En pleno 2021, muchas de las estadísticas sociodemográficas capturadas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi)  desconocen la paternidad y reconocen solamente la maternidad.

El instituto no mide de forma directa directa cuántos hijos e hijas tienen los hombres, solo cuántos tienen las mujeres.

La medición se hace a través de preguntar al hombre si es “jefe de familia”, un término de por sí anticuado, para la columnista Viri Ríos de El País.

“Si un hombre abandona a sus hijos pequeños, ese hombre dejará de tener hijos. No así una mujer que, para todo motivo estadístico, será clasificada como madre toda su vida”, señaló la columnista.

Las cifras harían creer que los harenes son una norma cultural en el país.  La Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) del año 2020 reporta la existencia de 36,9 millones de madres en México, solo reporta la existencia de 17,7 millones padres. La proporción es de de 2,1 madres por cada padre.

La problemática recae en que no se conoce la situación de la paternidad. Se sabe que un 12.2% de las mujeres que perdieron su empleo tenían dos o más hijos, y sólo el 6.4% no los tenían.

“El Instituto justifica su actuar diciendo que así se hacen en todos lados. Según me comentó Edgar Vielma, director general de estadísticas sociodemográficas, en comunicación pública, el Instituto piensa que no medir la paternidad de manera directa es una ‘mejor práctica’”.

La justificación del director es que los hombres son más infieles y sabrían qué responder cuando se les pregunte cuántos hijos tiene.

Lo que resulta extraño es que esos hombres si pueden dominar las esferas públicas, destacan en los datos de personas con liderazgo, de las 53 personas con puestos de dirección general (titular o adjunta) solo 12 son mujeres.

 

Con información de El País