Las condiciones físicas y sociales de las mujeres en México y América Latina las vuelven vulnerables frente a la posibilidad de contagiarse de VIH. Jesica Mejía Castrejón del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán” (INCMN) expuso datos sobre la relación entre la condición física y social de la mujer y el VIH, en la conferencia “Mujeres y VIH”, organizada por Nosotras Tenemos Otros Datos. 

Durante la conferencia realizada en el marco del Día Mundial de la Lucha contra el Sida, Jessica Mejía explicó que las mujeres presentan distintas vulnerabilidades físicas, psicológicas, sociales e institucionales frente a la posibilidad de contagio de VIH. 

Vulnerabilidades de las mujeres por factores biológicos

De acuerdo con lo explicado por la ponente, a nivel biológico las mujeres son más vulnerables al contagio debido a que la superficie de mucosa  está más expuesta y las mujeres tienen myor posibilidad de sufrir microlesiones durante el coito. 

Por otra parte, cuando se inicia una vida sexual activa a temprana la mucosa genitas inmadura no es una barrera adecuada contra el VIH. Otro factor biológico tiene que ver con el semen, que contiene mayor cantidad de virus que las secreciones vaginales, lo que hace más posible que los hombres contagien a las mujeres. 

Vulnerabilidades por el sistema de salud

En cuanto al sistema de salud, Jesica afirma que existe una falta de visibilidad de la problemática de las mujeres y el VIH, afirmó que hay una  falta de acceso a programas de salud sexual y reproductiva por presupuestos reducidos, programas preventivos insuficientes y seguridad social limitada.

Lee: ¿Sabes la diferencia entre VIH y SIDA?

Vulnerabilidades psicológicas y sociales

A nivel psicológico y social, cuestiones como la dificultad para decidir sobre su sexualidad, dificultades para exigir el uso de condón, la exposición a la violencia, la aceptación social de múltiples parejas en hombres, la inequidad de género, entre otras cuestiones, colocan a las mujeres en una situación de mayor vulnerabilidad frente al VIH. 

Sólo el 63% de las mujere infectadas saben que lo están

De acuerdo con cifras de 2017 proporcionadas por Jessica Mejía, del total de personas infectadas por el virus se estima que poco más del 17% son mujeres. Del total de mujeres infectadas, sólo el 63% sabe que están infectadas y únicamente el 55 % de las mujeres que saben que se contagian tienen acceso a medicamentos.

De acuerdo con lo expuesto por la integrante de la Clínica de VIH del INCMN, las mujeres llegan a la atención con un sistema inmune más debilitado, debido a diagnósticos realizados de manera tardía.

Lee: “Si hubiera usado condón con mi esposo no me hubiera contagiado de VIH”

70% de las mujeres se contagió por su pareja estable

La ponente presentó los resultados de un estudio realizado en México que reveló las diferencias por sexo de las personas que viven con VIH. 

De acuerdo con lo anterior, el mayor número de mujeres contagiadas tienen educación hasta la primaria o secundaria (62%) y son casadas (42%), mientras que la mayoría de los hombres contagiados por VIH tienen un nivel educativo de universidad (47%) y son solteros (72%).

Tanto en hombres como en mujeres, la mayoría se contagió por la falta del uso de condón, pero el 70% de las mujeres se contagió por mantener relaciones sexuales con su pareja estable. Por su parte, el 44% de los hombres se contagiaron por relaciones sexuales con una pareja estable.

VIH y violencia

De acuerdo con los datos expuestos por Jessica, los antecedentes de abuso sexual o físico son frecuentes en personas que viven con VIH, pero el problema se agudiza para las mujeres. Un estudio reciente realizado en América Latina develó que el 86.7% de las mujeres que viven con VIH han reportado tener algún tipo de violencia por parte de la pareja, ya sea sexual, física o emocional. 

Debido a las vulnerabilidades que presentan las mujeres frente al VIH, Jesica afirmó que es necesario que el abordaje de la problema contemple la creación de servicios centrados en las mujeres, para que se pueda impactar los determinantes sociales que afectan a las mujeres con VIH. 

“Las instituciones de salud deberían involucrar a las mujeres en el proceso de planeación de la atención, promover programas que estén adaptados para ellas”, afirmó.