Eunice, una mujer con discapacidad psicosocial recuerda con dolor la reacción de sus
familiares cuando se enteraron de su embarazo. "Me dijeron que cómo me había atrevido a
embarazarme, que yo no iba a poder ser mamá", relata. Tenía 29 años en ese entonces. Su
familia la criticó y la juzgó, argumentando que “su condición” la hacía incapaz de cuidar a un
hijo.
Pero Eunice se negó a renunciar a su derecho a ser madre. "Yo creo que nosotras las
mujeres con discapacidad, tenemos derecho a formar una familia, a ser felices, a tener una
pareja, a disfrutar la vida como cualquier otra mujer", afirma en entrevista Eunice quien
ahora tiene 44 años.
Sin embargo, la discriminación no solo provino de su familia. La psiquiatra que la atendía en
el Hospital General Dr. Dario Fernandez Fierro del Instituto de Seguridad y Servicios
Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) también sugirió que abortara,
argumentando que no estaba preparada para ser madre.
"Me mandaron hacer unos estudios, pero yo pensaba que eran los estudios de rutina... y
cuando estaban haciéndome un ultrasonido, me comentó la doctora: '¿Tú estás de acuerdo
con abortar?'", relata Eunice, aún conmocionada.
"Es curioso cómo la sociedad puede cambiar su discurso sobre el aborto cuando se trata de
mujeres con discapacidad. De repente, es visto como algo positivo por algunas personas de
la sociedad que comúnmente dirían no al aborto", señala Lisbeth Brizuela, directora para
México de Disability Rights International (DRI)
El pasado 17 de octubre la Suprema Corte de Justicia de la Nación otorgó un amparo que
permite a mujeres con discapacidad en Sinaloa decidir libremente sobre continuar o no un
embarazo, sin necesidad de autorización médica. Esto elimina una restricción que existía
pese a la despenalización del aborto en el estado en 2022, garantizando así su autonomía y
libertad de elección.
Además, en el Hospital General Dr. Dario Fernandez Fierro, donde Eunice acudió para su
atención prenatal, le negaron el acceso al hospital para atender su parto debido a su
discapacidad.
"Me dijeron que no podía tener a mi hija en ese hospital por tener discapacidad", recuerda.
La institución le exigió pagar 13 mil pesos para atender el parto, a pesar de ser
derechohabiente.
De manera explícita el ISSSTE no niega la atención del parto de mujeres con discapacidad.
Sin embargo, al ser cuestionada vía solicitud de transparencia sobre el número de mujeres
con discapacidad a las que brindó atención gineco obstétrica durante el embarazo y el parto
desde el año 2012 a la fecha, la institución respondió que no tiene un censo específico
sobre el tema.
Esta falta de registro impide conocer la cantidad de mujeres con discapacidad que han
accedido a servicios de atención ginecológica, obstétrica y de planificación familiar. La
información general sobre estos rubros se encuentra en el Resumen de Servicio Médico y
Partos y Muertes Fetales contenidas en los Anuarios Estadísticos del ISSSTE.
A pesar de estos obstáculos, Eunice luchó por tener a su hija. "Yo quería tener a mi bebé,
yo quería verla nacer, cuidarla", afirma. Sin embargo, la sociedad sigue cuestionando su
capacidad para cuidar a su hija, quien nació con discapacidad intelectual y psicosocial. "Me
comentan que para qué la traje a sufrir", dice, con la voz entrecortada.
Después de haber enfrentado discriminación y la vulneración de su propio derecho a decidir
en el pasado, Eunice no quiere que su hija pase por lo mismo. Cuando su familia y la
psiquiatra del ISSSTE, que hace más de una década le sugirieron que abortara, le dijo que
a los 14 años debía operar (esterilizarla) a su hija para evitar que tuviera bebés, su
respuesta fue contundente: "Es su decisión, es su cuerpo".
“Yo no puedo invadir su privacidad, su cuerpo y sus deseos. Si ella quiere formar una
familia, quiere tener bebés, yo la voy a apoyar en todo", dijo Eunice.
Eunice fomenta una relación de confianza y respeto con su hija, animándola a expresar sus
sentimientos y enseñándole sobre sus derechos y opciones. Además, ha creado una red de
apoyo sólida, que incluye amigos y profesionales que la conocen y la quieren.
