Desde hace más de una década se han reportado casos de explotación sexual infantil en Inglaterra por parte de los llamados grooming gangs, bandas de hombres, en su mayoría pakistaníes, que habrían abusado de más de 100 mil menores de edad.

El caso se volvió viral después de que Elon Musk, ahora codirector del próximo Departamento de Eficiencia Gubernamental de los Estados Unidos, acusara en X (antes Twitter), al gobierno del Reino Unido por encubrir los casos de violaciones y tortura a niñas en dicho país.

Esto sucedió después de que el canal de noticias británico GB News diera a conocer una carta en la que Jess Phillips, Subsecretaria de Estado Parlamentaria para la Protección y la Violencia en contra de las Mujeres y las Niñas, afirmara que el problema de las violaciones masivas a niñas debía tratarse localmente sin intervención del Estado.

Imagen

Esto  a pesar de que las mismas autoridades de Oldham y las sobrevivientes de los abusos pidieran una investigación más profunda después de que en 2022 se hiciera pública una investigación sobre los abusos en la ciudad al noreste de Inglaterra, que abarcaba el periodo entre 2011 y 2014, según el informe del Centro de Gobernanza y Escrutinio, comisionado por The Greater Manchester Combined Authority

Sobrevivientes e integrantes de la sociedad civil han señalado que el gobierno británico intenta encubrir las violaciones masivas por temor a incurrir a narrativas racistas y xenófobas. 

Antecedentes, una realidad en todo el país

El periodista  Charlie Peters reportó que los ataques de hombres de origen pakistaní a niñas, en su mayoría blancas, han ocurrido en más de cincuenta puntos del país.

El problema data desde la década de 1990, cuando en Rotherham, ciudad del sur de Yorkshire, comenzaron a circular informes de violaciones a menores de edad por parte de taxistas. Detrás de esto se escondía lo que sería el escándalo de abuso sexual a menores más grande de Inglaterra.

Más de mil 400 niñas fueron abusadas sexualmente entre 1997 y 2013, reveló la investigación independiente de la profesora Alexis Jay, quien también fue asesora del gobierno escocés en temas sociales. Después de la tragedia, Jay hizo recomendaciones sobre la explotación infantil al gobierno británico que hasta la fecha no terminan por implementarse.

Imagen

Entre ellas está crear estrategias para proteger a los menores de edad que han sido explotados sexualmente, las autoridades y la policía deberán atender las necesidades de los menores, promover programas de atención accesibles, entre otros.

En Telford, al este de Inglaterra, se han registrado al menos mil niñas menores de edad que han sido abusadas sexualmente entre 1980 y 2009. En otras ciudades como Oxford y Rochdale también se han reportado casos similares.

Factores clave en el caso:

  • Fallas del Estado y de la policía: para 2021 el 63% de los casos encubría el origen étnico de los atacantes y no detallaba ni precisaba piezas vitales para la investigación.

  • Contextos vulnerables: muchas de las menores vivían en situaciones vulnerables, lo que las hacía más propensas a ser víctimas de las bandas de violaciones masivas. El Estado británico y la policía no atendieron las denuncias y las quejas en su momento, perpetuando las desigualdades a las que ya se enfrentaban.

  • Discursos xenófobos y racistas: para evitar hablar del origen de las personas que en gran parte cometen los abusos se optó por utilizar la palabra “asiáticos”, con motivo de no promover discursos discriminatorios en contra de la comunidad musulmana, sin embargo, la derecha y el Partido Conservador del Reino Unido ha promovido narrativas xenófobas.