En septiembre de 2019, dos hombres atacaron a María Elena Ríos rociándole ácido en la cara, presuntamente por órdenes del exdiputado Juan Antonio Vera Carrizal, quien fue detenido bajo los cargos de autor intelectual del intento de feminicidio. En ese momento ella tenía 26 años y pasó casi seis meses en recuperación después de este intento de feminicidio, tiempo en el que estuvo alejada de su pasión por la música, la cual inició siendo una niña. Sin embargo, actualmente Malena utiliza esta pasión para exigir justicia y concientizar sobre la violencia ácida, por lo que fue premiada por el Colectivo Mujeres en la Música A. C.
Desde su infancia, en Tonalá, Oaxaca, María Elena se acercó la banda de su comunidad, donde aprendió a tocar el saxofón. Desde entonces continuó su preparación y trayectoria, hasta el momento del ataque.
En marzo de 2022, Elena Ríos subió de nuevo a los escenarios y desde entonces los ha compartido con la Banda Regional “Mujeres del Viento Florido”, Vivir Quintana, Regina Orozco o Maldita Vecindad. Este fin de semana, participó también en el Festival Vive Latino.
María Elena utiliza la música para denunciar la violencia contra las mujeres y en particular la violencia ácida, los cuales, indica, son cada vez más frecuentes. Es así que continúa buscando justicia, para ella, y para todas las mujeres que han sido víctimas de ataques con ácido, a través del artivismo, uniendo su música y su lucha.
De acuerdo a cifras del Banco Nacional de Datos e Información sobre Casos de Violencia contra las Mujeres (Banavim) durante el 2022, en México 222 mujeres recibieron amenazas de ser agredidas por ácidos o sustancias químicas, esto fue revelado por Fabiola Alanís Sámano, titular de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim).
La entrega del premio “Coatlicue” se realizó al finalizar el evento “Concierto yaoyólotl, Corazón Guerrero”, durante el cual se interpretaron obras de compositores indígenas del siglo XVI, y la presentación de obras en lenguas como náhuatl, maya, tojolabal.