“Considerando parámetros para personas en estado de vulnerabilidad, se determina quela imputada está exenta de culpa”, es así que la Fiscalía del Estado de México dio a conocer a través de un comunicado oficial que se desistiría del proceso penal en contra de Roxana Ruiz al tomar en consideración la perspectiva de género y juzgar desde la imparcialidad.
El hecho ha sido celebrado por colectivas quienes han sido compañía y refugio importante para Roxana Ruiz, sin embargo, aunque se ha logrado su absolución, el proceso para la obtención de justicia ha sido largo; estigmatizaciones, violencia, nula perspectiva de género, amenazas y reclusión por casi un año en un centro penitenciario, son algunos de los obstáculos a los que se ha enfrentado Roxana Ruiz para demostrar su legítima defensa.
En tan sólo cinco días (15 de mayo - 20 de mayo) se ha sorteado al sistema de justicia mexicano y se ha logrado una absolución. Esto es un seguimiento de lo que ha pasado en los últimos días y las demandas de protección actuales que busca la colectiva Nos Queremos Vivas Neza y Roxana Ruiz.
15 de mayo: El día de la imputación
“Exceso de defensa personal”, este fue el argumento principal en el que se sostuvo la sentencia condenatoria en contra de Roxana Ruiz Santiago quien fue víctima de abuso sexual. Y es que, aunque se acreditó la legítima defensa, el delito de homicidio simple se le imputó, condenándola a 6 años con 2 meses de prisión y una multa de 280 mil pesos. El defensor legal, Ángel Carrera fue el primero en rendir declaración amagando con que se lucharía por revocar la decisión, así se tuviera que llegar a las últimas instancias.
Originaria de una comunidad indígena de Oaxaca, Roxana Ruiz, es una madre de 23 años migró al Valle de México, asentándose en la periferia oriente de la CDMX en donde se desempeñaba como comerciante.
Un hombre identificado como Sinaí “N” ingresó a su domicilio ubicado en Nezahualcóyotl donde la mujer radicaba en compañía de su hijo, posteriormente, abusó sexualmente de ella amenazándola con un objeto punzo cortante. De acuerdo con información de Proceso, la mujer lo golpeó en la nariz y de manera reaccionaria, el hombre amenazó con asesinarla.
En legítima defensa, Roxana Ruiz utilizó una playera para asfixiar a su agresor quien se encontraba distraído intentando huir del lugar.
“Mi único delito fue defenderme del hombre que me violó” (Proceso).
Fue detenida en junio del 2021 y derivada al Centro Penitenciario y de Reinserción Social Nezahualcóyotl Bordo de Xochiaca y nueve meses después, -en febrero del 2022-, un juez determinó que Roxana Ruiz llevaría su proceso en libertad.
Ahora, en mayo del 2023 y tras un proceso de casi tres años, el Tribunal de Enjuiciamiento del penal Neza-Bordo determinó que la mujer “excedió los límites de la legítima defensa”, por lo que el 15 de mayo se llevó en Nezahualcóyotl la última audiencia para emitir la condena.
La colectiva “Nos queremos vivas Neza”, que ha acompañado a Roxana Ruiz, emitió un boletín informativo donde condenó el actuar de las autoridades mexiquenses, demandando que el proceso contara con perspectiva de género y se respetaran sus derechos humanos. Es importante destacar estas demandas, pues luego de la resolución para absolver a Roxana Ruiz, la Fiscalía del Estado de México señaló vía Twitter que la justicia mexiquense siempre velará por la perspectiva de género y la justicia.
“La Fiscalía General del Estado de México refrenda su compromiso de investigar con honradez, profesionalismo, perspectiva de género y respeto a los derechos humanos en todas las investigaciones” (Boletín informativo de la FGJ)
Las exigencias de la colectiva para implementar la perspectiva de género se extendieron a otros rubros, señalando que no sólo basta con hablar de protocolos o Fiscalías especializadas en género si al interior de los órganos impartidores de justicia las personas siguen reiterando y reafirmando violencias que vulneran la vida de las mujeres, discriminan y niegan la debida diligencia a las víctimas.
La perspectiva de género estipulada en México
En nuestro país se tiene pactadas dos convenciones que estipulan la perspectiva de género y obligan al Estado mexicano a juzgar desde la interseccionalidad toda violencia física, sexual y psicológica.
En primera instancia, el tratado “Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer” (CEDAW) vela por mantener los procesos jurídicos y penales libres de cualquier discriminación de género.
Recoge un total de 30 artículos en seis apartados y señala que el Estado es el actor responsable de garantizar una vida libre de violencia a mujeres y niñas. Estos son algunos puntos sustanciales para entender el tratado y que son aplicables al caso de Roxana Ruiz.
