“Las mujeres de Chile merecen su derecho a decidir”, con esas palabras, el presidente de Chile, Gabriel Boric anunció ante el Congreso Nacional de su país, que presentará un proyecto de ley de aborto legal a finalizar el año 2024.
El mandatario puntualizó: “Estoy convencido de la necesidad de dar un debate democrático en materia de derechos sexuales y reproductivos. Por eso es que, durante el segundo semestre de este año, ingresaremos un proyecto de ley de aborto legal, que someteremos a la discusión correspondiente".
Pese a los aplausos tras el anuncio, algunos diputados opositores salieron del pleno. Por lo que el mandatario, exclamó: “No es extraño que sea un diputado hombre el que se haya retirado de la sala”.
Los parlamentarios de Renovación Nacional (RN, extrema derecha), Unión Demócrata Independiente (UDI, derecha), Partido Republicano de Chile (PLR, extrema derecha) y Partido Demócrata Cristiano, también conocido como Democracia Cristiana, ( PDC centro derecha) fueron los que mostraron su rechazo ante la propuesta del presidente de Chile.
Los parlamentarios de la Democracia Cristiana no tardaron en señalar que el proyecto que propondrá Boric “los aleja del Ejecutivo y los insta a volverse de oposición".
En este sentido, las militantes Frente Feminista de la Democracia Cristiana emitieron un comunicado en el cual señalan que la Democracia Cristiana tiene un compromiso con la defensa, promoción y garantía de los Derechos Humanos.
“Especialmente de las niñas, mujeres disidencias, personas mayores y en situación de discapacidad en nuestro país durante toda su experiencia vital, esto incluye el derecho a abortar y a tener una muerte digna”, apunta el comunicado.
Además, hicieron un llamado a los diputados del partido a “dar el ejemplo en el Congreso” y escribieron que, “no se puede condicionar el diálogo y las necesidades de nuestras y nuestros compatriotas a creencias religiosas que no encuentran su espacio natural de desarrollo en el trámite legislativo”.
Claves para entender proyecto de ley de aborto legal
En 2017, la expresidenta chilena Michelle Bachelet, en su segundo gobierno (2014-2018), aprobó la ley 21.030 que despenalizó la interrupción voluntaria del embarazo por tres causales; en caso de peligro de la vida de la madre, violación o inviabilidad del feto.
Ante ese escenario los movimientos feministas de Chile denuncian que aún persisten muchos obstáculos para su plena implementación desde el inicio. Por ejemplo, no había suficiente información sobre la ley y los derechos que reconoce.
Por otro lado, los profesionales no tenían la capacitación suficiente para realizar los procedimientos y no hay regulación en la objeción de conciencia, aunque existan las tres causales. Y es que el personal de salud aún puede abstenerse de realizar la interrupción del embarazo cuando hubiese manifestado su objeción de conciencia.
Uno de los obstáculos que se prevén para la discusión y aprobación del proyecto que propondrá el presidente Boric, es que el actual Congreso de Chile se conforma con la mayoría de oposición, por lo que el aborto legal y libre corre el riesgo de no ser garantizado.
¿Qué se sabe del proyecto de ley de aborto legal en Chile?
Aunque en su intervención, Boric no dio más detalles sobre el proyecto, el mandatario chileno recordó que la ley vigente contempla la interrupción del embarazo en tres casos. Por lo tanto, la nueva propuesta busca “asegurar un derecho establecido en la ley, que la objeción de conciencia personal no obstaculice el aborto en tres causales y que la capacidad de pago no sean una barrera para que la atención sea oportuna”.
En este sentido, explicó que después de siete años que se promulgó la ley por Bachelet, que consiste en la despenalización del aborto en tres causales, es “tiempo prudente de evaluación, hemos decidido mejorar su aplicación. Así, hemos ingresado a Contraloría un nuevo reglamento para esta ley. Con ello, buscamos garantizar que la población conozca sus opciones".
Por otro lado, el mandatario indicó que pondrá en marcha el proyecto de ley de eutanasia y cuidados paliativos, que hasta ahora permanece en el Senado. Además, en el mes de junio iniciará el proyecto de ley de equidad salarial “para que las mujeres sean remuneradas en función de sus méritos y no en función de una discriminación de género”.