Muchas mujeres han contado en redes sociales que cuando estaban embarazadas, sus novios o esposos les fueron infieles; estos hechos casi siempre van relacionados con la búsqueda de placer del hombre o con la nueva apariencia de las mujeres mientras están gestando, pero muchas veces estos no son los motivos de la infidelidad.
Cientos de artículos de habla inglesa refieren que durante el embarazo, las mujeres presentan libido bajo, por lo que no desean tener relaciones sexuales con sus parejas. Estas connotaciones culpan a las mujeres por no “satisfacer” a sus parejas y las responsabilizan por “descuidar” a sus novios o esposos pero al final solo son discursos misóginos que justifican las decisiones de los hombres.
Para hablar sobre el tema, La Cadera de Eva platicó con la maestra en psicoterapia psicoanalítica con perspectiva de género, Norma Escamilla Barrientos; quien contó que desde la psiquiatría, este tipos de casos son vistos como una patología y tienen que ver con un trastorno de personalidad, según el “DSM-5 Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales”, sin embargo, desde la perspectiva psicoanalítica puede estar relacionado con el narcisismo y la fase edípica.
“Algunas de las causas tienen que ver con satisfacer el sexo, controlar a las mujeres y demás. Sin embargo, desde la perspectiva psicoanalítica, va más allá y puede tratarse de una persona narcisista. El narcisismo es algo muy importante en el que todos y todas tenemos que pasar porque finalmente de ahí se deriva mucho lo que le llaman confianza y autoestima”, refirió Norma Escamilla.
Narcisismo y complejo de Edipo: algunas de las causas
Escamilla explicó que el narcisismo se construye en la infancia, así como el complejo de Edipo, el cual consiste en tener sentimientos y deseos por alguno de los progenitores, especialmente con la mamá. Cuando esto no es resuelto en la infancia y se presenta en la adultez se puede manifestar con las infidelidades constantes, las cuales en realidad NO tienen nada que ver con la búsqueda del gozo a través de las relaciones sexuales, dijo.
“Estos hombres en realidad tienen tintes de narcisismo y la parte edípica que tiene que ver con el vínculo con la madre. No necesariamente tiene que ver con la búsqueda de sexo. En realidad son hombres con mente de niños y por eso saltan de una relación a otra porque no toleran la ausencia”, agregó Escamilla.
Mencionó que desde esa infantilidad, buscan todo el tiempo a la madre, la cual nunca va a encontrar en una pareja, necesita esos brazos y esa mirada de la madre que lo envuelve al ser amamantado, declaró la experta.
“Son esos bebés, esos chiquitos que buscan ser mirados por la madre. Y entonces lo buscan todo el tiempo en las mujeres, pero no tiene que ver con una cuestión sexual en realidad. Entonces más bien es este miedo a responsabilizarse porque el adulto se responsabiliza, pero un niño no”, dijo Norma.
Los hombres sienten celos del bebé
Al decir que un niño quiere que se hagan cargo de él, explicó que cuando la pareja está embarazada, es lógico que generen celos edípicos, es decir, infantiles, los cuales tienen que ver con la competencia, ya que alguien más está ocupando sus lugares.
“Literalmente es un chiquito que no sabe qué hacer con esa emocionalidad, que siente que lo están haciendo a un lado y que no es importante. Porque además, cuando nace ese bebé, el centro es ese bebé y el hombre se siente poco visto, poco querido y regularmente la justificación es que ya la mujer ya no le presta atención”, advirtió la maestra.
Cuando un hombre huye de los cuidados del bebé y abandona a su pareja, podría relacionarse con la figura de un niño narciso edípico, que se siente excluido y piensa que como ya no es el centro de atención de la mujer, debe conseguir a otra que le haga caso. Esto puede presentarse en cualquier situación, dice Norma, no solo cuando la mujer está embarazada.
“También lo hacen cuando sienten que sus parejas ya no están felices con ellos, por eso buscan a otra persona. O cuando la mujer empieza a trabajar más, cuando es independiente y tiene vida social, por eso él se siente desplazado. Cualquier cosa que sienta que le quita la mirada esa mujer con la que entabla una relación, inmediatamente va a buscar a otra”, explicó.
Norma Escamilla describió estos hechos como patológicos y patriarcales, pues los hombres se aseguran de “tener varias velitas encendidas”, porque no saben estar solos.
“Están buscando la chichi de la madre, que no es como tal el seno, sino con la escena de abrazar al bebé, amamantarlo. Eso es justamente lo que ellos están buscando en esas otras mujeres y pues nunca lo van a encontrar, porque ellas no son ni serán las madres”, apuntó.
Reiteró que los hombres narcisistas y con complejo de Edipo se sienten invadidos con cualquier situación que lo desplacen. No tiene nada que ver con la situación sexual con su pareja embarazada, pues son mitos que las mujeres ya no tengan ganas de tener relaciones sexuales.
“Es un mito que se baje el libido cuando la mujer está embarazada, al contrario, algunas mujeres presentan un aumento. También es un mito que se lastime al bebé o sea peligroso tener sexo. Excepto en el último mes de embarazo, pues las mujeres se dedican 100% a lo que está por venir”, dijo Norma.
A pesar de todo lo anterior, tampoco se debe responsabilizar a la madre o al padre del sujeto, por no haber resuelto su Edipo, y quedar enganchado con su progenitora, dijo la especialista, el único responsable de la infidelidad es el propio hombre, pues lo que haya pasado en su infancia no lo justifica de ninguna manera.
“Este tipo de hombres tienen que trabajar en sí mismos, se debe entenderlo más no disculparlo, porque si quieren entablar una relación adulta y tienen estos miedos, deben trabajarlo, en vez de lastimar y usar a sus parejas”, dijo Norma.
Por último, la especialista recomendó a estos hombres trabajar en su salud mental, pues muchas veces por los estereotipos de género les impide acercarse a terapias o a hablar con especialistas.