México enfrenta una crisis histórica de derechos humanos y violencias contra las mujeres. En los primeros tres meses de 2024 más de 63 mil mujeres llamaron al 911 por violencia de pareja, 6.6% más que en 2023, de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP). 

Mientras que 138 mil 175 mujeres reportaron vía telefónica ser víctimas de violencia familiar. Asimismo, sólo en 2023, a nivel nacional se registraron 848 casos de mujeres víctimas de feminicidios, con un total de 4 mil 892 en el presente sexenio.

Pese a lo anterior, las autoridades del gobierno en turno y Claudia Sheinbaum, la candidata de Morena-PT- PVEM a la presidencia, insisten en asegurar que hay una baja en los feminicidios y en las violencias contra las mujeres, sin embargo, "la realidad de quienes acompañamos a las víctimas es otra", denuncia la Red Nacional de Refugios.

"En la Red Nacional de Refugios hemos registrado un incremento del 27% en los primeros 4 meses del 2024 en los ingresos a los Refugios integrantes, tan sólo en el mes de abril, aumentó 39% el número de mujeres e infancias atendidas en los Refugios en comparación al mismo mes de 2023", señalan en un comunicado.

Durante este periodo, diariamente se comunicaron cuatro mujeres para pedir apoyo a la RNR a causa de las violencias machistas. Seis de cada 10 mujeres informaron que sus hijas e hijos también vivieron violencias. El 73% de la población infantil sufrió violencia física, 89% psicológica, 77% económica y 48% patrimonial.

De un total de 3 mil 556 mujeres, niñas y niños que recibieron atención integral especializada y gratuita en el primer cuatrimestre del 2024 en los Refugios integrantes de la RNR; el 84% reportaron violencia física, 65% patrimonial, 93% psicológica, 74% económica, 56% sexual y 2% en situación de trata.

En el 62% de los casos, las mujeres ingresan con sus hijas e hijos a los Refugios, sin embargo, el 38% de las infancias no ingresan por violencia vicaría por parte del agresor.

De acuerdo con la última Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH), de las mujeres que denunciaron ante alguna autoridad haber sufrido violencia física o sexual, 28.1% fueron atacadas o agredidas con cuchillo, navaja o arma de fuego en el ámbito comunitario y el 12.3% en el ámbito familia, siendo el uso de armas una problemática nacional que aumenta el riesgo en el que viven las mujeres en México.

Los datos de la RNR reflejan esta situación, el 53% de los agresores de las mujeres residentes en Refugios tienen vínculos militares o políticos, y además usan armas de fuego, pese a la gravedad del tema, la violencia armada rara vez figura en la agenda del país, tampoco ha sido prioridad en las propuestas de las candidatas y el candidato en los debates presidenciales.

“No podía hacer nada, el siempre trae la pistola, me decía que si lo dejaba me mataría al igual que a mi hija, salíamos a la calle y el me abrazaba, pero era para que yo sintiera la pistola, hasta que un día llegaron a hacer un ajuste de cuentas empezaron a disparar y yo salí descalza corriendo con mi hija en brazos, no sentí nada, hasta que llegue a la tienda vi que sangraba después desperté en el hospital y ahora estoy a salvo aquí con mi hija, parece una pesadilla que no acabará hasta que lo agarren”.

No podía hacer nada, él siempre trae la pistola, me decía que si lo dejaba me mataría al igual que a mi hija, salíamos a la calle y el me abrazaba, pero era para que yo sintiera la pistola, hasta que un día llegaron a hacer un ajuste de cuentas empezaron a disparar y yo salí descalza corriendo con mi hija en brazos, no sentí nada, hasta que llegue a la tienda vi que sangraba después desperté en el hospital y ahora estoy a salvo aquí con mi hija, parece una pesadilla que no acabará hasta que lo agarren. (Lucía,31 años, mujer beneficiaria de la RNR.)

Las violencias contra las mujeres ejercidas por el gobierno

La falta de recursos y la inacción de las instituciones para cumplir con sus responsabilidades influyen negativamente y ponen en peligro la vida de las mujeres, el 44% de las usuarias de refugios para mujeres buscaron apoyo de otra instancia (Fiscalías, Inmujeres, SNDIF, Secretaría de Salud y otras dependencias de la APF) antes de llegar a la RNR, sin embargo, no les ofrecieron acompañamiento, atención y/o asesoría.

Durante el primer cuatrimestre de 2024, la RNR a través de sus 76 espacios de prevención, atención y protección, atendió de manera integral a 4 mil 868 mujeres, niñas y niños, pese a que el presupuesto federal empezó a llegar a cuentagotas después del quinto mes del año, lo que vulnera los derechos de las mujeres, niñas y niños sobrevivientes de violencias al verse limitados algunos servicios, una constante desde que el Programa de Apoyo para Refugios especializados para Mujeres Víctimas de Violencia de Género, sus hijas e hijos fue trasladado a la CONAVIM en 2022.

Esta situación también es una transgresión a los derechos de las colaboradoras que sin recibir sus honorarios, continúan acompañando profesional y éticamente a las mujeres e infancias, aspecto que se invisibiliza por parte de las autoridades responsables del Programa, naturalizándose la violencia económica e institucional ejercida, a la cual se suma la verticalidad y el absolutismo de la instancia federal responsable del programa, quien decide con criterios subjetivos qué personal continúa brindando los servicios, sin reconocer el tiempo que ha estado colaborando y la experiencia acumulada, lo cual sin duda es un atropello a los derechos humanos de las colaboradoras.

