La participación de las mujeres en la Independencia fue importante, así como la de los hombres, pero lo que ellas hacían no trascendió en los libros de texto gratuito si no que se quedó en la memoria de los historiadores, como es el caso de la historiadora Erika Pani del Colegio de México.
“Hablar de las mujeres en la independencia nos habla de la sociedad del momento, un proceso en que la política cambio de manera acelerada, se vivía mucha violencia en el país, parecía una guerra civil, las mujeres peleaban, algunas de ellas, porque buscaban algo diferente”, cuenta en entrevista la doctora en historia.
¿Cuál es la relación de las mujeres y las tortillas con el movimiento de la Independencia de México?
La historiadora Erika Pani del Colegio de México hace una reflexión sobre la importancia del maíz en México, ya que ha sido parte de la dieta de los mexicanos desde la época prehispánica, por ello era muy importante la producción de tortillas para el movimiento de la independencia.
“Los ejércitos de la época tenían a muchas mujeres siguiéndolos ya que hacían las tortillas, sin mujeres no hay tortillas y sin éstas últimas no hay ejército”, dijo en entrevista la historiadora.
La participación de las mujeres en la independencia es un símil al recuento que hace Sveltlana Aleksiévich en el libro “La guerra no tiene rostro de mujer”, donde eran ellas quienes se encargaban de las labores de cuidado como lavar la ropa, hacer la comida, el pan, cuidar a los heridos, lavar las vendas, remendar los uniformes, en el caso de México: hacer las tortillas.
Si un ejército no llevaba mujeres, no había tortillas, por lo tanto no había soldados como nos explica en entrevista Erika Pani. Las mujeres en la independencia hacían lo que estaba dentro de su campo, algunas de ellas se rebelaron a los estándares que les eran impuestos, como fue el caso de Leona Vicario quien dijo haber participado en la guerra por convicción..
Las labores de las mujeres implico hacer la preparación de los alimentos.. las mujeres tenían que hacer las tortillas, elaboración que consistía en desgranar el maíz, hacer la cocción del nixtamal, molerlo y, finalmente, transformarlo en aquel alimento que debía cocinarse utilizando leña u otro combustible de la zona, por ejemplo, en las regiones semidesérticas, se utilizaba la penca de maguey seca, que la misma mujer debía recoger para el fogón de su cocina, señala en el texto “México, independencia, mujeres, olvido, resistencia, rebeldía, dignidad y rescate”, de María de J. Rodríguez Guerrero.