El movimiento feminista a favor de la despenalización del aborto originado en Argentina y que se extendido por toda América Latina y cuyo símbolo es el pañuelo verde, la Marea Verde, llegó a México, cambiando la vida de miles de mujeres en cuatro estados del país, sin embargo, esta poderosa fuerza verde se detuvo ante una legislación machista, que impidió que el Estado de México se convirtiera en el quinto estado en garantizar la Interrupción Legal del Embarazo.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el aborto se define como la interrupción del embarazo cuando el feto no es viable fuera del vientre materno y reconoce dos tipos: espontáneo e inducido. El segundo es definido como la interrupción del embarazo a través del uso de medicamentos o intervenciones quirúrgicas cuando el feto no es viable fuera del vientre materno.
Es en esta parte cuando se define si el aborto inducido es seguro o inseguro, y de eso depende su “legalidad” o no.
ABORTO SEGURO
Un aborto seguro se realiza bajo las leyes de despenalización, en legalidad, garantizando las condiciones higiénicas, médicas y tecnológicas adecuadas para salvaguardar la dignidad, la libertad, la autonomía, el libre desarrollo de la personalidad y la salud de quienes deseen practicarlo.
Por otro lado, un aborto inducido es inseguro bajo condiciones de clandestinidad, cuyas complicaciones constituyen un problema de salud pública, además de una violación a los derechos humanos.
En nuestro país, desde el año 1999 el entonces Gobierno del Distrito Federal, en conjunto con la Secretaria de Salud y Organizaciones No Gubernamentales trabajaron en conjunto para ampliar el acceso de las mujeres al aborto legal, logrando la modificación del Código Penal del D.F. en el año 2000, ampliando las causales de aborto a las víctimas de violación, por lo que en 2002 se emitieron los “Lineamientos Generales de Organización y Operación de los Servicios de Salud Relacionados con la Interrupción Legal del Embarazo”.
Del 2007 al 2019, se atendieron 213 mil 350 mujeres en la CDMX, de las cuales el 70% (148 mil 596) mujeres con residencia en CDMX, 26% (56 mil 485) provenientes del Estado de México y 4% (8 mil 269) han sido mujeres con residencia en otros estados del país. Desde ese momento no se a contabilizado una sola muerte de una mujer al practicar un aborto en la CDMX.
A 12 AÑOS DE LUCHA, ¿DÓNDE QUEDA EL EDOMEX?
Ya trazado el camino en la Ciudad de México, el movimiento comenzó a expandirse en otros estados de la República, el 25 de septiembre de 2019 la Legislatura del Estado de Oaxaca reformo el Código Penal para despenalizar el aborto hasta las doce semanas de gestación.
Después de 12 años de lucha del movimiento feminista, la marea verde logro avanzar a otro estado y ha sido el motor para seguir avanzando; julio de 2021 se pinto de verde, el 06 de julio se publico en el Periódico Oficial del Estado de Hidalgo las reformas al Código Penal y a la Ley de Salud en la materia, mientras que el 20 de julio se aprobó en el Estado de Veracruz.
Se convirtió en la motivación necesaria para pintar el país de verde y garantizar el derecho de las mujeres a decidir sobre sus cuerpos; todo parecía indicar que el Estado de México sería el quinto estado en hacerlo.
Se buscaba “descongelar” la iniciativa planteada en el 2019, diversas organizaciones de la sociedad civil, colectivas feministas, defensoras de derechos humanos y ciudadanas comenzaron a organizar el arribo de la marea verde a tierras mexiquenses.
La experiencia del Estado de México se podría redactar en millones de palabras, sin embargo, basta decir que las mexiquenses fuimos timadas, se nos prometió ser el quinto estado verde y en cambio recibimos manguerazos de agua fría y polvo de extintor. ¿Acaso esta es la forma en la que se legisla y se gobierna en el Edomex?
Los congresos de los estados y el Gobierno Federal insisten en poner a consulta los derechos de las mujeres, es necesario eliminar las barreras sociales, económicas, culturales y legislativas que limitan los derechos de las mujeres y su capacidad de tomar decisiones.
Mientras este país siga siendo machista y opresor las mujeres seguiremos tomando los espacios públicos y nos haremos de espacios políticos para exigir y hacer cumplir los derechos de todas las mujeres, niñas y adolescentes. Las mujeres somos el movimiento social más grande, más fuerte y más comprometido, que con el paso de los años se ha ido apropiando de sus derechos y libertades
¡Seguiremos luchando para que sea ley en TODO México!
Xóchitl Arzola Vargas, Presidenta de Mujeres en Cadena A.C.