La frase “los derechos no se piden, se toman” siempre posee una carga de autodefensa feminista muy poderosa, especialmente, cuando hablamos de informarnos y saber que las denuncias, más allá de nuestra obligación, son nuestro. Por ello, La Cadera de Eva participó en el taller “¿Cómo denunciar un delito de violencia digital?” de Impunidad Cero donde la abogada Agneris Sampieri compartió una guía sobre todo lo que debes saber de este delito y aquí te lo desmenuzamos.
Lo primero que debes saber es que todos los derechos que posees son replicados en el mundo digital y están en constante transformación, un ejemplo de esto, lo entendemos a raíz de la pandemia cuando lxs trabajadorxs comenzaron a demandar derechos laborales en línea sobre sus descansos, salud mental, exigir las herramientas para desempeñar su trabajo, entre otros.
“También tenemos el derecho a la salud o a la educación que han encontrado cabida dentro del espacio en línea”, acota Agneris Sampieri. Eso sí, la abogada explica que no hay una lista exacta de los derechos en línea, sin embargo, hace hincapié que los dos mundos están más conectados de lo que creemos porque uno, es el reflejo del otro, ¿esto qué quiere decir?
Las principales violencias que se viven en el internet responden a opresiones sistémicas, esto lo esboza el Módulo sobre Ciberacoso (MOCIBA 2022) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía donde se expone que en ese año, 9.8 millones de mujeres usuarias fueron violentadas, este número es 2 millones doscientos mil más que los hombres.
Además, el rango de edad de las mujeres que son violentadas digitalmente con mayor incidencia es bastante amplio; de los 12 a los 39 años de edad, siendo las situaciones más frecuentes las siguientes:
- Recibir contenido sexual
- Insinuaciones o propuestas sexuales
- Mensajes ofensivos
- Contacto mediante identidades falsas
- Críticas por apariencia
El rol de género pauta una diferencia entre estas violencias y es que, los mexicanos que fueron violentados digitalmente vivieron con mayor incidencia la suplantación de identidad, mensajes ofensivos y llamadas ofensivas. Para los hombres, el ciberacoso sexual se sitúa muy por debajo alcanzando apenas el 1 de cada 10 casos, según el INEGI.
“La violencia digital es un reflejo de lo que está sucediendo en el mundo real, existen viejos estereotipos de género, muchas cuestiones estructurales de nuestra cultura sumamente machista que durante años han ejercido esquemas de violencia, sobre todo dirigido a las mujeres y a grupos que viven situaciones de vulnerabilidad, también hemos visto que existe una especial violencia contra mujeres trans (…) Todas son violencias que siempre están en el mundo análogo.” (Agneris Sampieri)
¿Qué tipo de violencia digital puedo denunciar?
Esta pregunta es uno de los puntos más importantes en torno a la violencia digital y es que, debes saber, que en nuestro país, no todas las violencias que vives en línea son delitos. Sabemos que esto puede resultar contrariado, por eso, La Cadera de Eva entrevistó a la abogada de Impunidad Cero Leslie Jiménez para ahondar en este tema y saber cómo proceder de acuerdo a la situación que viviste y desenredar qué sucede con los códigos penales.
“Desafortunadamente la tipificación, el delito, tiene mucho que ver solamente con un tipo de violencia contra la intimidad sexual y muy pocos códigos abordan otros tipos de violencia, por ejemplo, el doxeo”, explica la abogada.
Entonces, ¿el doxeo es violencia? Sí. ¿Es un delito?: No.
Aunque podamos hablar que el doxeo apela al uso indebido de datos y vulneración de la privacidad, que sí está contemplado en la Ley General de Justicia, no quiere decir que sea un delito.
Sobre esto, Leslie Jiménez acota que la mayoría -si no es que todos- los delitos del código penal tienden a ser bastante “huecos”, en el sentido de que sólo describen las conductas y no da hincapié para que se puedan adjudicar otras situaciones en particular, es decir, que debe de estar absolutamente pegado a cómo está tipificado y, en sus palabras, esto carece de un sentido social e interseccional.
¿Y qué pasa si estoy recibiendo mensajes de texto de carácter sexual?
El recibir mensajes de texto de carácter sexual implica un proceso violento de acoso, pero al igual que el doxeo, esto tampoco es un delito. ¿Y la Ley Olimpia? En entrevista con La Cadera de Eva, Leslie Jiménez explica que hay un mar de desinformación y es que, aunque esta ley contemple la violencia digital, sólo lo hace cuando se trata de contenido digital como fotos o vídeos, pero en ningún apartado se habla de mensajes de texto.
TE PODRÍA INTERESAR
Se disparan llamadas de emergencia realizadas por mujeres en CDMX
Primera parada: Identificar si puedes o no proceder
Ciudad de México y Nuevo León son las entidades que poseen las plataformas digitales más completas para realizar denuncias y es que, en otras partes de la República, los sitios o aplicaciones tienden a ser muy arcaicos o bien, sólo cuentan con opciones para denunciar robos, extravío de documentos o delitos de este corte y en ningún espacio se contempla la violencia digital.
