El pasado 26 de julio, diversas organizaciones y colectivos con trabajo en salud sexual y derechos humanos se manifestaron en la antigua sede de la Secretaría de Salud para exigir que el Gobierno Federal y los Estatales elaboren una estrategia integral que permita frenar el brote actual de viruela del mono y que además permita que las personas afectadas reciban la mejor atención y apoyo en su etapa de aislamiento.

En la manifestación se presentaron cinco exigencias principales por parte de los participantes:

  1. Inmediata actuación del sector salud, en particular la Secretaría de Salud y los gobiernos estatales, ante la creciente emergencia de salud que representa la viruela del mono.
  2. Claridad para el personal y las instituciones sobre los procesos de detección, notificación, tratamiento y recomendaciones basadas en la evidencia.
  3. Información oportuna para toda la población y también, campañas dirigidas a los hombres que tienen sexo con hombres (HSH) que representan el grupo más afectado.
  4. Compra inmediata de vacunas para prevenir la viruela del mono y la creación de una estrategia de vacunación que permita frenar el actual brote lo más pronto posible.
  5. Coordinación permanente entre gobierno, sociedad civil, comunidad académica y sector privado para agilizar y amplificar todos los esfuerzos relacionados con la viruela.

Los nuevos estigmas

Estados Unidos, Canadá y varios países europeos se unen a las manifestaciones y exigen que se compren vacunas de manera inmediata para poder prevenir la viruela en la población con mayor riesgo que en casi todos los países han sido los hombres que tienen sexo con hombres (HSH).

Si bien el virus no se transmite sexualmente, las autoridades dicen que el contacto prolongado de piel con piel es una de las principales formas en que ahora se propaga la viruela del mono.

De acuerdo con el portal Salud Con Lupa, el inusual brote de viruela del mono ha desatado comentarios que usan un lenguaje e imágenes que refuerzan estereotipos racistas y homofóbicos hacia los africanos y las personas de la población LGBTTTIQ+, alertó en un comunicado el Programa Conjunto de la ONU contra el VIH/sida (ONUSIDA).

ONUSIDA recordó que, pese a que varios casos del actual brote se han detectado en personas LGBTTTIQ+, el riesgo de contagio no se limita a esa población, sino a toda persona que haya tenido contacto físico cercano con quienes que se hayan contagiado de la enfermedad.

El experto Andy Seale, del departamento de enfermedades de transmisión sexual de la OMS, añadió que esta viruela del mono no es una de ellas, "ni tampoco una enfermedad ligada a la población homosexual", como algunos han afirmado en las redes sociales, "es una enfermedad que se contagia por contacto cercano, no necesariamente sexual", insistió el experto.

Si bien hay que mantener a la población alerta, tampoco se deben caer en estigmas ya que se ha comprobado que no se trata de una enfermedad de transmisión sexual “propagada” por los hombres que mantienen relaciones con hombres.

APVB