¿Alguna vez has escuchado que el aborto es un pecado imperdonable? ¿Has sentido culpa o vergüenza por considerar la posibilidad de interrumpir un embarazo, solo porque alguien te dijo que es contrario a la voluntad de Dios? ¿Te han hecho creer que el aborto es una forma de "matar" a un ser inocente, y que por lo tanto, es un acto moralmente reprobable?
Si la respuesta es sí, no estás sola. Muchas personas han sido condicionadas a creer que el aborto es un tema moralmente complejo, y que está prohibido por la religión. Pero, ¿qué hay de verdad en estos mitos? ¿Es realmente el aborto un pecado, o es solo una cuestión de salud y derechos humanos?
En esta entrevista, Aidé García Hernández, directora de Católicas por el Derecho a Decidir México (CDD), un movimiento de personas feministas católicas, comprometidas con la defensa de los derechos reproductivos y sexuales, analiza algunos de los mitos más comunes sobre el aborto en la religión, y examina la realidad detrás de estas creencias.
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¿El aborto es un pecado?
En México, donde casi el 80% de la población se identifica como católica, de acuerdo con el Inegi, el tema del aborto sigue siendo objeto de controversia, alimentado por mitos y creencias arraigadas en la doctrina religiosa.
Aidé García Hernández explica que lo que realmente impacta la decisión de las mujeres sobre el aborto son la culpa y el pecado, conceptos impuestos por la jerarquía de la Iglesia Católica, la cual ha calificado la interrupción del embarazo como un "asesinato”.
Esta creencia, aunque no es un mito en sí, es una interpretación de la doctrina que afecta profundamente la toma de decisiones de muchas mujeres, pues les genera un fuerte sentimiento de culpabilidad.
"El aborto dentro de la Iglesia Católica se ha estigmatizado mucho y lo que nosotras queremos poner en plano es que dentro de la de la tradición católica hay documentos de la religión que han hablado de que no necesariamente es un pecado para las mujeres abortar" (Aidé García Hernández, directora de Católicas por el Derecho a Decidir México.)
Contrario a la condena general del aborto, el Código de Derecho Canónico, la ley de la Iglesia, contempla excepciones a la pena por aborto en varias circunstancias, incluyendo cuando la mujer es menor de 16 años, actuó por violencia o miedo, o lo hizo por necesidad.
Esto sugiere que la Iglesia no condena el aborto en todos los casos, y que las mujeres pueden tomar decisiones basadas en un dilema ético. Además, Aidé García aclara que las normas de este Código no son dictadas por Dios, sino por personas de la Iglesia.
Otros mitos comunes
Otros mitos comunes difundidos por grupos antiderechos y la misma Iglesia, es que las mujeres que abortan sufren problemas psicológicos o que nunca podrán ser madres de nuevo.
García Hernández menciona que estos mitos son utilizados para controlar las decisiones de las mujeres, quienes también son sometidas a la creencia de que deben tener los hijos que "Dios les mande".
La Encuesta Nacional de Opinión Católica 2014 realizada por CDD reveló una brecha considerable entre las creencias y opiniones de las y los católicos y las posturas oficiales de la Iglesia en temas como el aborto, los derechos sexuales y reproductivos, la diversidad sexual y las estructuras familiares.
Un 89% de las personas opina que un médico debe priorizar la salud de la mujer y realizar el aborto si es necesario, y no sus creencias religiosas. Respecto a una mujer católica que decide abortar, 40% cree que debe confesarse con un sacerdote, 34% que solo debe confesarlo a Dios, y 26% que no tiene necesidad de confesarlo. Un 74% apoyaría que la Iglesia católica permita el aborto en algunas circunstancias.
Además, la mayoría de las y los católicos encuestados apoyan la educación sexual, el acceso a métodos anticonceptivos, incluyendo la pastilla de emergencia, y el derecho a decidir sobre el número de hijos.
También hay un apoyo notable hacia el reconocimiento de los derechos de homosexuales y lesbianas, incluyendo el matrimonio civil y la adopción. Además, el 78% de las y los católicos desearía que la Iglesia actualizara sus posturas en estos temas.
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Reconciliando la fe y el derecho a decidir
Aidé García Hernández explica que las mujeres católicas pueden decidir libremente sobre el aborto sin dejar de ser católicas, pues las enseñanzas de la jerarquía católica no siempre reflejan las necesidades y realidades de las personas pues hay interpretaciones dentro de la tradición católica que apoyan la idea de que el aborto no es necesariamente un pecado para las mujeres.
El ejemplo de la Virgen María, quien fue consultada antes de ser la madre de Jesús, es fundamental para comprender que todas las mujeres tienen derecho a decidir sobre sus propios cuerpos y que el consentimiento es crucial en decisiones sobre la reproducción, y de que hay interpretaciones teológicas que apoyan la autonomía de las mujeres.
Al respecto, Aidé García señala que la jerarquía de la Iglesia Católica juega un papel fundamental en la perpetuación de estos mitos, al sostener que las mujeres no tienen autoridad moral para decidir sobre su sexualidad y reproducción, lo cual refleja una postura conservadora y misógina busca que otros decidan por ellas pues le niega su autoridad moral para decidir en libertad de conciencia sobre su sexualidad y reproducción.
"Por un lado la Iiglesia dice, 'nNo puedes abortar, es un pecado, es un asesinato.'. Pero al final las mujeres se ven en la necesidad de hacerse un aborto. Y eso no quiere decir que dejemos de ser católicas. Queremos que las personas vivan esa fe y esa religión de una manera sin culpa, sin pecado y sin y sin estigma" (Aidé García Hernández, directora de Católicas por el Derecho a Decidir.)
Católicas por el Derecho a Decidir México busca desmantelar los mitos sobre el aborto y empoderar a las mujeres para que tomen decisiones informadas y libres, sin la culpa y el estigma impuestos por ciertas interpretaciones de la doctrina católica.
Si aun tienes dudas sobre el aborto en la religión te invitamos a consultar su micrositio Otra mirada Católica del aborto. ahí encontrarás más recursos e información.