En un acto de memoria y como un acto de resistencia de la comunidad LGBTIQ+, los restos de Paola Buenrostro, una trabajadora sexual transgénero que fue asesinada el 30 de septiembre de 2016, fueron trasladados este 27 de febrero al Mausoleo Tiresias, el primero en México y el mundo que busca reconocer y dignificar la vida de las mujeres trans.
Han pasado siete años desde su transfeminicidio y al día de hoy, continúa la búsqueda del responsable identificado como Arturo Felipe Delgadillo Olvera, quien está prófugo desde ese año, cuando las mismas autoridades de la Ciudad de México lo liberaron por “falta de elementos concluyentes”.
El caso de Paola Buenrostro marcó un antes y un después en la procuración de justicia contra este delito pues, fue el primer asesinato en México en ser reconocido e investigado como transfeminicidio.
Paola Buenrostro, era amiga y hermana elegida de la activista Kenya Cuevas, quien fundó la Casa de las Muñecas Tiresias, una asociación civil que nació en 2018 a raíz del transfeminicidio de Paola. Desde entonces, Kenya ha emprendido una serie de acciones para dignificar la vida de las personas de la comunidad de la diversidad sexual y genérica, así como para lograr justicia en el caso de Paola.
Paola Buenrostro, te nombramos y recordamos
Paola Buenrostro fue una mujer transgénero de 25 años, originaria de Campeche que residia en la Ciudad de México. En la capital se dedicaba al trabajo sexual, fue durante su jornada de trabajo en la que un hombre le arrebató la vida. La madrugada del 30 de septiembre de 2016 Paola abordó el automóvil de un hombre a la altura de Puente de Alvarado e Insurgentes, en la alcaldía Cuauhtémoc. De acuerdo con testimonios, cuando el sujeto se dio cuenta de que era una mujer trans, le disparó con un arma de fuego, hiriéndola a muerte.
Sus compañeras presenciaron el momento y lo capturaron en video, en él gritaban “¡todavía está viva!”, lamentablemente, Paola murió minutos después del ataque a causa del disparo que atravesó su cuerpo, cerca del corazón. Organizadas, las trabajadoras que se encontraban en el lugar, resguardaron al homicida, facilitando a los policías su captura. El sujeto fue llevado preso ese mismo día, sin embargo, el juez Gilberto Cervantes Hernández lo dejó en libertad, argumentando que había “falta de elementos concluyentes”.
Desde entonces, su amiga, la activista Kenya Cuevas Fuentes, ha buscado justicia en su nombre, un camino que empezó a trazarse desde aquel acto histórico el 4 de octubre de 2016 en el que Kenya y sus compañeras y amigas bloquearon Periférico Sur acompañadas del ataúd donde se encontraba el cuerpo de Paola Buenrostro para exigir que el caso no quedase impune.
Primer caso investigado como transfeminicidio
En junio de 2019 La Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México emitió una recomendación a razón de la falta de debida diligencia y aplicación de un enfoque con perspectiva de género en la investigación del caso. El 29 de septiembre de 2019, tres años después del homicidio, la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México reconoció públicamente los actos de agravio cometidos.
Ernestina Godoy, entonces Fiscal General de Justicia de Ciudad de México, declaró: "Ofrezco una disculpa pública a la memoria de Paola Buenrostro y a su familia, así como a Kenya Citlali Cuevas Fuentes, por las afectaciones ocasionadas por la violación a sus derechos humanos de falta de diligencia y de la aplicación de la perspectiva de género y de enfoque diferenciado en la investigación del transfeminicidio". Así, el caso del homicidio de Paola Buenrostro, el primero en México en ser reconocido e investigado como transfeminicidio.
Desde entonces, activistas y personas de la comunidad de la diversidad sexual y genérica se encuentran impulsando la Ley Paola Buenrostro, “la cual busca tipificar el transfeminicidio cuando involucre a mujeres trans o que se encuentran en transición, también contempla el reconocimiento de familias elegidas, ya que en muchas ocasiones, las mujeres trans no cuentan con su familia nuclear como red de apoyo”, comparte Kenya Cuevas en entrevista con La Cadera de Eva.
Traslado de los restos de Paola Buenrostro
El 14 de septiembre de 2023 se inauguró en el Panteón Civil de San Lorenzo Tezonco de la alcaldía Iztapalapa el Mausoleo Tiresias en homenaje a Paola Buenrostro y como un lugar de descanso y remembranza digno de las personas víctimas de transfeminicidios. Este 27 de febrero, el espacio recibió los restos de Paola y de Catherine Danielle Márquez, las primeras en ingresar al recinto.
“Le solicité al juez una exhumación prematura con cadena de custodia para poder ingresar los restos de Paola Buenrostro”, narra la activista trans Kenya Cuevas, principal defensora de su memoria. Paola fue trasladada en compañía de los restos de Catherine Danielle Márquez, mujer trans, quien falleció en 2020 y también fue defensora de los derechos de su comunidad y cofundó la Casa Hogar “Paola Buenrostro”.
Más tarde, en 2022, la Casa de las Muñecas Tiresias, inauguró un segundo refugio en honor a la activista en Cuernavaca, Morelos: la Casa Hogar “Catherine Danielle Márquez”. “Existieron otras personas que acompañé en su momento, sus cuerpos están separados. Este es el principio de los traslados que vamos a hacer al Mausoleo Tiresias”, cuenta Kenya Cuevas.
En busca del homicida
“Seguimos en la búsqueda del asesino, se realizaron muchas diligencias para poder buscar indicios, sin embargo la Fiscalía no tuvo éxito”, cuenta la activista Kenya Cuevas. Actualmente la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México sigue en búsqueda del homicida de Paola Buenrostro, un recurso que también promovió Kenya, y se ofrece una recompensa por medio millón de pesos.