La ola de violencia hacia la los afrodescendientes tiene historia en Estados Unidos, desde el asesinato de Martin Luther King en 1968 ha provocado que las alcaldesas negras del país protestaran contra la la brutalidad policial contra las minorías.
Las alcaldesas afros representan apenas el 5 % de los alcaldes de las ciudades con más de 100.000 habitantes en Estados Unidos, las líderes de Washington D.C., Chicago (Illinois), San Francisco (California) y Atlanta (Georgia), entre otras, han ocupado portadas en los últimos días por su postura contra el asesinato de George Floyd.
Muriel Bowser, la alcaldesa de la capital estadounidense
El caso más sonado ha sido el de Muriel Bowser, la alcaldesa de la capital estadounidense, que desafió al presidente, Donald Trump, por su cuestionada orden de desplegar la Guardia Nacional en esa urbe, ahora ya retirada, para disuadir a los manifestantes.
"Black Lives Matter", protesta contra Trump
A unos metros de Casa Blanca, Bowser ordenó pintar un gran mural de color amarillo en el suelo con un mensaje para Trump: "Black Lives Matter" ("Las Vidas Negras Importan") y puso el lema como nombre de esa sección de la calle 16 del distrito autónomo.
La elección del lugar tuvo dos condicionantes, además de estar frente a la residencia presidencial, también fue el escenario donde días antes la policía dispersó brutalmente a los manifestantes para que Trump pudiera hacerse una fotografía sujetando una Biblia delante de una iglesia washingtoniana.
"Queremos llamar la atención para asegurarnos de que nuestra nación es más igualitaria y justa y de que las vidas negras y la humanidad negra importan en nuestra nación", expresó la alcaldesa demócrata durante la inauguración de la nueva denominación de ese tramo de calle.
“Simplemente asqueada”, dijo la alcaldesa de Atlanta
Keisha Lance Bottoms, la alcaldesa afroamericana de Atlanta
La alcaldesa afroamericana de Atlanta, Keisha Lance Bottoms, que lleva dos años en el cargo dijo sentirse “simplemente asqueada” contra el el asesinato de Floyd a manos de un policía y tres colegas cómplices en Mineápolis (Minesota, EE.UU).
Su declaración después de que Trump utilizara el nombre de George Floyd para evaluar los datos del último informe de empleo, que superó las expectativas de los economistas.
Trump aseguró que el pasado viernes fue "un día genial" para Floyd por los datos de recuperación económica que mostró el informe, pese a que el afroamericano falleció el pasado 25 de mayo.
"Simplemente muestra que este presidente es incapaz de mostrar ningún tipo de empatía. Siempre se equivoca, una y otra vez, y creo que tenemos que dejar de esperar algo de él", comentó la también demócrata.
En una de las protestas, Bottoms agarró el megáfono para recordar que ella puede ser actualmente alcaldesa "gracias a sus antepasados esclavos negros", señaló que la muerte de Floyd le dolió como si fuera su "madre" y despidió a dos policías por abusar de su fuerza durante las protestas.
"Soy madre de cuatro niños negros en EE.UU., uno de ellos tiene 18 años. Cuando vi el asesinato de George Floyd, me dolió como si fuera su madre", apuntó.
Alcaldesas han sido más que testigos de la violencia contra su comunidad
London Breed, alcaldesa de San Francisco
Las alcaldesas no sólo han sido testigos de la violencia de las autoridades contra sus comunidad, también la han padecido. London Breed, la encargada de manejar la ciudad de San Francisco explicó que su primo fue asesinado por el Departamento de Policía de San Francisco en 2006, un episodio que le marcó su lucha futura por los derechos de los afroamericanos.
"Sí, soy la alcaldesa, pero primero soy una mujer negra", señaló en un discurso televisado.
En ese alegato, Breed lamentó estar "enferma y cansada" de ver morir negros a manos de agentes de policía, situaciones que le hieren y le frustran.
"Ser negro no debería ser sentencia de muerte"
Lori Lighfoot, alcaldesa en Chicago
También comunicó su rabia a la multitud Lori Lighfoot, que se convirtió en 2019 en la primera alcaldesa negra y abiertamente gay de EE.UU. en Chicago.
Para ella, es "imposible" no tomarse el asesinato de Floyd y la forma en la que ocurrió "de manera personal".
"Ser negro en EE.UU. no debería ser una sentencia a muerte", apuntó, con rostro cansado tras participar en algunas de las protestas.
Está por ver ahora si estas fuertes posiciones de las alcaldesas negras contra la brutalidad policial en EE.UU. significarán que sus nombres se empiezan a tener en cuenta a nivel nacional para ocupar cargos políticos más elevados.