Con un aumento del 9.5% de presupuesto para el Anexo 13, el incremento presupuestal es insuficiente para erradicar las desigualdades de género. El Centro de Análisis e Investigación, Fundar, realizó como cada año, el análisis del Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2025 que presentó el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum.

Te contamos los puntos esenciales para entender cómo funciona el presupuesto destinado a instituciones y herramientas para erradicar la disparidad de género.

¿Qué es el Anexo 13?

El Anexo 13 “Erogaciones para la Igualdad entre Mujeres y hombres” es parte del Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) y tiene como objetivo erradicar la violencia y desigualdad de género mediante el establecimiento de políticas públicas. 

El Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación de este año propone un presupuesto de 479,094 millones de pesos para el Anexo 13, esto representa un incremento del 9.5% respecto a 2024, es decir, lo equivalente a 41 mil 624 millones de pesos adicionales, sin embargo, este aumento no necesariamente significa una mejora para las desigualdades, de acuerdo con Fundar.

¿Una política fiscal sin perspectiva de género y ética feminista?

El aumento del 9.5% no se distribuye necesariamente en beneficio de las mujeres; este incremento se destinará a nuevos programas como la Beca Universal de Educación Básica Rita Cetina, la Pensión Mujeres Bienestar y Vivienda Social. Esto representa un 20% del total de presupuesto.

Además, el 94% de los recursos de anexo se destinarán a la Secretaría del Bienestar (en un 59% del total); la Secretaría de Educación Pública (27%); la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (4.5%), y la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (3.5%). Esto representa el 77% del total del presupuesto. 

Los recursos destinados a la Pensión Universal y becas educativas carecen de perspectiva de género de género y abarcan mayoritariamente el presupuesto para combatir la violencia que atraviesa a las mujeres de manera institucional y estructural, según el análisis elaborado por Fundar. 

Aquí te compartimos los puntos clave del análisis del PPEF que hizo Fundar:

Desbalance en prioridades presupuestales: 

El PPEF destina el 95.2% del presupuesto para promover la igualdad entre hombres y mujeres. Sólo se concentra en 4.7% para combatir la violencia de género y el 0.1% para erradicar la discriminación.

Los programas de salud sexual y reproductiva tendrán un presupuesto menor al 14% respecto al 2019; el Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva con 13% menos que durante el 2019. Esto implica retrocesos en los avances de la promoción de los derechos sexuales y reproductivos de mujeres e infancia.

También se da una acción presupuestaria mínima al Sistema Integrado de Estadísticas de Violencia Contra las Mujeres, con 240,116 pesos mexicanos. Esto pone en riesgo y subestima el valor del análisis de datos en casos de violencia de género.

Reducción en programas para combatir la violencia de género: 

El PPEF no hizo ajustes respecto a la inflación ni priorizó las necesidades propias del mismo, por lo que el Programa de Apoyo para Refugios Especializados para Mujeres Víctimas de Violencia de Género, sus Hijas e Hijos y el Programa de Apoyo a las Instancias de Mujeres en las Entidades Federativas (PAIMEF) sufrirá de recortes que ponen en riesgo y vulneran la seguridad de las mujeres.

Secretaría de Mujeres con presupuesto insuficiente: 

El actual Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) y la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia en Contra de las Mujeres (Conavim) recibirán en 2025, 7% menos de presupuesto en comparación con el año pasado, lo que pone en duda la capacidad de la nueva Secretaría en cuanto a instrumentalización de la política de igualdad sustantiva y erradicación de la violencia de género.

Los recursos del Inmujeres y la Conavim eventualmente se trasladarán a la nueva Secretaría: aunque la constitución de una Secretaría de Mujeres representa simbólicamente un compromiso en beneficio de la eliminación de desigualdades estructurales, si las políticas fiscales no contemplan las necesidades institucionales queda en duda la universalización de los derechos de las mujeres. 

Sistema Nacional de Cuidados sin respaldo presupuestal: 

El PPEF no contempla asignaciones para establecer un Sistema Nacional de Cuidados, a pesar de ser una propuesta presidencial, lo que perpetúa el trabajo de cuidados y domésticos no pagados que recaen en las mujeres.