la violencia, mostrar los cuerpos masacradas no es una forma de denuncia, hay que mostrar los rostros”, señaló Sayak.

“Lo queer se está convirtiendo en un movimiento cosmético, hay que tomar que queer no significa sólo homosexual sino una perspectiva crítica contra el sistema en general”, apuntó la académica.