Entre los pasillos de la Cineteca Nacional de México se levanta un grupo de mujeres trans, organizadas, autogestivas y disruptivas que luchan por sus derechos. El tianguis de las “Mariposas Negras” es una forma de protesta que reivindica el espacio público que por años le ha sido negado a la comunidad trans.
En entrevista con La Cadera de Eva, Razzia Santillán, activista y fundadora del “Clan de las Mariposas Negras”, junto con Aney de la Paz y Ángela Márquez, describen la importancia de la protesta en espacios públicos como este.

“No es tianguis, es protesta”
El 12 de septiembre de 2023 Razzia Santillán, una mujer trans, fue sacada injustificadamente del baño de mujeres de la Cineteca Nacional, quienes lanzaron un comunicado comprometiéndose con el respeto a la diversidad. Sin embargo, al día de hoy la comunidad trans continúa recibiendo agresiones por parte de las autoridades de la Cineteca Nacional.
A dos años de los hechos, y a través de la constitución del tianguis “Mariposas Negras”, Razzia, junto con otras compañeras, luchan por regresarle a la Cineteca Nacional la categoría de espacio público, libre de discriminación.
El Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (COPRED) emitió en 2024 una recomendación para erradicar la discriminación contra de las personas trans por el uso de sanitarios públicos, ya que tan sólo en ese año se registraron 36 casos por violencia y discriminación relacionada con el uso de baños públicos ubicados en centros comerciales, cines, gimnasios y escuelas.
“(Ocurrió) sencillamente por ser una mujer trans y eso dio pie a que yo iniciara una serie de protestas bastante virales. En una de ellas rompí una pantalla aquí en la Cineteca Nacional. En otra ocasión hice un memorial por las decenas y decenas de mujeres que han asesinado año con año. Ahí empezó todo”, relata la activista.
“No hay una agenda nacional política trans, por eso es que nosotras estamos haciendo esto. Por la fuerza y de la mala mala manera”.
Hasta octubre de 2024 la Asamblea Nacional Trans No Binarie y el colectivo Transcontingenta reportó al menos 55 casos de tranfeminicidios. “Venos aquí, estamos muy organizadas, llevamos años y años autoorganizándonos, creando espacios y no nos vamos a dejar asesinar”, declaró Razzia Santillán.
“Nosotras seguimos muriendo, no tenemos dónde vivir, estamos enfermas, drogadictas, encarceladas, disforizadas. Muchas cuestiones nos atraviesan y lo cierto es que después de 40 años de documentación a la vida de mujeres trans, no hay ni una sola mujer trans que sea directora prominente en el mundo del cine, no hay ninguna fotógrafa prominente en el mundo”.
La reapropiación del espacio público
“Me encanta esa idea del tianguis (...). En un tianguis vendemos, ocupamos la calle, hacemos como unidad y también abrazamos los conflictos porque en un tianguis no tenemos que ser todas amigas. Esa es la picardía del tianguis y eso es lo interesante de la autoorganización de la gente en los tianguis”, cuenta Razzia.
La importancia de resignificar los espacios públicos que históricamente se le han negado a las comunidades vulnerables como a las personas en situación de calle, e incluso a las mismas comunidades que habitan las zonas, repercute en la creación de lazos solidarios y de resistencia.

“Yo considero que es muy importante ya que podemos recuperar espacios que antes eran del pueblo y para el pueblo”, explica Aney de la Paz, artista y activista por los derechos de las mujeres trans sobre la reapropiación del espacio público en el pueblo de Xoco, después de la apertura del complejo y centro comercial Mitikah en 2022.
“Entiendo que es importante que la gente que no somos de estratos sociales altos, se nos consideren espacios. Al final del día todos necesitamos trabajar, todos necesitamos producir, todos necesitamos generar”.
“(Estos espacios) le muestran una visión a la población que está totalmente cegada con que no sucede nada con nosotras. Es súper importante vernos, visibilizarnos en espacios como estos que son súper visitados por personas del exterior y que vean como este tipo de protesta es súper bueno para darle a entender al mundo la situación que vivimos nosotras las personas trans”, reflexiona Ángela Márquez, una mujer trans originaria de Venezuela. “Hay muchas mujeres trans que guerrean fuerte para darnos esa visibilización y ese espacio”, concluye Márquez.
