El día que murió la madre de Jennette McCurdy sufrió un ataque de risa, ¿cómo controlar las emociones entre el dolor y la muerte de la persona que te procreó y violentó a la vez?

Jennette McCurdy hizo catarsis en un libro "Me alegro de que mi madre muriera" y narró cómo fue la relación con su madre. La portada en sí misma ya nos da un mensaje, una impresión de una niña buena, colores pasteles que contiene una historia que complejizó su vida, ¿cómo entender la violencia cuando viene de un ser querido? Eso es lo que trata de explicar Jennette McCurdy en su libro.

"Mami estoy muy flaca, finalmente he bajado a ochenta y nueve libras”. Así es como comienza el crudo  libro de Jennette McCurdy " Me alegro de que mi madre haya muert0"

En redes sociales se hizo un recuento de los puntos más importantes del libro, los cuales también te compartimos en esta nota. En este repaso destacamos algunos de los puntos más importantes :

Jennette no tenía idea de que hacer cuando supo que su madre moriría. “Y si ella realmente va a morir, ¿aué se supone que debo hacer conmigo misma? Mi propósito de vida siempre ha sido hacer feliz a mamá, ser quien ella quiere que sea. Así que sin mamá, ¿quién se supone que debo ser ahora?”.

La madre de la actriz de Nickelodeon tuvo cáncer cuando Jennette tenía dos años, durante ese tiempo, se grabo documentando su proceso. Reveló las cintas en video, y hacía a sus hijos verlas constantemente (a pesar de que ninguno quería ver el recuerdo de cuán mal había estado su madre).

Debra es el nombre de la madre, lo cierto es que toda su vida estuvo quejándose de lo infeliz que era, sú gran sueño había sido convertirse en actriz pero sus padres no la dejaron, por eso, se ensañó en hacer de Jennette alguien famosa.

“Sabes lo mucho que quería ser actriz", dijo ella.

"Pero la abuela y el abuelo no te dejaron", le dije.

"Pero la abuela y el abuelo no me dejaron, así es "me respondió”.

Jennette nunca quiso actuar

La autora de libro McCurdy siempre odió actuar, le provocaba ansiedad y estrés a su pequeño cuerpo de seis años, pero cómo podría decirle que no a su madre?, ¿cómo iba a arruinar sus sueños?, ¿cómo no iba a hacerla feliz?

"Quiero darte la vida que nunca tuve, Net. Quiero darte la vida que merezco. La vida que mis padres no me dejarían tener", de decía Debra.

La primera vez que Debra llevó a Jennette a audicionar para una academia de niños que les conseguía papeles, Jenn casi no lo soportó, el estrés era demasiado, pero a pesar de todo, fue elegida. Una vez más, ella no quería ser actriz pero quería ver a su mamá feliz.

Los problemas en la casa de Jennette siempre estaban presentes. Los padres de su madre vivían con ellos, su mamá se quejaba constantemente de no tener dinero, su padre era infeliz y abusado verbalmente por su madre y sus hermanos coexistían entre peleas.

Debra era una acumuladora, no había espacio en su casa para la familia. Los abuelos de Jenn vivían en la sala de estar en un sillón, los dormitorios de ella y sus hermanos estaban llenos de basura y tenían que dormir en el piso en bolsas de dormir, tenían problemas de ratas que rondaban la basura que había en todas partes.

Jennette comenta que había episodios de violencia doméstica de parte de su madre a su padre. Hubo una vez que su padre llegó tarde del trabajo, su madre se puso tan furiosa que lo corrió de la casa amenazándolo con un cuchillo.

Debra insistía en ir con Jennette al baño para limpiarla, incluso cuando Jenn tenía ya 8 años y quería privacidad porque se sentía sumamente incomoda con lo que hacía Debra.

“Lo siento, dije mientras hacía pop0 y mi mamá mojaba una toalla de papel con agua, me daba vergüenza que todavía me limpiara el trasero", recuerda Jenn en su libro.

Debra constantemente le decía a su hija que ella era su “mejor amiga”.

Los problemas empezaron a mostrarse cuando Debra comenzó a presionar a Jennette para ser más “bonita”m y claro que la situación familiar, cómo vivían, lo mucha que la presionaba su madre, lo mucho que odiaba lo que hacía, tarde o temprano afectaría su salud mental. El inicio de todo fue cuando desarrolló TOC (trastorno obsesivo-compulsivo).

Los chantajes de Debra hacia Jennette McCurdy

El abuso y la explotación de Debra hacía su hija llegaba al punto en donde la forzaba a presentarse a audiciones a pesar de que Jenn estuviera enferma, hubo una vez en que Jenn le dijo a Debra que no quería actuar más, esto llevó a Debra a enloquecer y tener un ataque (tal vez causa de su bipolaridad o tal vez causa de chantaje).

Debra le pide a Jennette que empiece a contar las calorías a la edad de los 11 años. Debra puso a su hija en una dieta que consistía en ingerir 1000 calorías al día, mil calorías para una niña en crecimiento que no debería de preocuparse por eso. Jennette solo se comía la mitad de esas calorías.

Los baños más horribles para ella eran cuando su hermano no estaba, porque su madre la bañaba y le hacía “exámenes” para verificar que no tuviera “bultos” en su busto y vagina.

Jenn obtuvo el papel para iCarly y comenta que Miranda fue una de sus primeras verdaderas amigas. Le encantaba salir con ella porque significaba dos cosas: estar lejos de su madre y poder comer libremente.

Con iCarly llega la aparición de a quien ella llama “El Creador”, Dan Schneider, para una de sus pruebas de vestuario de su personaje quería que usara diferentes bikinis y fuera fotografiada en cada uno. Su mamá le dijo que lo hiciera.

A la la edad de 16 años Jenn tuvo su primer período, estaba aterrada y disgustada por convertirse “finalmente en mujer”, quería seguir siendo una niña y para ello dejó de comer aún más de lo que ya lo había hecho.

iCarly llegó a un descanso, y con ello la oportunidad de Jenn de hacer música (cosa que no quería pero su madre la obligó). La lanzaron en una gira para promocionar sus canciones, pero esta vez estaría totalmente sola porque el cáncer de su madre había regresado.

Y a pesar de que ella quería permanecer al lado de su madre mientras que recibía el tratamiento, Debra la obligó a irse. Jenn comenta que estar de gira le dio lo que tanto quiso; libertad, tiempo para ella y solo para ella.

Estar siempre con Debra al lado causó que Jennette nunca se desarrollara como persona, nunca experimentó lo que la mayoría de adolescentes experimentan. En esta gira lo hizo, a la edad de 18 años estaba dando su primer beso verdadero con un hombre de 27.

Esta es parte de una reseña que se compartió en redes sociales la cual consideramos importante retomar para despertar la curiosidad en leer el libros.