A pesar de las críticas que ha enfrentado por su desempeño al frente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), Rosario Piedra Ibarra fue reelegida para un nuevo periodo que abarcará del 16 noviembre de 2024 al 15 de noviembre de 2029.
Aunque Piedra no figuraba entre los cinco aspirantes mejor evaluados para liderar la CNDH, fue incluida en la terna gracias al respaldo de senadores que la propusieron, según informó Javier Corral, presidente de la Comisión de Justicia del Senado.
Desde la semana pasada, cuando se integró la terna de candidatas para presidir la CNDH, integrantes de Morena mostraron su inconformidad por la inclusión de Rosario Piedra, ya que las tres personas con mejor calificación fueron Nashieli Ramírez, Tania Ramírez y Paulina Hernández, mientras que la peor calificada fue la propia Piedra.
En total, se emitieron 127 votos, de los cuales, 87 fueron a favor de Rosario Piedra Ibarra, por lo que alcanzó la mayoría calificada que se requiere para su designación; 36 votos fueron para Nashieli Ramírez Hernández y uno para Paulina Hernández Diz. Además, se emitieron tres votos nulos.
La polémica en torno a la reelección de Rosario Piedra se intensificó cuando ella misma reconoció hace unos días haber entregado una carta de recomendación falsificada como parte de su documentación ante el Senado.
En la reunión de morenistas previa a la sesión en el Senado, el coordinador de la bancada, Adán Augusto López insistió en que se apoyara a Piedra y ya en el salón en varias ocasiones presumió que contaban con 87 votos para que su opción fuera la ganadora, como documentó La Silla Rota.
Legisladores de oposición acusaron que López Hernández propuso entregar a sus compañeros y aliados las boletas de la elección ya marcadas a favor de Piedra y minutos más tarde él aceptó que inicialmente se planteó entregar un sobre con el nombre de cada senador pero la propuesta fue rechazada.
Cuando se reinició la discusión, el panista Ricardo Anaya pidió que se garantizara la emisión del voto sin interferencias ante las versiones de que el coordinador de Morena exigía a sus compañeros y aliados que mostraran su voto a favor de Piedra.
Llamó a usar un hojas en blanco, que no estuvieran marcadas ni foliadas, que los integrantes de la Mesa Directiva firmaran las boletas y se votara en una mampara y que los senadores fueran llamados uno por uno a los para permitir que quienes estaban reacios a seguir la línea ordenada por López Hernández.
El exsecretario de Gobernación respondió airado llamando "calderoncito" al panista y dijo que el bloque mayoritario votaría unido y que contaban con 87 votos para votar a su candidata.
¿Quién es Rosario Piedra Ibarra?
Rosario Piedra Ibarra estudió la maestría en psicopedagogía en la Escuela de Ciencias de la Educación, y cuenta con una licenciatura en Psicología por la Universidad Autónoma de Nuevo León. Se ha desempeñado también como profesora de educación especial.
En 2018 fue candidata a diputada federal por Morena, y fungió como secretaria de Derechos Humanos del Comité Ejecutivo Nacional del partido, al que no renunció como militante hasta el día de su elección.
El 25 de octubre durante su comparecencia ante comisiones, Rosario Piedra Ibarra, dijo que bajo su dirección, la CNDH ha demostrado compromiso claro y sin titubeos, “con transformaciones que reclama el pueblo”.
Sin embargo, Rosario Piedra Ibarra no estuvo entre las cinco personas mejor con mejor calificación de quienes buscan presidir la Comisión Nacional de Derechos Humanos, pero se le integró en la terna porque hubo senadores que la propusieron.
Su gestión también ha sido cuestionada por organizaciones de la sociedad civil, que la acusan de priorizar intereses políticos y de no defender a las víctimas de violaciones de derechos humanos en temas críticos como la desaparición forzada, la militarización y la violencia feminicida.
Hija de la histórica activista María del Rosario Ibarra de la Garza, pionera en la defensa de los derechos humanos en México, la trayectoria de Rosario Piedra parece estar en contraste con la labor de su madre.
El Comité Eureka, fundado por Ibarra de la Garza tras la desaparición forzada de su hijo Jesús Piedra en 1974, también cuestionó la postulación de Rosario, calificando su gestión de deficiente. En un comunicado reciente, reprocharon su silencio ante la negativa de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) de proporcionar información clave sobre personas desaparecidas y señalaron que su liderazgo en la CNDH ha favorecido la impunidad y el olvido, supeditando los derechos humanos a los intereses del poder político.
¿Cómo se elige a la persona titular de la CNDH?
Para llegar a la selección de los tres mejores perfiles, el Senado publicó una convocatoria el pasado 11 de octubre para que aquellas personas interesadas en competir por el cargo se inscribieran; en total se registraron 66 personas, de las cuales se seleccionaron 47 en un primer filtro.
De las 47 personas seleccionadas, se eligieron a los 12 mejores perfiles a través de un proceso en el cual se evaluó de manera individual a las y los aspirantes, quienes pasaron otro filtro en donde se analizó su experiencia y conocimiento en materia de derechos humanos, así como su autonomía o independencia política y partidaria, apertura ideológica, integridad, entre otros criterios.
De acuerdo con el apartado b del artículo 102 constitucional, la persona que presida la CNDH debe ser elegida por el voto de dos terceras partes del Senado.
Para ocupar la presidencia de la CNDH, es necesario ser mexicana o mexicano por nacimiento, estar en pleno ejercicio de sus derechos políticos y civiles, tener más de 35 años de edad, gozar de buena reputación y no haber sido condenado por delito intencional que amerite pena corporal, de acuerdo con la Ley de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
La persona elegida por el Senado dura en el cargo cinco años, puede ser reelecta una sola vez y es removida de sus funciones en los términos del título cuarto de la constitución.