Hannah Gallop de 20 años, decidió someterse a una cirugía de reducción de senos para que los hombres no la acosaran, la joven comentó en redes que la idea de ser vista con morbo le parecía repugnante. 

Gallop explicó que después del procedimiento los hombres dejaron de buscarla y hacerle comentarios sexuales.

“Me hizo darme cuenta de que la mayoría de ellos probablemente sólo miraba mis senos, lo cual es realmente repugnante y una de las razones por las que me operé”, declaró a News. 

La mamoplastía de reducción ha comenzado a ser un procedimiento popular entre mujeres que se sienten incómodas con el tamaño de sus senos. Algunas de las afecciones más comunes por el que se realiza este procedimiento incluye intensos dolores de espalda, cuello, hombros, sarpullidos y hormigueos en brazos.

¿Por qué decidió someterse a cirugía?

Meissa Mason de 21 años de edad,  también documentó su caso en Tiktok con una serie de 14 vídeos donde respondió preguntas de sus seguidoras, además de narrar los insoportables dolores de espalda y hombros que padeció desde los 17 años. 

La joven contó que uno de los problemas que enfrentaba con más frecuencia era vestirse, pues nunca logró encontrar ropa que se amoldara a su cuerpo y la hiciera sentir segura. 

La sexualización de las mujeres por tener senos grandes deviene de una serie de factores sociales; la pornografía es uno de ellos.

De acuerdo a la psicóloga Marta Martín, las redes sociales y el porno influyen negativamente en la percepción, pues se trata de tipos de cuerpos que condicionan la excitación, iniciando un círculo vicioso y retroalimentándose constantemente. 

La comodidad, salud y autoestima no debe estar sujeta a los estándares dictados y mucho menos, para la satisfacción de terceros.