“Le he dicho que cuide mucho su cuerpo, que su cuerpo es muy importante, que no se
avergüence de él (...) y también le enseño a que se bañe, cambie de ropa. Le hablé sobre la
menstruación, sobre todo sus cambios, todo lo que no me enseñaron a mí estoy
enseñándole para que pueda tener más seguridad y también evitar abusos”, cuenta Eunice.
La sexualidad de las personas con discapacidad sigue siendo un tema tabú, rodeado de estereotipos y discriminación. Sobre todo se considera comúnmente que las mujeres con
discapacidad son asexuales, dependientes e incapaces de tomar decisiones sobre su
propia sexualidad y reproducción, según explica Lisbeth Brizuela.
Según Camila Riva Palacio, investigadora jurídica de GIRE, estos prejuicios basados en el
género y la discapacidad perpetúan la discriminación estructural contra las mujeres con
discapacidad, especialmente en materia de derechos sexuales y reproductivos.
El capacitismo es la discriminación y opresión hacia personas con discapacidad,
considerándolas inferiores o menos capaces. Se manifiesta en estereotipos, lenguaje
despectivo, falta de accesibilidad y exclusión social, esto puede ser explícito o implícito, de
acuerdo con la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con
Discapacidad.
En México, la visión capacitista en las leyes impacta negativamente en los derechos de las
personas con discapacidad, especialmente en su autonomía reproductiva. Un ejemplo es el
caso de Jessica, una menor de edad con parálisis cerebral infantil que sufrió violencia
sexual y quedó embarazada, este caso fue acompañado por el GIRE.
Debido a una restricción en el Código Penal de Chiapas, el hospital le negó el aborto
después de 90 días de embarazo, obligando a su familia a buscar opciones por sus propios
medios.
"La ley no consideró la situación particular de Jessica, su discapacidad y su vulnerabilidad.
Este plazo era inconstitucional porque no tomaba en cuenta condiciones como la igualdad,
el derecho a vivir una vida libre de violencia y el derecho a la salud", afirma Camila Riva
Palacio.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) intervino en el caso y estableció que no
debe haber límite de plazo para el aborto en casos de violencia sexual, especialmente
considerando la vulnerabilidad de niñas, adolescentes, mujeres y personas con
discapacidad.
Camila destaca que es fundamental considerar las intersecciones de edad, discapacidad,
situación socioeconómica y otros factores en la protección de los derechos reproductivos y
la autonomía. Esto implica revisar y reformar leyes y políticas para garantizar la igualdad, el
derecho a vivir una vida libre de violencia y el derecho a la salud.
Yereli Rolander, directora del Centro Interdisciplinario de Derechos, Infancia y Parentalidad
(CIDIP) enfatiza la importancia de ampliar el concepto de violencia obstétrica a violencia
gineco-obstétrica, pues señala que los servicios de salud perpetúan estereotipos y violencia
sistemática contra las mujeres con discapacidad que les impiden ejercer sus derechos
reproductivos y sexuales.
Para Hilda, una mujer con discapacidad visual de 52 años, ir a un chequeo ginecológico era
una pesadilla, no sólo por la falta de accesibilidad en las instituciones de salud, sino también
por los cuestionamientos y prejuicios del personal médico. “¿Por qué quieres saber y para
qué?” y “¿qué le pasó en los ojos?”, eran dos preguntas que no podían faltar en cada
consulta.
"Me costó mucho tiempo y esfuerzo obtener una atención adecuada. Algo tan simple como
que te expliquen qué te van a hacer, qué necesitas y cómo te van a tratar, es más que
suficiente. Pero a veces no te quieren atender, me decían: 'No sé cómo le voy a explicar'.
'¿Cómo no? ¿Qué no eres médico?' Es más violento no querer saber que no saber", explica
Hilda.
La lucha por los derechos reproductivos y sexuales de las mujeres con discapacidad es una batalla contra la indiferencia. "Necesitamos servicios de salud accesibles, comunicativos y respetuosos", concluye Yereli Rolander.
Foto: Hilda, mujer con discapacidad visual cuenta su experiencia al recibir atención ginecológica.
Este directorio, es un esfuerzo del Centro Interdisciplinario de Derechos Infancia y Parentalidad A.C. (CIDIP) que incluye a profesionales de la salud, parteras, doulas y asesoras de lactancia a las que podrán contactar mujeres con discapacidad en etapa de embarazo, parto, puerperio y lactancia, que requieran apoyo, acompañamiento, asesoría o consultoría.
