Las obreras de los parques industriales instalados en Guadalajara, Jalisco no solo viven acoso por parte de sus supervisores, también discriminación y abusos de sus derechos laborales. “Nuestra voz no vale, nos dicen es mi voz contra la tuya”, comenta Manuela, una mujer obrera que fue despedida una empresa manufacturera por decirles a las otras mujeres que tenían derechos. “Cuando me corrieron me dijeron, tienes ideas muy peligrosas”.

Manuela vivió acoso laboral de un supervisor, mientras estaba en su línea de producción ensamblando piezas, el hombre se le acercó y le tocó “las nalgas”; lo acusó en el área de recursos humanos, pero su reclamo fue puesto en duda por “estar bonitilla”, comenta para la Cadera de Eva.

“Yo ni si quiera lo conocía, la licenciada de inmediato de me dijo, ¿segura que no lo provocaste?, porque tienes una mirada muy coquetilla eh. Me dio coraje, le respondí cómo tú siendo mujer me puedes decir eso”.

Manuela nos comenta que son pocas las mujeres las que se atreven a denunciar los acosos laborales porque temen perder sus empleos. “Las compañeras que más lo padecen son las madres solteras, han tenido que aceptar otras cosas porque tienen miedo de perder sus empleos. Los supervisores las buscan con ese perfil, porque saben que no dirán nada”, nos comenta.

“Aceptamos estos trabajos porque nos dan horarios flexibles”

 El personal de las empresas electrónicas en Guadalajara son en su mayoría mujeres. Las contratan sin importar la escolaridad, incluso buscan a mujeres con ese perfil. “Se van a los pueblos a reclutar gente, a buscar mujeres que creen que no van a reclamar sus derechos”, nos comenta Manuela.

Las mujeres aceptan estos trabajos porque en su mayoría son madres solteras y necesitan un horario “flexible”. Las obreras que tienen hijos seleccionan los horarios nocturnos para poder llevar a sus hijos a la escuela por la mañana, hacer las labores del hogar y dormir entre tres y cuatro horas al día.

 

“Nosotros les decimos horarios flexibles porque nos queda tiempo para cuidar a nuestros hijos y hacer otras cosas”.

Las principales empresas de manufactura en Guadalajara son Benchmark Electronics, Sanmina SIC, Flex, Jabil, Universal Scientific Industrial, Gollet Electronics, Eei, Dyseme, Gartin Technologies, Pounce Electonics éstas le trabajan a los corporativos de Nokia, Nike, Elster, Neexter, Ford, Whirpool, Chrysler, Jeem GM, LG Electronics entre otras.

Los sueldos que reciben estas mujeres oscilan entre 150 pesos al día a 170, que completan una quincena de 3, 600 a 4, 000 mil pesos al mes. Las jornadas en las que trabajan pueden ser diurnas (de las 6:00 a 20:00), nocturnas de (20:00 a 06:00) o mixtas (comprende periodos de tiempo de la jornada diurna y la nocturna).

“Muchas compañeras ya tienen problemas de los riñones”

Durante el periodo de producción, las mujeres no pueden detenerse ya que deben responder a los ritmos de las máquinas. En una línea de producción, donde se hacen los ensamblajes, pueden estar hasta 40 obreras y si necesitan hacer una pausa para ir al baño, el supervisor o supervisora tiene que cubrir ese lugar.

“La supervisora que tenía no se daba abasto para cubrir a todas, a veces cinco queríamos ir al baño al mismo tiempo, por eso muchas de nosotras tenemos problemas en los riñones, por aguantar, imagínate lo que vivimos, no tenemos la libertad de hacer tus necesidades fisiológicas, a veces nos tenemos que esperar entre una hora y hora y media”, comenta Manuela.

Otra de las enfermedades que padecen estas mujeres es artritis por el trabajo monótono que tienen que hacer durante largas jornadas; también presentan problemas de várices porque tienen que estar de pie, ya que los empleadores consideran que si estuvieran sentadas producirían menos.

“Mis compañeras tienen el problema de artritis, ya se les empiezan a entumir las manos, ya tienen los dedos deformados porque además de estar en movimiento, los ‘palets’ están calientes, pasan por una máquina donde se les impregna la soldadura de más de 480 grados centígrados. Muchas tienen artritis, es una problemática que se ve en todas las áreas”.

Despidos injustificados y acusaciones    

Las obreras y obreros de mayor antigüedad están siendo despedidos de estas empresas con la justificación de que hay una “recesión”. Sin embargo, Manuela quien también es miembro de la Coalición de Ex Trabajadores (es) y Trabajadores (es) de la Industria Electrónica en México (Cetien), colectivo financiado por Fondo Semillas, nos comenta que estos despidos se deben a que no quieren dar liquidaciones y las contrataciones las están haciendo los outsourcings.

“A muchas compañeras las obligan a firmar su renuncian y si lo hacen, desde Cetien ya no las podemos ayudar. Ahora, la tendencia de estas compañías es contratarnos por estas agencias que están comunicadas entre si y si identifican que una está en la defensa de los derechos, ya no la contratan”, comenta Manuela.

Manuela nos comenta que cuidan mucho su identidad incluso para las marchas tienen que ir con los rostros cubiertos porque si ubican quienes son despedidas, como ella. “A mí me corrieron, porque como dicen, traté de abrirle los ojos a las compañeras”.

Las actividades que realizan las mujeres de Cetien son talleres y charlas donde se les informa de sus derechos. Sin embargo, los descansos aleatorios que le dan a las obreras no les permite dar un seguimiento a estas jornadas, por lo que cuentan con diversos canales de comunicación para estar en contacto con las empleadas que necesiten una asesoría.