Un grupo de 81 hombres víctimas de violencia sexual en el conflicto armado han decidido visibilizar sus casos. Según el Registro Único de Víctimas (RUV) del total de personas registradas 31 mil 495, 92.58% son mujeres y el resto hombres que son 2 mil 140. El reporte de la violencia de la que fueron víctimas quedó registrado en informe a el Jurisdicción Especial para la Paz (JEP)

Un caso es el de Nelson Toscano quien decidió hablar. Fue víctima de violencia sexual a los 9 años y después a las 17. La primera vez por los paramilitares y la segunda por la guerrilla del Ejército Nacional de Liberación (ELN), de acuerdo con el diario El País.

En el primer caso fue con la complicidad de su tío, le pidió que lo acompañara a comprar unas pinturas. Su abuela le dio permiso. En el coche lo dejó esperando junto con dos hombres.

“Cuando mi tío regresó le conté llorando lo sucedido y él me amenazó diciendo que mejor me quedara callado y no se lo contara a nadie si no quería ver a mi abuela muerta”, recuerda.

La segunda ocasión fue en un viaje, los paró la guerrilla ELN. Lo retuvieron. Lo llevaron a una finca abandonada. Junto con su amigo fueorn víctimas de abuso sexual.

Toscano se había criado en las afueras de la ciudad de Cúcuta, en la en la frontera con Venezuela, donde el conflicto armado se vivió y se vive con mucha intensidad. Se mudo a Bogotá, no desea regresar por los malos recuerdos. Su amigo, terminó suicidándose.

"ABUSARON DE MÍ Y DE MI ESPOSA"

Otro caso es el de Germán Mosquera, nombre que fue modificado, nació en el Chocó, en el Pacífico colombiano. Se dedicaba a criar gallinas, marranos, sembraba arroz, cortaba plátano y pescaba todos los días.

En 2004, guerrilleros de las FARC asesinaron a su hijo frente a e´l, vio como violaban a su esposa y después ella vio cómo lo violaban a él.

“El que se resistía lo amarraban y hacían lo que querían. Era eso o la muerte. Después de violarme me marcaron cortándome un pedazo de oreja con una navaja”.

Las hijas de Mosquera, de 12 y 16 años también fueron víctimas de abuso sexual. A su esposa ya la habían violado, y cuando él fue víctima de abuso sexual por segunda vez se escondió en el monte y después se fueron a Bogotá.

AFECTACIONES

De acuerdo con Ángela María Escobar ha sido una de las artífices para que los hombres hablen, es coordinadora de la Red de Mujeres Víctimas y Profesionales, ha señalado que estos hombres quieren visibilizarse para demostrarle al país que ellos también son víctimas de violencia sexual.

“La violación fue como una forma de castigo para que ellos sintieran que por mucho que lo fueran ya no tenían ese poder de hombre. Quieren romper ese estigma de tener que pasar la vergüenza que les digan que si les violaron se volvieron homosexuales”, señalo.

María Ángeles Escobar quiere dejar también claro que las mujeres sufren mayores afectaciones. “En los hombres se identifica mucho el problema de la hemorroides, pero muchas mujeres sufren embarazos, fístulas vaginales, mordiscos en los senos, y mutilaciones... Al hombre lo violan con un acceso carnal violento con el pene pero no hay ese ensañamiento que sufrimos muchas mujeres”.

En la entrega del informe de la JEP sobre violencia sexual contra hombres, hablan 81 hombres heterosexuales en su gran mayoría, pero también gays, bisexuales y trans explican lo que les sucedió a este mecanismo judicial creado en el marco de los Acuerdos de Paz de La Habana para que les reconozca y les repare como víctimas.

Con información de El País