A casi un mes de que finalizara su participación en los Juegos Olímpicos de París 2024, la maratonista ugandesa Rebecca Cheptegei, de 33 años, murió tres días después de haber sido quemada por su novio. No es la primera vez que una atleta olímpica es asesinada a causa de la violencia machista en el país.
Los primeros reportes señalaron que el agresor le roció con gasolina y le prendió fuego el domingo pasado durante una discusión, lo que provocó que la atleta sufriera quemaduras en el 75% de su cuerpo. De acuerdo con el portal Olympics, Rebecca Cheptegei estaba internada en un hospital de Eldoret, Kenia, junto con su atacante, quien también presentó quemaduras tras el incidente.
La noticia de su muerte fue confirmada este jueves por la madrugada por el presidente del Comité Olímpico de Uganda, Donald Rukare. La maratonista ugandesa había quedado en el puesto 44 en el maratón femenino de los Juegos Olímpicos de París el 11 de agosto.
Rebecca obtuvo el oro en el Campeonato Mundial de Montaña y Trail Running en Tailandia en 2022. Había decidido establecerse en el condado de Trans-Nzoia para entrenar, después de adquirir tierras en la región keniana.
Según el portal Deutsche Welle, los padres de la corredora Rebecca Cheptegei, que su hija, residente en Uganda, había comprado un terreno en el condado keniano y había construido una casa donde se alojaba durante sus entrenamientos.
Rebecca es la tercera atleta víctima de violencia doméstica
El portal deportivo señala que no es la primera vez que una atleta fallece a causa de violencia doméstica en Kenia. En 2021, la atleta Agnes Tirop, fue asesinada a golpes por parte de su pareja en Iten, Kenia, tan solo 10 días después de su última carrera en Suiza. Un año después, otra corredora keniana, Damaris Mutua, fue estrangulada también por su novio en la misma localidad.
Tirop había ganado medallas en campeonatos mundiales y establecido récords en competiciones internacionales, incluyendo un cuarto lugar en los 5 mil metros en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
Mientras que Damaris Mutua, de 28 años, había representado a Kenia en competiciones de fondo, y su muerte, similarmente violenta a la de Tirop, subraya el patrón de violencia de género que sufren las mujeres atletas en Kenia.
De acuerdo con el informe más reciente de la Oficina Nacional de Estadística de Kenia publicado en enero de 2023, el 34% de las mujeres del país han sufrido violencia física desde los 15 años.
Apenas en enero de este año miles de personas salieron a las calles en toda Kenia, tras asesinato de al menos 12 mujeres. En aquella manifestación denunciaron exigieron medidas para proteger a las mujeres del país por estos casos.
Según las conclusiones de la Comisión de la Verdad, la Justicia y la Reconciliación de Kenia (TJRC), la violencia sexual y de género (VSG), incluidas las violaciones en grupo, las agresiones y torturas sexuales, la esclavitud sexual y la mutilación genital forzada, ha sido durante mucho tiempo un problema en el país, especialmente en tiempos de conflicto.