Aunque está comprobado que la leche materna es el mejor alimento para niños y niñas durante sus primeros seis meses de vida, pues les proporciona a los bebés todos los nutrientes que necesitan para crecer y que su sistema inmunológico se desarrolle plenamente, algunas madres prefieren el uso de fórmulas en lugar de la Lactancia Materna Exclusiva (LME) por recomendación médica.
En México, solo el 28.6% de los niños menores de seis meses reciben lactancia materna exclusiva, el 43% de los menores de un año consumen fórmula infantil, 29% continúa con lactancia materna hasta los dos años y el 30% no tiene una diversidad alimentaria mínima, de acuerdo con el Instituto Nacional de Salud Pública.
Para fomentar la lactancia materna y mejorar la salud de los lactantes en todo el mundo, desde 1991 se celebra todos los años del 1 al 7 de agosto la Semana de Lactancia Materna. El lema de este año es: "Cerrar la brecha: apoyo a la lactancia materna para todos".
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) señala que la lactancia materna puede actuar como un factor de igualdad en nuestra sociedad, es por eso que hizo un llamado a gobiernos, personal de salud, sociedad y organizaciones civiles a cerrar la brecha en las desigualdades en la lactancia materna y apoyar la lactancia materna para todos, especialmente los grupos vulnerables.
Situación de la lactancia materna en México
Durante el inicio de la emergencia sanitaria por COVID-19, se observó un retroceso en el fomento de la lactancia materna debido a la separación de los neonatos de sus madres y la interrupción de la lactancia por desconocimiento sobre la función inmunológica de la leche materna, de acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
A esto se suma que nuestro país no ha cumplido con el Código Internacional de Comercialización de Sucedáneos de la Leche Materna, establecido por la Organización Mundial de la Salud en 1982, el cual busca evitar la promoción de sustitutos de la leche materna como iguales o superiores.
La falta de espacios de lactancia en centros de trabajo también dificulta la continuidad de la lactancia para muchas madres trabajadoras. La implementación de lactarios permitiría a las mujeres extraer y almacenar la leche para que sus hijos reciban el alimento adecuado durante su ausencia.
¿Qué dice la ley en México sobre la lactancia materna?
La Ley General del Salud señala que las autoridades sanitarias establecerán, entre otras cosas, capacitación y fomento para la lactancia materna y amamantamiento y, en su caso, la ayuda alimentaria directa para mejorar el estado nutricional del grupo materno infantil, además de impulsar, la instalación de salas de lactancia en los centros de trabajo de los sectores público y privado.
En su artículo 50, la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, en su artículo 50 ordena una coordinación entre las Autoridades Federales, Estatales, Municipales y Alcaldías de la Ciudad de México, entre otras cosas, para garantizar que todos los sectores de la sociedad conozcan las ventajas de la lactancia materna exclusiva.
En la Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación se establece que las mujeres tienen derecho a amamantar a sus hijos e hijas en lugares públicos y se considera discriminatorio prohibir, negar, limitar o restringir el acto de amamantar en espacios públicos.
Y el artículo 11 la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia (LGAMVLV), considera que el impedirles a las mujeres el llevar a cabo el período de lactancia, constituye violencia laboral.
¿Qué se necesita para apoyar la lactancia materna?
Políticas públicas donde los derechos de maternidad sean efectivos y no obliguen a las mujeres a elegir entre sus familias y su trabajo, así como un sistema de atención de la salud favorable a las mujeres y la lactancia materna donde las y los profesionales salud están capacitados para que puedan brindar apoyo útil y respetuoso, son algunos de los pasos que la OPS señala como fundamentales.
Al respecto, el informe “Publicidad digital de sucedáneos de la leche materna, alimentos y bebidas para niños y niñas menores de dos años en México” elaborado por el Instituto Nacional de Salud Pública y UNICEF sugiere que prohibir la promoción y publicidad de estos productos en medios digitales puede ser una medida viable para apoyar la lactancia materna pues este tipo de estrategia influye en las decisiones de compra y disminuye la probabilidad de amamantar exclusivamente a los niños menores de seis meses.
Aunque estas respuestas son importantes, la OPS menciona que la transformación más significativa se debe realizar a nivel familiar y comunitario: promover y apoyar actitudes que valoren a las mujeres respetando su autonomía y derecho a amamantar en cualquier momento y lugar, son de gran ayuda para cambiar el estigma que existe al respecto.