En 1971, en los años en que el movimiento feminista comenzaba a nacer, se conocieron Lillian Faderma, profesora de la Universidad Estatal de California y Phyllis Irwin, directora del centro académico, para abrir un programa de estudios sobre la mujer.
Este interés fue el inicio de una historia de amor, en medio de una época donde la homosexualidad era ilegal. Sin embargo, su relación ha durado medio siglo.
"Éramos consideras criminales en casi todos los estados del país", recuerda la pareja.
"La mayoría de las lesbianas andaban a escondidas", afirman.
La mirada conservadora hacia la pareja de académicas no frenó su deseo de formar una familia.
La pareja encontró la forma de usar las reglas legales para que su familia tuviera los beneficios del Estado.
Sus conocidos no sabían que tenían una relación. Sin embargo, asumen que lo dedujeron cuando Lillian comenzó a publicar libros sobre la historia del lesbianismo.
Después de tres años de iniciar su relación. Lillian, quien es 11 años menor que Phyllis decidió tener un hijo en una clínica de fertilidad.
El embarazo de Lillian
Phyllis y Lillian con Avrom, en 1979, cuando tenía 4 años
Lillian acude a una clínica de inseminación artificial, donde logró convencer al doctor, pese a que era aparentemente soltera.
"El médico me preguntó por qué no me había casado si quería tener un bebé", recuerda.
"Le contesté: ''Tengo 34 años, un doctorado y un cargo como vicepresidenta segunda para asuntos académicos en la universidad, y creo que a los hombres les cuesta eso''".
Phyllis se convierte en la abuela
Avrom, el hijo de Lillian, nació en 1975. Su pareja, Phyllis la llevó al hospital. Todo salió perfecto.
A lo largo del tiempo se dieron cuenta de las limitaciones legales.
"Nos preocupaba muchísimo que no hubiera lazos legales entre nosotros", cuenta Lillian.
"Lo que más nos preocupaba es que si Avrom se enfermaba y Phyllis tenía que llevarlo al médico, ella no era legalmente su progenitora, así que yo tenía que darle una nota oficial que ella llevaba".
La solución que encontraron es que Phllis adoptara a Lillian, ya que el estado de California permitía la adopción si había una diferencia de diez años o más entre dos adultos.
Fue así como Phyllis se convirtió en la madre de Lillian y la abuela de Avrom.
La BBC les preguntó si no sintieron raro, que la relación legal fuera madre e hija.
"No lo pensaba en esos términos, yo lo veía simplemente como la forma de tener un vínculo legal con Avrom", respondió Phyllis.
Relación legal madre e hija
Lillian y Phyllis, el día de su (primer) casamiento, en 2008
Avrom presentaba a su familia, una como su madre y otra como la abuela.
"Creo que esto era más fácil para él, aunque sabía bien que Phyllis era su otra madre. Siempre la llamó Mama Phyllis. Hoy tiene 45 años y la sigue llamando Mama Phyllis", cuenta Lillian.
Esto no les incomodaba a la pareja, solo buscaban que su hijo se sintiera cómodo.
En 2008, California permitió el matrimonio entre personas del mismo sexo. Lillian y Phyllis se casaron el día después de que se legalizara el matrimonio gay.
En 2015 cuando se aprobó el matrimonio igualitario en Estados Unidos, una abogada les dijo que se había enterado de su peculiar situación, así que debían arreglarlo para no meterse en problemas.
Así que tuvieron que abolir el lazo de adopción entre ambas, volverse a casar y Phyllis pudo adoptar a Avron.
Con información de la BBC
(Diana Juárez)