La criminalización y persecución a las Organizaciones de la Sociedad Civil es una recurrente en la actual administración, pese a que son parte importante de la democracia de un país, coadyuvando con los compromisos de los Estados y estando en la primera línea de actuación en la prevención, atención y erradicación de las violencias contra las mujeres, no han sido nombradas en los debates presidenciales ni incorporadas en las propuestas presentadas, también ha sido nulo el reconocimiento de la violencia institucional ejercida por las instancias gubernamentales contra ellas, no considerar a las organizaciones de la sociedad civil en una política o programa anuncia un gobierno antidemocrático.

Los Refugios son espacios seguros para las mujeres y las infancias, además de ser un mecanismo eficaz para prevenir feminicidios y acompañar a las mujeres sobrevivientes de violencias machistas.

Sin embargo, han sido considerados desde el desconocimiento por dos de las tres personas candidatas a la presidencia, Xóchitl Gálvez, candidata de PAN-PRI-PRD, mencionó que los fortalecería sin especificar en qué sentido y cómo lo hará, mientras que Claudia Sheinbaum considera que el agresor debe salir de casa y la mujer quedarse en el domicilio con sus hijas e hijos para que no vayan a un Refugio, desconociendo que, cuando una mujer rompe la relación con el agresor, el nivel de peligrosidad aumenta al igual que cuando denuncia, resultando en muchos casos en ataques con ácido, violencia vicaria o feminicidios porque en México la justicia es todo menos justa, ni expedita que, en complicidad con la impunidad y la corrupción perpetúan las violencias machistas contra las mujeres.

“Los Refugios son importantes porque en ellos nos encontramos a nosotras mismas, no es un tema de dinero, yo pude irme a un hotel o rentar una casa, pero él me iba a encontrar, lo hizo todas las veces que me salí y denuncie, no le hicieron nada, le dijeron que no se acercara a mí y lo hizo, lo última vez aventó gasolina por la ventana, afortunadamente no estaba en casa, pero si hubiera estado hoy no te estaría contando esto, desde ahí dije no puedo quedarme en casa cuando las autoridades no son capaces de cumplir su promesa de que me protegerían, creo que las autoridades están rebasadas, en el refugio me siento tranquila y realmente protegida, no solo físicamente sino emocionalmente, pensé que ya se había acabado mi vida y ahora quiero salir y comerme al mundo”.

Los Refugios son importantes porque en ellos nos encontramos a nosotras mismas, no es un tema de dinero, yo pude irme a un hotel o rentar una casa, pero él me iba a encontrar, lo hizo todas las veces que me salí y denuncie, no le hicieron nada, le dijeron que no se acercara a mí y lo hizo, lo última vez aventó gasolina por la ventana, afortunadamente no estaba en casa, pero si hubiera estado hoy no te estaría contando esto, desde ahí dije no puedo quedarme en casa cuando las autoridades no son capaces de cumplir su promesa de que me protegerían, creo que las autoridades están rebasadas, en el refugio me siento tranquila y realmente protegida, no solo físicamente sino emocionalmente, pensé que ya se había acabado mi vida y ahora quiero salir y comerme al mundo (Perla, 35 años, mujer beneficiaria de la RNR.)

Sin recursos, son sólo discursos

En México el 70% de las mujeres han vivido a lo largo de su vida algún evento de violencia, a pesar de ello, la inversión que se realiza para prevenir, atender y eliminar las violencias es mínima en nuestro país.

Siendo indispensable que quienes aspiran a la presidencia y a puestos legislativos reconozcan que para hablar de igualdad y no violencia es indispensable designar recursos garantes y progresivos a estos temas, en 2024 el 89% del presupuesto del Anexo 13, va dirigido a programas que directamente no lograrán disminuir la desigualdad de género y mucho menos reducir la violencia contra las mujeres.

Mientras que programas claves e importantes como el de Apoyo a Refugios especializados y PAIMEF tienen el mismo monto que el destinado en 2023, ignorando que las necesidades incrementan y que la violencia no se estanca. Lo mismo sucede con las dependencias encargadas de ejecutar la política de igualdad de género y combate de las violencias contra las mujeres que tienen menor recurso asignado en 2024 que en 2019 (a excepción de Convavim), pese a que las violencias y feminicidios siguen incrementando cada año.

La RNR llama a quien asuma la presidencia de México y a quienes ocupen cargos legislativos a:

1 Vigilar que las instancias responsables de ejecutar los Programas del Presupuesto de Egresos de la Federación lo hagan sin arbitrariedades, priorizando los derechos humanos y eliminando procesos burocráticos;

2 Trabajar conjuntamente con todos los sectores de la sociedad, incluidas las Organizaciones de la Sociedad Civil, eliminando la persecución contra ellas, las feministas y toda persona o instancia que exprese su derecho a disentir y, 

3 Que sus discursos se vean materializados a través del etiquetamiento y designación de presupuestos  garantes a favor de los derechos humanos de las mujeres de todas las edades y diversidades.

Enfatizamos nuestra disposición de coadyuvar acciones, nuestro compromiso en la protección de los derechos humanos y la creación de acciones ¡Por la vida, la dignidad y libertad de TODAS las mujeres y niñas!