A continuación, explicamos cuál es el trabajo de las especialistas que integran el presente directorio:
Ginecóloga Obstetra: es la especialista médica que atiende a las mujeres a lo largo de su vida, incluyendo el embarazo y el parto, además brindan diagnósticos y tratamientos para enfermedades de los órganos reproductores femeninos.
Especialistas:
Laura Álvarez Romo: acompañamiento durante el parto, lactancia y pediatría.
Contacto: 53615089 5586168709 lau.romoa@gmail.com
Partera: es la persona que proporciona asistencia a mujeres durante el embarazo, el parto, puerperio y recién nacido, regulación de la fecundidad (métodos anticonceptivos) y atención ginecológica a mujeres en general.
Especialistas:
Priscila Méndez Ortíz: partería
Contacto: 5582036382 madrecreadora@hotmail.com
Enfermera gineco-obstetra: especialista dedicada a brindar cuidados a la mujer en todas las etapas de la vida, abarcando aspectos reproductivos durante el embarazo, parto y puerperio y otros aspectos de la sexualidad como anticonceptivos y menopausia.
Especialistas:
Hilda María Vivanco Robles: consultas de vigilancia prenatal, asesorías sobre lactancia materna, cuidados del recién nacido, cuidados en el puerperio y orientación sobre métodos anticonceptivos.
Contacto: 5519636672 hildavivanco@gmail.com
María de Jesús Preciado López: enfermera, acompañante para el parto, especializada en parto en agua.
Contacto: 5518875372 mary090905@hotmail.com
Doulas: profesional capacitado que brinda apoyo físico, emocional e informativo continuo a una persona gestante antes, durante y poco después del parto, para ayudarla a lograr la experiencia más saludable y satisfactoria posible.
Especialistas:
Alma Alicia Urrutia Tinoco: acompañamiento de parto y educación perinatal. ( Actualmente laborando en Hospital Homeopático).
Contacto: 5584839178 almaurrutiatino@gmail.com
Areli Valdovinos Hernández: acompañamiento en salud sexual y reproductiva y asesora de lactancia.
Brenda Annie Enríquez M: doula, de parto en agua, educadora blissborn (hipnosis)para el parto, acompañamiento al bien morir, terapeuta transpersonal, preparación al parto con yoga y meditación, así acompañamiento en duelo perinatal.
Raquel Lozano Hernandez: doula (posparto y pérdidas). Asesora de lactancia (relactacion).
Contacto: 5523382390 masitaraki@gmail.com
Silvia Scarlet Velasco Rocha: acompañamiento y atención al embarazo, parto y postparto.
Contacto: 5530753032 rams6@gmail.com
Educadora perinatal o prenatal: ofrece clases informativas y educativas para las futuras madres y padres, incluye información sobre relajación, medidas de confort, técnicas de respiración, opciones de nacimiento.
Especialistas:
Diana Alicia Vargas Correa: acompañamiento y asesoría en embarazo, parto, y lactancia.
Esther Guerrero Jaramillo: enfermera, urgencias obstétricas, acompañamiento a mujeres con enfermedades manifestadas dentro del período perinatal y salud materna.
Contacto: 5520245842 teiguerrero70@gmail.com
Norma Angelica Pérez Alba: acompañamiento perinatal, parto y postparto, asesoría en lactancia, y consultora de porteo.
Asesora de lactancia: son mujeres generalmente madres, con formación en lactancia humana, escucha y acompañamiento que proporcionan información y acompañamiento a personas gestantes en materia de lactancia humana desde el embarazo hasta el destete de sus hijas e hijos.
Especialistas:
Alejandra Hernando Becerra: lactancia materna (frenillo, retrognatia, problemas de succión, alergias alimentarias, lactancia y trabajo).
Investigación y visualización de datos Sandra Rojas
Coordinación editorial Jennifer Ávila
Ilustraciones Alejandro Sol Iurhi Peña Pilar Solano
Diseño y desarrollo web Pilar Solano Alina Pérez
Coordinación editorial La Cadera de Eva Scarlett Lindero Cortés
Dirección La Cadera de Eva Graciela Rock
Este trabajo periodístico se realizó y publicó originalmente en la tercera
edición de #CambiaLaHistoria, proyecto colaborativo de DW Akademie y Alharaca, promovido por el Ministerio Federal de Relaciones Exteriores.