La estructura patriarcal también está inserta en las instituciones educativas, ésta incide en la forma de investigar. El ser activista e investigadora ha sido cuestionado en la academia, así como los proyectos que tienen una perspectiva feminista y están insertos en otras disciplinas que no sean departamentos de género, expresan estudiantes de posgrado que participaron en el Foro “Ha(ser) investigación de género en comunicación”, en la Semana de Comunicación 2021 organizado por estudiantes de licenciatura de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México.
Si bien la Universidad Iberoamericana se ha distinguido por su Programa de Género, sobre todo en el tratamiento de los casos de acoso y hostigamiento sexual, incluso algunos se han convertido en mediáticos. Las estudiantes e investigadoras hacen un llamado al Programa para que las acompañe en la inserción de esta visión feminista en los planes de estudio y líneas de investigación.
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Las panelistas coincidieron en que el movimiento feminista, denominado la cuarta ola, ha atravesado los muros de la academia y ha influido en estos cuestionamientos. Al respecto, Daphne Beltrán, estudiante de maestría de la Ibero, señala que: “es importante reconocer este cambio, en el que se puede cuestionar la estructura académica. No es una lucha que esté terminada. Los espacios están ahí para ser apropiados, es cuestión de que nos organicemos como estudiantes y empezar a cuestionar esto, ‘por qué no hay líneas de investigación con perspectiva de género en arte’, ‘por qué no se han incluido optativas’. Es de gran importancia generar espacios como estos, ya que tienen un potencial político muy importante porque nos permiten apropiarnos de los espacios”.
Patricia Gaytán, estudiante de doctorado y Andrea Solís, estudiante de maestría comentaron que fueron cuestionadas por querer inscribir sus investigaciones en el departamento de Comunicación, al ser propuestas que tenían una mirada feminista, el cuerpo académico esperaba que las inscribieran en un programa de género.
En este sentido, Diana Juárez, candidata a doctora en Comunicación por la misma universidad y editora de La Cadera de Eva, compartió que la visión de incluir los temas a espacios de género, como secciones de noticias o departamentos especializados nos desvincula de una mirada transversal que es necesaria para todas las instituciones, como académicas y mediáticas.
Por su parte, Narcisa Sinche, ecuatoriana y estudiante del doctorado, enfatizó la importancia de cuestionar las narrativas que se generan en los medios de comunicación, donde la violencia contra las mujeres se han convertido en la nota; y dentro de la academia, la estudiante de posgrado cuestionó la distancia que se le pide tener a las estudiantes con su objeto de investigación y apeló a una “objetividad encarnada”.
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Investigar con perspectiva de género
En palabras de la investigadora Sinche, la objetividad encarnada es un concepto acuñado por la historiadora Donna Haraway para deconstruir la noción de objetividad en torno al conocimiento. A grandes rasgos, es una versión feminista de la objetividad y que se expresa en los conocimientos situados y en la producción de significados desde la parcialidad, las especificidades y contextos particulares de las mujeres, quienes desde las marginalidades múltiples han sido relegadas de la ciencia, política, economía, entre otros ámbitos.
En relación con ser parte o vivir el objeto de investigación, Stephanie Morón estudiante del doctorado dijo que “hacer activismo y academia no está nada peleado porque sino hablamos de lo que nos está pasando a nosotras quiénes más van hablar”. Stephanie reconoció que estamos pasando por un cambio de paradigma que está relacionado con las luchas y movilizaciones feministas. “Es necesario voltear la mirada y ver qué está pasando”, dice. La estudiante señaló la importancia de observar por qué después del surgimiento de la frase “Ni una menos” en 2015 por Susana Chávez, haciendo referencia a las muertas de Juárez, aún sigue vigente.
Andrea Solís reconoció que al final la academia es un “juego de lógicas, mientras puedas argumentarlo y sustentarlo, puedes proponer la investigación que te interese”, dijo en el Foro, apelando a los estudiantes de licenciatura interesados en inscribirse a un posgrado. Tras compartir el tema de su investigación “el perreo feminista”, donde reconoce al cuerpo y la música como medios de expresión, los cuales deben ser estudiados.
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Sobre pensar en investigar con perspectiva de género, Patricia Gaytan quien también es socia de la Asociación de Mujeres en el Cine y la Televisión A.C., agregó: “Además de tener una investigación bien argumentada, hay que estructurar una estrategia. Hay que investigar sobre la institución donde queremos incorporarnos y ver sus planteamientos. Si es una institución en la que se podrá desarrollar bien tu tema porque no todas tienen la misma línea. Antes de elegir un posgrado es muy importante acercarte a los profesores que puedan tener una perspectiva que se adecue a tu tema, porque el investigar también es política”.