Las cenas navideñas se convierten en la oportunidad perfecta para reunirse con la familia y hasta convivir por varios días en una misma casa, en esta convivencia debería estar entendido que la repartición de tareas es equitativa para así mantener un lugar habitable, lamentablemente las tareas siempre recaen en las mujeres e incluso otros habitantes se aprovechan de eso.

Esta fue la situación que vivió una madre británica ya que reveló que su cuñada le cobró 241 dólares simplemente por quedarse en su casa durante navidad, específicamente del 23 al 26 de diciembre.

La mujer estaba muy molesta ya que este cobro, que fue hecho por aspectos de “hospitalidad”, y su cuñada no tuvo en cuenta que fue ella quien llevó y preparó todas las porciones de comida para que todos disfrutaran de una deliciosa cena.

Trajimos 2 piezas de carne, un budín de Navidad, un pastel de Navidad, mucho vino, cerveza, algo de ginebra y ron, algunos buenos quesos, bocadillos y bebidas para niños, comentó la mujer.

La mujer aseguró que su cuñada envió por correo electrónico una factura en donde le cobró a ella y a su esposo 241 dólares bajo el concepto de “hospitalidad”, a pesar de que reconoció que en la casa habitaron nueve personas en ese periodo de tiempo le pareció “grosero y lamentable” que hayan cobrado por ello.

“Estoy absolutamente furiosa”, agregó, mencionando que su esposo quiso simplemente pagar la “deuda” para que su cuñada dejara de molestar, pero ella decidió que, en cambio, le escribiría pidiéndole los detalles de los gastos por su estadía y que a eso se le resten los gastos en los que ella incurrió al llevar toda la comida, además de las horas que perdió cocinando la cena de Navidad.

Los usuarios en redes afirmaron que este cobro era un abuso ya que la cuñada no tomó en cuenta todo el trabajo sin paga que hizo al realizar la cena para todos los invitados.

Carga mental

El trabajo doméstico y las labores de cuidado son algunos de los temas más importantes para hablar de la desigualdad entre hombres y mujeres. La distribución del tiempo en las labores del hogar influye directamente en su participación en actividades remuneradas y las oportunidades de profesionalización y crecimiento personal.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), los hombres dedican, en promedio, 20 horas a la semana a realizar labores domésticas mientras que las mujeres dedican 50 horas a estas tareas. Para ponerlo en perspectiva, si se divide esta cifra entre siete, las mujeres destinan siete horas al día al trabajo doméstico, lo que termina siendo una jornada laboral completa sin remuneración económica.

Esta es la cotidianidad de las mujeres, pero cuando se trata de festividades navideñas la carga mental aumenta ya que son ellas las encargadas de organizar la cena y todo lo que ello implica.