“Ivanka Trump, robado tus outfits y tus derechos reproductivos”, escriben usuarios en X.
No cabe duda que la moda continúa hablándonos del clima político y social que se vive en el mundo. Esta vez, la investidura del presidente Donald Trump trajo consigo looks que ya nos permiten previsualizar qué es lo que nos espera en la agenda social y política mundial, al menos durante los próximos cuatro años del recién iniciado mandato presidencial.
Entre los atuendos más comentados en redes sociales está el de Ivanka Trump, hija de Donald Trump. Ivanka asistió a la ceremonia en un conjunto de la casa de moda Dior, un traje de dos piezas en un tono de verde sobrio que cubría su cuerpo desde el cuello hasta la pantorrilla. Lo acompañó con medias y tacones negros.
Usuarios en redes sociales señalaron la similitud entre el atuendo de Ivanka Trump con el El Cuento de la Criada, una serie televisiva que se sitúa en un escenario distópico donde los derechos reproductivos y sexuales de las mujeres les son arrebatados. La comparación no es arbitraria y ese panorama ficticio se vuelve cada vez más tangible con el retroceso en materia de derechos humanos en los Estados Unidos.
No es una exageración señalar las similitudes entre los opresores que se ven en televisión, y los que habitan y modifican el mundo fuera de las pantallas. En ese sentido, la moda es una herramienta de comunicación que transita entre la ficción y la realidad.
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¿Por qué el estilo conservador está apoderándose de la moda?
Melania Trump y el mensaje detrás del sombrero
Entre los saludos neonazis como el que protagonizó el magnate Elon Musk, empresarios billonarios y declaraciones en contra de la dignidad humana por parte de Trump, Melania Trump también asistió a la investidura con un atuendo que conmocionó a usuarios en internet.
Melania apareció vistiendo un abrigo en color azul marino, casi negro, junto con un sombrero del mismo color, adornado con un listón blanco, hecho por el diseñador Adam Lippes. El conjunto, pensado para transmitir una imagen sofisticada y sobria, también deja ver a una Melania ausente, que toma su distancia y se entiende así misma como una espectadora, y que no tiene intenciones de cambiar su estatus.
Imágenes de Donald Trump intentando besar en los labios a Melania se hicieron virales, y es que el estructurado sombrero impedía dos cosas, ver sus ojos y capturar su mirada, y tener contacto físico con otras personas.
Aunque parece que la elección de Melania cambió radicalmente en comparación al nombramiento de su esposo hace ocho años, este atuendo sólo confirma lo que ya se sabía durante el primer mandato de Donald Trump, cuando Melania utilizó un conjunto de Ralph Lauren en color azul bebé, estilizado con guantes y el cabello en un perfecto peinado recogido, el movimiento conservador nuevamente está ganando terreno en las políticas de occidente.
¿La agenda política tiene relación con la moda?
Mientras las revistas de moda engrandecen a las mujeres de la familia Trump por sus atuendos, despolitizan a la vez todo carácter político de vestir. La misma industria de la moda se envuelve en la banalidad estereotipada que muchas veces se cree afín a la industria.
Ivanka Trump, Melania Trump, Usha Vance, segunda dama y esposa del vicepresidente JD Vance y quienes atendieron a la ceremonia con prendas sobrias, en colores opacos, telas rígidas y siluetas cuadradas, por un lado, la elección de vestido reafirma el mensaje que ya declaraban en tal año y también termina por demostrar el poder e impacto de la industria de la moda.
Bernard Arnault, director ejecutivo del grupo francés LVMH, dueño de marcas como Louis Vuitton, Dior, Tiffany & Co. Bulgari y Celine, asistió a la segunda investidura de Donald Trump como presidente, extendiendo y reafirmando la existencia de los lazos fraternos entre la política y la industria de la moda.
Para Lipovestki, filósofo y sociólogo francés, las ideologías se reciclan en la moda, mientras hay un cambio sociopolítico en la historia, la industria de la moda repetirá las ideas y patrones que dominan en el poder, en sus palabras “la moda es la exaltación del presente”, y en una sociedad atiborrada de tendencias conservadoras, el odio, el racismo, la discriminación, la xenofobia y la misoginia serán el pan de cada día.
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