- El estado debe abstenerse de incurrir en todo acto o práctica de discriminación contra la mujer y velar por que las autoridades e instituciones públicas actúen de conformidad con esta obligación
- El estado debe examinar las leyes y políticas neutrales en cuanto al género para asegurarse de que no crean o perpetúan las desigualdades existentes y derogarlas o modificarlas si lo hacen
- La protección a las mujeres contra la discriminación incluye que ellas tengan acceso a tribunales competentes y otras instituciones públicas que puedan determinar sanciones e indemnizaciones. El personal de dichos tribunales y las instituciones públicas debe recibir capacitación adecuada para aplicar los principios de igualdad y no discriminación por motivos de sexo o género
El segundo pacto es la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer Belém do Para que estipula desde 1994 que el Estado debe asumir su responsabilidad para hacer frente a la violencia de género que viven las mujeres en México.
El Belém do Para acota que los órganos institucionales deben de erradicar el profundo arraigo cultural que normaliza y permite prácticas revictimizantes, violentas y sin perspectiva de género al momento de llevar a cabo procesos por violencia física, sexual y psicológica. Acá algunos de sus postulados.
- El Estado debe condenar todo tipo de violencia contra las mujeres, prevenirla, sancionarla y erradicarla es parte de reformar los marcos jurídicos y juzgar con perspectiva de género.
- La Corte entiende que debe integrarse la perspectiva de género en el análisis de hechos que podrían configurar malos tratos, pues ello permite analizar de un modo más preciso su carácter, gravedad e implicancias, así como, según el caso, su arraigo en pautas discriminatorias. En ese sentido, actos de violencia sexual deben presentar una especificidad propia respecto a mujeres y niñas.
- La violencia sexual afecta aspectos esenciales de la vida privada de las personas, su integridad personal y sus valores; es una intromisión en su vida sexual y anula su derecho a tomar libremente decisiones sobre su vida sexual. La Corte entiende que debe integrarse la perspectiva de género en el análisis de los hechos.
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Y a ti, ¿cómo te beneficia la perspectiva de género?
La perspectiva de género y la interseccionalidad son necesarias en la obtención de la justicia que, además, está estipulada por la Suprema Corte de Justicia en el Protocolo para Juzgar, demandando lo siguiente:
“Utilizar la interseccionalidad permite reconocer que la combinación de dos o más condiciones o características en una misma persona, como su raza, etnia, género, clase o nacionalidad producen una opresión única. No contemplarlo, consiste en una discriminación compuesta que invisibilidad la presencia de más de un tipo de violencia (…) esto obstaculiza el ejercicio de derechos humanos, incluido, el acceso a la justicia”.
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La audiencia de Roxana Ruiz contó con una duración de más de tres horas en las cuales, se le imputó el delito de homicidio simple. Luego de darse a conocer la sentencia, las redes se incendieron y las colectivas pactaron una manifestación pacífica que tuvo lugar en la Glorieta de las Mujeres que Luchan hacia el Ángel de la Independencia el día 18 de mayo.
"Si no fuera por todo lo que me han ayudado, hubiera perdido la cabeza y no hubiese aguantado un proceso tan largo." (Roxana Ruíz agradeciendo a colectivas que la han acompañado)
Indulto presidencial, un juicio estigmatizante y amenazas: todo en 5 días
El 19 de mayo, un día antes de que la Fiscalía del Estado de México absolviera de todo cargo a Roxana Ruiz, la mujer, en compañía de su defensor, Ángel Carrera encararon otra arista del sistema mexicano luego de que el presidente López Obrador le ofreciera un indulto, es decir, una absolución del delito imputado pero aceptando su culpabilidad.
Esto último fue rechazado y condenado enérgicamente por colectivas y Ángel Carrera que declaró que aceptar el indulto sería fallarle a Roxana Ruiz por defender su vida y permitir que sea criminalizada.
Si bien agradecieron la intervención presidencial por reconocer la inocencia de Roxana Ruiz, enfatizaron en que ese sería el último recurso que agotarían en caso de no lograr su absolución.
En este pronunciamiento, el defensor condenó que durante el juicio, la Fiscalía admitió a ocho personas testimoniales que fueron admitidos por la jueza y el Tribunal quienes, de manera desestimada, estigmatizaron y agredieron a Roxana Ruiz acusándola de provocar sexualmente a hombres, ser grosera y agresiva, mientras que a Sinaí “N” se refirieron como un hombre tranquilo, bueno y que “ni siquiera tomaba”.
Hasta las últimas instancias, la colectiva Nos Queremos Vivas Neza y Ángel Carrera sostuvieron que la defensa de Roxana Ruiz fue completamente legítima y no “excesiva”, pues se determinó psicológicamente que su comportamiento y actuación fue producto de un shock postraumático. Todo esto, luego de que se le criminalizara por abandonar el cuerpo de su agresor en vía pública.
A lo largo de estos días las integrantes de la colectiva y Roxana Ruiz han denunciado en sus redes sociales amenazas por parte de la familia de Sinaí “N” y otros grupos de choque pertenecientes, supuestamente, al movimiento antorchista. Hasta el momento, la Comisión Nacional y Estatal de Derechos Humanos no han realizado pronunciamiento alguno, ni ofrecido protección que garantice la seguridad de las integrantes de Nos Queremos Vivas Neza y Roxana Ruiz.
