El orgasmo femenino sigue siendo un tema del que se conoce muy poco y las creencias populares nos han dicho que las relaciones sexuales heterosexuales son la única forma de conseguirlo, sin embargo, cada vez hay más evidencia que indica que existen factores mucho más importantes que la penetración para llegar al clímax sexual.

De hecho, hay estudios y encuestas que confirman que las lesbianas o las mujeres que tienen sexo entre mujeres, disfrutan mucho más en sus encuentros íntimos en comparación con aquellas que son heterosexuales.

 

Lesbianas tienen más orgasmos

Un estudio publicado en la revista científica The Journal of Sexual Medicine hizo un análisis de los hábitos sexuales de unas 3,000 personas solteras de diferentes orientaciones sexuales y demostró  que mientras sólo el 65% de mujeres heterosexuales que tienen sexo con hombres alcanzan un orgasmo, en las lesbianas la cifra asciende hasta un 86%.

Otras cifras indican que las lesbianas llegan al orgasmo, el 75% de las veces que tienen sexo, en comparación con el 61% de las mujeres heterosexuales.

Según la ginecóloga mexicana Cynthia Dickter, esto se debe a que las mujeres que tienen sexo con otras mujeres están mucho más familiarizadas con su cuerpo, aunque no es la única razón por la que ellas tienen más orgasmos.

Una de las barreras para que las mujeres heterosexuales alcancen el orgasmo es que en general se habla muy poco del placer femenino.

En la mayoría de las clases de sexualidad nadie habla de masturbación femenina, por lo que se vuelve algo que la mujer debe descubrir por si sola con el tiempo y que no sabe si está bien o mal, mientras que para los hombres la masturbación es algo muy natural.

Otro de los grandes problemas es que muchas mujeres no conocen bien sus genitales, no saben dónde está su clítoris y confunden términos como vagina y vulva.

Los hombres tampoco saben mucho sobre la anatomía femenina y la mayoría cree que pueden darle a sus parejas un orgasmo simplemente con la penetración, cuando eso solo ocurre en el 20% de la población femenina con vida sexual activa.

Por otra parte, hay mucha desinformación y seguimos formando parte de una cultura patriarcal falocéntrica en la que los orgasmos de clítoris no han sido explorados correctamente.

¿Por qué no se necesita una penetración para el orgasmo?

Para que ocurra el orgasmo femenino hay factores mucho más importantes que el simple “mete y saca” de la penetración y para entender por qué, debemos empezar por aprender que el placer femenino no se concentra únicamente en los genitales, hay muchas zonas erógenas en todo su cuerpo.

En algunos casos, las mujeres pueden excitarse con caricias en el cuello, la cintura y los pezones. Por lo que existe más de un camino para llevarla al orgasmo.

Al hablar de placer femenino, no podemos dejar de mencionar al clítoris, pues a pesar de que es una de las zonas erógenas más sensibles, pocas veces se le da la atención necesaria durante los encuentros íntimos.

Una investigación realizada por el Instituto Kinsey de la Universidad de Indiana, Estados Unidos, afirmó que, cuando el clítoris entra en escena más de un 40% de las mujeres llega al orgasmo en más del 75% de las ocasiones. Tan sólo un 18% reconocía poder llegar al clímax únicamente con la penetración vaginal.

Estimular el clítoris no necesita de una penetración, puede hacerse con los dedos, la lengua y juguetes sexuales.

¿Y el punto G? Esta es otra de las zonas erógenas que no pueden olvidarse al intentar conseguir un orgasmo, las mujeres que reciben estimulación en esa parte, afirman disfrutar de un clímax mucho más largo e intenso, incluso puede ser más fácil conseguir la eyaculación femenina.

Tracey Cox, sexóloga y experta en relaciones, indica que el punto G se encuentra aproximadamente entre 5 y 8 centímetros en el interior de la vagina, en la pared vaginal frontal y para tocarlo se debe introducir un dedo en la vagina o un juguete sexual curvo, buscando una zona rugosa, casi como la superficie de una nuez.

"La técnica habitual para estimular el punto G es meter los dedos y curvarlos hacia arriba como si estuvieras haciendo un gesto de ''ven aquí’", aconseja la experta.

Muchas mujeres también sienten que los juegos sexuales previos no duran lo suficiente, lo cual les impide desarrollar con totalidad su capacidad orgásmica. Así que se debe prestar especial atención a los besos apasionados, las caricias eróticas, la masturbación, la estimulación de varias zonas erógenas y el sexo oral antes de pasar a la penetración. 

Sin duda, el orgasmo femenino puede ser todo un reto, pero conociendo tu cuerpo y sobre todo, hablando con tu pareja sobre lo que realmente disfrutas en la intimidad son clave para vivir una sexualidad plena y sobre todo, placentera.