“M” fue a buscar trabajo en Puebla como edecán y terminó siendo violada y extorsionada por sus “reclutadores”. Ella se presentó cubierta del rostro en una conferencia de prensa donde estaba respaldada por representantes de organizaciones como CAFIS A.C, REDfine Puebla, el Colectivo Voz de los Desaparecidos y Frente Nacional por las 40 horas con el fin de pedir a la fiscal general de Puebla, Idamis Pastor Betancourt, que le ayude a hacer justicia y al mismo tiempo motivar a las demás víctimas que vivieron una situación parecida a la de ella para que alcen la voz.
De acuerdo con Natalí Arias, directora del Centro de Análisis, Formación e Iniciativa Social (CAFIS), el patrón está muy claro en las solicitudes de trabajo que se encuentran en las redes sociales y e incluso en plataformas formales como Computrabajo: buscan universitarias, y si son foráneas, mejor.
“Sabemos de la vulnerabilidad cuando migran de sus espacios y están solas sin redes familiares y eso es algo que también tienen que poner ojo todas las universidades, ojo, sin estigmatizar, pues el trabajo que todas desempeñemos como edecanes, como trabajadoras del hogar o como abogadas es digno”, puntualizó Natalí Arias.
Además, en capturas de pantalla compartidas por las activistas, se aprecian solicitudes de trabajo para ser scort en Puebla dirigido tanto para jóvenes universitarias “atractivas” que buscan un segundo empleo, como para mujeres con educación mínima con edades de entre los 50 a 70 años.
El caso de “M” no es un caso aislado. Luego de que se viralizara su testimonio, varias víctimas más contactaron a las activistas, quienes vivieron situaciones similares al buscar empleo como edecanes.
“Desafortunadamente, este no se trata de un caso aislado, sino de una forma de violencia sexual contra las mujeres jóvenes que se reproduce en un contexto social complejo, donde confluyen la violencia, la precarización laboral y la falta de oportunidades. De hecho, a raíz de la publicación realizada por la jornada, otras jóvenes manifestaron ser víctimas de estas vacantes falsas”, se leyó en un comunicado que compartieron en conferencia de prensa.
¿Cómo denunciar y prevenir caer en una vacante de empleo peligrosa?
Las activistas realizaron una serie de recomendaciones al respecto:
• Verificar que la vacante de trabajo se encuentre publicada en la página oficial de una institución o empresa. Desconfiar de aquellas que solo aparecen en redes sociales o en la calle.
• Evitar entrevistas que se realizan en ubicación desconocida, zonas poco públicas o en un lugar que no está claramente especificado. Alertarse ante entrevistas donde citan en un lugar y después te indican que deben trasladarte a otro sitio.
• Verificar aquellas vacantes donde solicitan pocos requisitos o nula experiencia.
• No ceder a presiones para aceptar un puesto de forma inmediata.
• Revisar a detalle aquellas ofertas dirigidas a ciertos grupos, por ejemplo; mujeres, jóvenes o adultas/os mayores, ya que está documentado que pueden ser vacantes dirigidas a grupos expuestos a situaciones de manipulación, explotación o extorsión.
• Sospechar de aquellas propuestas que prometen un salario excepcional o muy alto por actividades con poca o nula experiencia.
• Verificar la veracidad de ofertas laborales donde la vía de contacto es únicamente por teléfono o redes sociales.
• Desconfiar de entrevistas donde te solicitan dejar el celular o pertenencias fuera de la entrevista.
Finalmente, en el comunicado se señala que este tipo de agresiones a las que son expuestas las mujeres son difíciles de denunciar debido a que al ser publicadas en redes sociales o en línea es más sencillo ocultar la información o cambiar de usuario. Por esta razón, las activistas hicieron un llamado a los tres niveles de gobierno y a las universidades de Puebla para que investiguen y prevengan este tipo de casos.