Desde hace algunas horas, la influencer Pautips se volvió tendencia en redes sociales debido a un video subido a su canal de YouTube en donde afirmó que los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) son “obra de Satanás”. En el video, la influencer comienza hablando de su experiencia con los TCA’s y cómo es que gracias a su acercamiento a la espiritualidad religiosa ha podido superarlos.
Si bien este video pudo haberse quedado en contar su experiencia, lo que a usuarias y usuarios les molestó fue que intentó justificar su recuperación a través del conocimiento de “la palabra de Dios” e incluso mencionó que esperaba que su contenido fuera tomado en serio “porque es la forma en la que obra Dios, a través de mi canal”.
Yo pido porque puedas abrir tus ojos y mostrar la mentira a la que Satanás los tiene sometidos, que se den cuenta que esto es una guerra espiritual, esto no es una guerra física, que esa voz que escuchan en sus cabezas no es de ellas, sino de Satanás causando estragos en sus mentes, inició su video.
Tras la publicación de su video, miles de usuarios en diversas plataformas han manifestado su indignación por el discurso de la joven de 28 años de edad, pues consideran que mezcla un tema de salud pública con religión y afirman que está desinformando a sus seguidoras con las declaraciones que, desde su experiencia personal, claramente no reflejan la realidad colectiva.
Pautips ha afirmado ser cristiana y a pesar de que explicó que no buscaba demeritar el trabajo de médicos y especialistas, las criticas continuaron ya que la comunidad en redes sociales afirmó la gran responsabilidad que tiene debido a la cantidad de personas que consumen su contenido, por lo que no es suficiente deslindarse de la responsabilidad de desinformar y crear aún más prejuicios en torno a los TCA’s y la salud mental en general.
Quiero comenzar diciendo que esto no le quita ningún valor a los tratamientos tradicionales de psicología, nutrición y psiquiatría. De hecho, yo pasé por varios muy efectivos, pero creo que es importante la parte espiritual, afirmó.
Los TCA’s no son un “capricho”
Los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) son afectaciones psicológicas de carácter grave que conllevan comportamientos anómalos en cuanto a la conducta de comer, como las dietas restrictivas, saltear comidas, los atracones, provocarse el vómito o ejercicio en exceso entre otras conductas. Estos trastornos son capaces de desencadenar enfermedades físicas graves y, en último término, la muerte.
La anorexia, bulimia o el trastorno por atracón son algunas de las múltiples caras de los TCA. En México, de acuerdo con la Secretaría de Salud, la anorexia y la bulimia en niñas, niños y adolescentes aumentó un 300% en los últimos 20 años; estos trastornos tienen la mayor tasa de mortalidad que cualquier enfermedad mental ya que se calcula que el 10% de los jóvenes con anorexia y el 17% con bulimia han intentado suicidarse.
Hablar de TCA únicamente desde la perspectiva médica, incluso solo desde la psicología clínica, es demasiado reduccionista. El contexto social, compartido en estos tiempos también de forma digital, juega un importante papel en la incidencia de los trastornos alimenticios. Cuestiones como la gordofobia, la promoción de dietas restrictivas o la sexualización de los cuerpos actúan como debilitadores de nuestro sistema mental frente a los TCA. La empatía, además de ponerse en el lugar del otro, debe convertirse en lucha contra estos estereotipos instalados en la sociedad, afirma el portal Filo.News.
Los estándares de belleza patriarcales, en donde se dice que la mujer debe ser delgada, ocasiona que los TCA sean cada vez más frecuentes y, contrario a lo que se piensa, el tratamiento para esto debe ser multidisciplinario ya que se involucra la salud clínica, mental y nutricional para así sanar en todas las secuelas de este trastorno.