Un día antes de terminar el 2024, Angelina Jolie y Brad Pitt firmaron su divorcio después de ocho años de disputa. La expareja había sostenido una relación de más de 12 años en la que Angelina reportó haber sufrido maltrato físico y verbal por parte de Pitt. En años posteriores comenzó una negociación legal por la custodia de sus seis hijos y por los bienes que adquirieron juntos durante su matrimonio.
Después de un tiempo se dio a conocer que Brad Pitt también abusaba física y emocionalmente de sus hijos, especialmente de quienes adoptó al inicio de su relación con Angelina. Este círculo de violencia se replica en muchos hogares y se conoce como violencia doméstica.
La violencia doméstica en el ámbito familiar o violencia familiar se define como cualquier tipo de abuso o maltrato con fin de someter y ejercer control sobre la pareja. En este tipo de abuso, la violencia no es única ni específica, se compone de ataques físicos, verbales, psicológicos, sexuales y económicos, y sucede en cualquier estrato social, sin importar género, edad, etnia, orientación sexual y religión, según la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) define a la violencia doméstica o violencia familiar como “un acto de poder u omisión intencional, dirigido a dominar, someter, controlar o agredir física, verbal, psicoemocional o sexualmente a cualquier integrante de la familia, dentro o fuera del domicilio familiar, por quien tenga o haya tenido algún parentesco por afinidad, civil, matrimonio, concubinato o a partir de una relación de hecho y que tenga por efecto causar un daño”.
Según el organismo, la violencia familiar genera crisis, enfermedades, depresión, indefensión, discapacidad e incluso muerte y es que las personas que sufren violencia, suelen ver afectada su autoestima, desarrollo intelectual, creatividad y capacidad para relacionarse con los demás.
Violencia doméstica en México: un paso adelante y dos hacia atrás
En México, el 39.9% de las mujeres de más de 15 años de edad ha experimentado violencia en el ámbito de pareja, esta es la segunda categoría con mayor índice de violencia al que se enfrentan las mujeres, después de la violencia comunitaria, aquella que se produce en la colectividad y transgrede los derechos de las mujeres mediante la discriminación, marginación y/o exclusión con un 45.6% a lo largo de su vida, según datos de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) 2021 del Inegi.
El tipo de violencia más prevalente dentro de las relaciones de pareja es la psicológica, con 35.4% de incidencia, seguida por la violencia económica o patrimonial con 19.1%, la física de 16.8% y finalmente por la sexual, con un 6.9% a lo largo de la relación.
Los estados de la república con mayor prevalencia de violencia durante la última relación de pareja son Guerrero, Hidalgo y Yucatán con 47.6%, 45.6% y 45.1% respectivamente, mientras que Baja California es el estado con menor prevalencia con 27.9%, lo que demuestra que los estados del sur del país, que atraviesan una realidad diferente al norte son más propensos concentran índices más altos de violencia en contra de las mujeres.
Entre la encuesta del ENDIREH del 2016 y del 2021, la prevalencia de la violencia en contra de las mujeres en las relaciones de pareja se redujo en cuatro puntos, pasando de un 43.9 a 39.9.
Del total de mujeres que han sufrido violencia doméstica en nuestro país, sólo el 4.8% solicitó apoyo o presentó una queja o denuncia ante las autoridades. Según datos de la Red Nacional de Refugios (RNR) el 38% de las mujeres que ingresó a los refugios no recibió resultados del Estado tras haber solicitado ayuda.
Para 2025, el recorte de más de 21 millones de pesos en el Presupuesto de Egresos de la Federación destinados a los Refugios Especializados para Mujeres Víctimas de Violencia de Género representa un retroceso en materia de derechos de las mujeres. Mientras los porcentajes reducen, el gasto destinado a víctimas y sobrevivientes de violencia lo hacen de igual manera.
Y es que la reducción presupuestal para este 2025 también afectó al Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), que tuvo una reducción del 5.4%, situación que pone en duda la creación sólida y comprometida de un Sistema Nacional de Cuidados propuesto por la presidenta Claudia Sheinbaum durante su campaña presidencial el año pasado.
Cómo identificar la violencia doméstica
Identificar y reconocer la violencia doméstica es complicado, muchas veces las prácticas de poder están disfrazadas de “amor y protección”, pero detrás realmente se encuentra maltrato físico, emocional, económico y sexual.
El miedo, la manipulación, humillación, amenazas, son síntomas de la violencia doméstica. Los siguientes son algunos tipos de violencia dentro de las relaciones de pareja:
Abuso o maltrato físico: golpes, bofetadas, pellizcos, patadas, quemaduras o cualquier tipo de actos que ocasionen daño físico mediante la fuerza. Negar acceso a servicios médicos y de cuidado, y cohesionar a la pareja a sostener relaciones sexuales también es maltrato.
Abuso o maltrato psicológico: infundir miedo mediante manipulación, humillación, intimidación, aislamiento, amenazas a la pareja e hijos y maltrato animal.
Abuso o maltrato emocional: Agresión verbal, demeritar y menospreciar a la pareja, actuar de manera posesiva y controlar la vida social dentro y fuera del mundo digital de la pareja.
Abuso sexual: mantener relaciones sexuales sin consentimiento a través de la manipulación y coerción, lastimar con un arma a la pareja durante el encuentro sexual, involucrar a un tercero en el acto sexual, usar agresiones verbales e insultos de índole sexual en contra de la pareja.
Abuso económico: restringir el acceso a cuentas financieras, no permitir que la pareja trabaje con motivo de controlar la autonomía financiera, utilizar y manejar cuentas sin permiso.
Acoso u hostigamiento criminal: acosar a la pareja de manera insistente en lugares como la escuela y el trabajo. Vigilar, contactar y llamar a la persona constantemente para infringir miedo, ocasionando desequilibrio en la vida de la persona.
¿Qué puedo hacer si soy víctima de violencia doméstica?
Si estás sufriendo violencia doméstica o familiar, necesitas apoyo o asesoramiento puedes comunicarte con la Red Nacional de Refugios al 800 822 4460, cuentan con atención gratuita los 365 días del año las 24 horas.
También puedes comunicarte al 911 donde puedes reportar emergencias relacionadas a distintos tipos de violencia, como lo son: abuso sexual, acoso u hostigamiento sexual, violación, violencia de pareja y violencia familiar.
