Una app gratuita para celulares está marcando un antes y un después en la manera en que las comunidades migrantes en Estados Unidos enfrentan las políticas de control fronterizo. Se trata de Iceblock, una herramienta de alerta comunitaria que notifica en tiempo real la presencia de agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en distintas ciudades del país.

Su crecimiento ha sido explosivo y su impacto inmediato: mientras el gobierno de EE.UU. la acusa de entorpecer la labor federal, organizaciones comunitarias la defienden como una forma legítima de protección civil y resistencia digital frente al miedo constante de la deportación. En el centro de este debate se encuentra la comunidad latina, blanco histórico de políticas migratorias agresivas.

Tecnología para resistir

Desarrollada por Joshua Aaron, un músico y programador autodidacta, Iceblock fue concebida como respuesta a las redadas masivas que se intensificaron desde junio bajo la nueva administración estadounidense. Aaron, de origen judío, dijo haberse inspirado en el legado de su comunidad y en la memoria del Holocausto: “Cuando vi imágenes de arrestos sin órdenes, niños llorando, familias rotas… supe que tenía que hacer algo”, explicó en entrevista con la revista Time.

La aplicación permite a cualquier usuario reportar la ubicación de agentes del ICE en tiempo real. Los reportes, anónimos y geolocalizados, se visualizan como “pines” en un mapa, y desaparecen automáticamente tras cuatro horas. Según informó CNN en Español, las alertas se activan para usuarios ubicados en un radio de hasta ocho kilómetros. La app, disponible en al menos 14 idiomas, entre ellos español, no solicita datos personales y restringe el envío de múltiples reportes para evitar el abuso del sistema.

Impacto en comunidades latinas

De acuerdo a distintos reportes, Iceblock ya ha superado los 20,000 usuarios, la mayoría concentrados en ciudades con alto porcentaje de población latina, como Los Ángeles, Nueva York, Houston y Chicago. En estos territorios, las redadas del ICE han incrementado en las últimas semanas, especialmente en espacios públicos como estaciones de autobús, supermercados y parques. En entrevista con La Cadera de Eva, Odilia Romero, cofundadora y directora ejecutiva de Comunidades Indígenas en Liderazgo (CIELO), reveló que entre el 2 y el 8 de junio, las detenciones superaron las 200 personas, la mayoría de origen indígena maya y zapoteco.

Ecosistema digital contra la persecución

Las comunidades migrantes en Estados Unidos, especialmente las latinas, han comenzado a usar aplicaciones como Iceblock no solo como herramientas informativas, sino como parte activa de sus estrategias de resistencia y protección mutua.

Según reportes, grupos de WhatsApp, Signal e incluso historias de Instagram se han llenado de información geolocalizada sobre la presencia del ICE, permitiendo una circulación rápida y descentralizada de alertas. Por su parte, organizaciones como Boyle Heights Immigrant Rights Network, Unión del Barrio y la Red de Respuesta Rápida del Sur de California han activado patrullajes comunitarios, líneas telefónicas y ahora también adoptan estas tecnologías para reforzar sus redes de apoyo.

Este cruce entre tecnología, comunidad y organización de base marca una nueva etapa en la defensa cotidiana de los derechos de las personas migrantes. La tecnología ha evolucionado así en una herramienta cotidiana de autodefensa.

La respuesta del gobierno de Estados Unidos

El impacto de la aplicación no ha pasado desapercibido en Washington. Según informaron varias fuentes, el gobierno calificó la app como “repugnante” y acusó a sus desarrolladores de “poner en riesgo la vida de los agentes federales” y que la plataforma “incita a la desobediencia y obstaculiza el cumplimiento de la ley”.

Pam Bondi, fiscal general, advirtió que el Departamento de Justicia está “monitoreando de cerca” el uso de estas aplicaciones y no descartó una revisión legal. Por su parte, la Secretaria de Estado, Kristi Noem, amenazó con acciones legales contra medios como CNN por “alentar el uso de herramientas que ayudan a evadir la ley”, según reportó Politico.

La administración ha señalado también un aumento del 500% en los incidentes de acoso a agentes de inmigración, aunque no ha presentado pruebas de que Iceblock esté vinculada directamente con estos hechos.

Frente a las acusaciones, Joshua Aaron se defendió señalando que la app no viola ninguna ley y que “simplemente ofrece información pública en tiempo real, como lo haría una app de tránsito que alerta sobre retenes policiales”. El mensaje de apertura de la app advierte que su uso debe ser pacífico y no interferir con operativos.

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