La conversación alrededor de la maternidad nos ha llevado a resignificarla y valorarla desde otras perspectivas que, tiempo atrás, no se contemplaban. Se han modificado los momentos, las edades y las condiciones para ser madres o padres, además, lo más importante, la obligatoriedad de ejercerla como proyecto de vida

También se han ampliado la gama de opciones para considerar esta decisión. Una de ellas es la criopreservación, mejor conocida como congelación de óvulos, una alternativa que toman sobre todo quienes se encuentran en edad reproductiva y aún no se sienten completamente preparadas para gestar, o por alguna cuestión médica.

En entrevista para La Cadera de Eva, la ginecóloga obstetra y bióloga de la reproducción, Martha E. Espinosa Esparza, nos compartió algunos datos que pueden ayudarte a resolver algunas dudas si estás valorando someterte a este procedimiento. 

Aunque, te recordamos que cualquier asunto de salud, requiere de revisiones personalizadas de la mano de personal médico especializado, ya que cada cuerpo y sistema es diferente. 

Principales razones por las cuales se considera la congelación de óvulos

La especialista en el tema, Martha Espinosa, indica que las razones por las que las mujeres y personas con posibilidad de gestar optan por congelar sus óvulos van desde la disponibilidad de tiempo para la crianza, hasta temas de salud, como enfermedades y padecimientos. Así, las dos motivaciones más recurrentes son: 

Postergación del embarazo por economía y tiempo:

Y es que la mayoría de las pacientes prefieren retrasar el embarazo hasta después de los 35 años, principalmente por trabajo y porque económicamente no se sienten preparadas para tener un hijo, detalla Martha Espinosa. 

Es importante que la congelación de óvulos se lleve a cabo entre los 25 y 30 años para garantizar la buena calidad de los óvulos. “Después de los 35 años es probable que los óvulos no sean de buena calidad y existe el riesgo de síndrome de down y enfermedades en el embrión”, indica la especialista. 

Enfermedades y padecimientos:

El diagnóstico de cáncer y tratamientos oncológicos pueden afectar la fertilidad, por lo que, muchas personas, antes de someterse a ellos, consideran la congelación de óvulos. Padecer endometriosis es otra de las principales causas que llevan a las mujeres y personas con capacidad de gestar a someterse a este procedimiento. 

“La endometriosis es una enfermedad que afecta la calidad de los óvulos y, conforme pasa el tiempo, afecta el tejido ovárico, entonces, es preferible que la paciente antes de someterse a una cirugía o tratamiento, congele sus óvulos”, de acuerdo con Martha Espinosa. 

¿Cómo es el procedimiento de congelación de óvulos? 

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1. Evaluación inicial: Antes de comenzar el proceso, se realiza una evaluación médica completa que incluye pruebas hormonales, ecografías y análisis genéticos para determinar la calidad y cantidad de los óvulos disponibles y garantizar que la paciente esté en condiciones óptimas para el procedimiento.

2. Estimulación ovárica: Una vez que se determina que la paciente es candidata para la criopreservación de óvulos, se inicia un tratamiento hormonal para estimular los ovarios y promover la maduración de múltiples óvulos en un solo ciclo menstrual.

Durante este período, la paciente debe someterse a controles ecográficos, es decir exámenes médicos que utilizan ultrasonido para visualizar y evaluar los órganos y estructuras internas del cuerpo, en este caso, los ovarios y los folículos ováricos durante el proceso de estimulación ovárica; así como análisis de sangre periódicos para monitorear el desarrollo de los folículos ováricos.

3. Extracción de óvulos: Una vez que los óvulos alcanzan la maduración adecuada, se administra una inyección de hormona hCG para inducir la maduración final de los óvulos. Aproximadamente 36 horas después de esta inyección, se realiza un procedimiento quirúrgico ambulatorio conocido como punción folicular, bajo sedación. A través de este procedimiento, se extraen los óvulos de los folículos ováricos utilizando una aguja guiada por ecografía.

4. Proceso de criopreservación: Una vez extraídos, los óvulos son evaluados y preparados para el proceso de congelación. Los óvulos se enfrían gradualmente hasta alcanzar una temperatura de -196°C para su almacenamiento.

5. Almacenamiento: Los óvulos criopreservados se almacenan en tanques de nitrógeno líquido hasta que la paciente decida utilizarlos en un futuro. La mayoría los conserva entre 5 y 7 años hasta decidir utilizarlos.

6. Descongelación y fertilización: Cuando la paciente decide utilizar los óvulos congelados, se procede a su descongelación en un laboratorio especializado. Una vez descongelados, los óvulos son fertilizados con espermatozoides mediante la técnica de microinyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI) o la fecundación in vitro convencional (FIV). Los embriones resultantes se cultivan en el laboratorio hasta que estén listos para ser transferidos al útero materno.

Bueno, pero, ¿qué riesgos existen? 

Existe dos factores que pueden poner en riesgo la salud de las pacientes: 

Hiperestimulación ovárica: Debe contemplarse que la paciente no padezca síndrome de ovario poliquístico, ya que son más propensas a presentar hiperestimulación ovárica, es decir, un crecimiento excesivo de los folículos ováricos el cual puede provocar diversos malestares como dolor abdominal, hinchazón y náuseas.

Hemorragias o infecciones: Aunque el riesgo es mínimo, es posible que la aguja utilizada para aspirar los óvulos cause hemorragias, infecciones, o daños a vasos sanguíneos, la vejiga o el intestino.

¿Qué pasa si no utilizo todos los óvulos? ¿se desechan o qué sucede? 

Martha Espinosa, bióloga de la reproducción, explica que los óvulos que no se usan pueden: 

Guardarse

Los óvulos pueden congelarse indefinidamente, no caducan ni pierden su calidad.

Desecharse

Las pacientes que ya no quieran hacer uso de sus óvulos pueden autorizar que sean desechados, la clínica no puede conservarlos ni transferirlos a otra persona sin su consentimiento. 

Donarse

En caso de que la paciente ya no quiera hacer uso de sus óvulos, puede donarlos a otra paciente.

La opción de donar óvulos añade una nueva dimensión al diálogo sobre la congelación de óvulos. En ocasiones, algunas mujeres ven en la venta de óvulos una solución económica. No obstante, es crucial abordar esta alternativa con precaución y examinar detenidamente todos sus aspectos, especialmente las posibles desigualdades que podrían surgir en este proceso.

De acuerdo con la experta consultada, el procedimiento de congelación de óvulos tiene un costo que varía entre 120 y 150 mil pesos. La Cadera de Eva pudo conversar con una donante de óvulos que reveló haber recibido 7 mil pesos por someterse a dicho tratamiento. Esto nos lleva a cuestionarnos: ¿cuál es el costo de adquirir óvulos donados? ¿Y quiénes son las mujeres que consideran estos tratamientos como una fuente de ingresos adicionales? Estos temas serán abordados en una próxima entrega.