Así como en las mujeres el placer va más allá de la penetración; también pasa con los hombres, el pene no es su única zona erógena. Cada vez, al permitirnos explorar nuestra sexualidad vamos encontrado tendencias más sexuales y creativas. Un ejemplo es el de pegging, también conocido como "Bend over boyfriend", en su traducción al español se refiere al acto de "inclinarse sobre tu novio".
El pegging se refiere a la práctica sexual por la cual la mujer realiza sexo anal a un hombre, al penetrar el ano, ya sea con un consolador o con los dedos.
Sin embargo, para los hombres heterosexuales experimentar esta práctica les conlleva romper muchos estereotipos ya que se sentirán culpables por sentir placer en esa zona, al relacionarlo con una practica homosexual, lo cual no tiene nada que ver.
Esta práctica sexual cambia los roles en la intimidad, la mujer toma, en cierta medida, las riendas de la relación sexual. El pegging se puede practicar con un dedo, un consolador o con otros arneses de penetración. Estos juguetes sólo se habían relacionado con las relaciones lésbicas, pero no es así, nos permite experimentar otras formas de sexualidad si tenemos una relación heterosexual.
“El otro gran muro que aleja a muchos hombres y mujeres de la práctica del pegging es el miedo a ser estigmatizados y encasillados en una opción sexual distinta a la suya. Al hacer público que disfrutan de prácticas en las que unos y otros intercambian los roles sexuales tradicionales”, puntualiza el diario el Mundo.
¿Cómo practicar sexo anal o “pegging” mi novio?
La clave para realizar esta práctica está en la actitud de experimentar, desechando prejuicios sobre la práctica. Para el psicólogo Vicente Briet, introducir juguetes sexuales, probar nuevas posturas o intercambiar roles puede mejorar significativamente nuestra intimidad.
Si eres tú o él quienes se practicaran sexo anal, los sexólogos recomiendan iniciar con dildos para principiantes, pequeños, estrechos y con un buen lubricante anal. La sensibilidad se irá adquiriendo poco a poco.
¿Cómo darle mayor placer a mi novio?
Esta práctica, la del pegging, genera un doble placer en los hombres. Al parecer, existe una doble razón, el gozo que produce la estimulación del punto P (la zona del clímax masculino), se llama así porque hace referencia a la próstata, esta se encuentra debajo de la vejiga y delante del recto, se puede palpar de dos maneras: extern e interna.
De manera interna se llega a través del ano y de manera externa, ubicamos el punto P entre la franja de la piel que va desde los testículos hasta el ano. Si pones atención, cuando acaricies esa zona sentirás un bultito como del tamaño de una nuez, así sabrás que lo habrás encontrado.
Este tipo de prácticas son recomendadas por los sexólogos, como Ana Sierra quien recetaba “creatividad y valentía” como medicina para combatir el día a día en al cama. Así que si queremos mejorar nuestra vida sexual, estar abiertos a nuevas experiencias podría ayudarnos.
(Diana Juárez)
Con información de El Mundo