En 2021, denuncia.org trabajó en un sitio que recopiló información de todas las entidades de la república y filtra los delitos que puedes denunciar.
Con esta herramienta podrás mantenerte al tanto del Estado en el que radicas, pero no olvides que es fundamental que sigas las redes oficiales del gobierno de tu entidad para conocer ajustes / modificaciones en sus plataformas digitales de denuncia.
La guía para denunciar violencia digital en CDMX
Debes saber que puedes denunciar la violencia digital acudiendo presencialmente o bien, vía internet. Esto último tiene grandes ventajas, explica la abogada Agneris Sampieri, por ejemplo, evitar las revictimizaciones y la violencia institucional.
A continuación, una guía y recomendaciones sobre cómo denunciar en línea:
- Abre la página de Denuncia digital dando click aquí.
- Acepta el aviso de privacidad antes de continuar en la página y procede a dar click en el apartado de la derecha “¿Fuiste víctima de un delito?”
- Te pedirá ingresar tu cuenta Llave CDMX -si no cuentas con una, puedes darle click ahí y presionar “Crear una cuenta”- o bien, ingresar al sistema con tu e.firma -firma electrónica SAT-.
*Este proceso de denuncia sólo es aplicable para personas +18. Considera que crear tu llave CDMX te permitirá acceder a múltiples procesos en línea, por lo que es recomendable que tengas tu cuenta siempre a la mano.
- Una vez adentro, te preguntará si fuiste víctima de un delito, si hubieron lesiones físicas, al dar click en “no” podrás localizar un formulario de supuestos donde no hubo agresión física.
- Localiza el delito que deseas denunciar, por ejemplo: la difusión de contenido sexual sin consentimiento. *Recuerda que, muchas violencias digitales no son contempladas como delito.
- Posteriormente, darás click en “realizar esta denuncia”, te desplegará una nueva página donde deberás llenar formularios informativos como tu nombre completo, CURP, edad, sexo, RFC, narración de los hechos, lugar de los hechos (tu domicilio/ escuela/ trabajo), preguntas relacionadas al delito que denuncias, agregar testigos -si es que los hay-.
*Recomendación: En el apartado de mantener como confidenciales tu número y dirección, da click en “sí”, Agneris Sampieri explica que siempre es idóneo proteger tus datos, aún cuando se trate de páginas oficiales del gobierno.
*Recomendación: Cada que llenes uno o dos datos, presiona “Guardar” para no perder tu proceso.
*Recomendación: En el apartado de “Lugar de los hechos” puede haber dudas, pues se trata de un delito digital que no está inserto en un espacio geográfico, sin embargo, la especialista explica que esta información se refiere a dónde tú viviste la violencia, puedes poner el domicilio de tu trabajo, escuela o casa. Asimismo, en el apartado de narración de los hechos, es vitalicio que agregues datos puntuales como mes, año, día y hora (no te abrumes, la hora tampoco debe ser precisa pero sí lo más aproximada posible).
“No te estreses de más, pues la falta de sensibilidad y las lagunas que hay en este tipo de situaciones recae en las autoridades, porque son ellas quienes están encargadas de rellenar estos huecos en las instituciones. Esto en ningún momento es tu culpa, ni excusa para que no se te preste la atención necesaria” (Agneris Sampieri)
A continuación, habrás pasado la primera barrera de la denuncia digital y continúan las siguientes etapas. Esto es lo que nos explica Leslie Jiménez:
- Hay tres escenarios, en el primero, te harán saber que tu delito debe ser denunciado presencialmente; en el segundo, te informarán que tu solicitud no fue entendida completamente y necesitas acercarte al ministerio público; en el último escenario, te harán saber que tu denuncia procedió con éxito.
- En este último escenario de éxito, podrás acceder a la plataforma de la Fiscalía de la CDMX donde encontrarás tu número de carpeta, tu carta de derechos y un citatorio donde te dice que debes asistir en un aproximado de 10/ 15 días con las autoridades correspondientes para darle seguimiento a la denuncia.
- El día que asistas a esa cita, debes de saber que no te atenderán, te darán información de tu carpeta y de qué persona le dará seguimiento. Esa persona responsable de tu caso, te dará otra cita posterior para que te presentes y las instrucciones que debes seguir para continuar con tu demanda.
Finalmente, sobra un tema muy importante en la agenda y es entender que todxs vivimos procesos diferentes al momento de tomar una decisión para denunciar. Esto último, la abogada Leslie Jiménez lo sintetiza de la siguiente manera:
“Todo lo que tiene que ver con violencias siempre se enfoca a la denuncia y si tú decides no hacerlo, te pueden catalogar como culpable por no hacerlo. Creo que la denuncia, no hay que verla como una obligación, sino como un derecho y al serlo, puedes elegir si hacerlo o no; son tus razones. No tiene porqué entrar un prejuicio social y mucho menos estatal. Yo le diría a las mujeres que no sientan culpas, ni acepten reproches porque la denuncia no es la salida que todxs buscamos, hay muchas formas de acceder a la justicia, no sólo la mirada legal, hay procesos y caminos diferentes, la justicia no es una institución; la justicia se cumple cuando yo sé que está resarcido el daño”