Hermila Galindo fue política, escritora, maestra, oradora, periodista y activista feminista sufragista durante la Revolución mexicana, un periodo importante y clave en la historia de nuestro país en el que se invisibilizó la participación política de las mujeres. 

Fue pionera del movimiento feminista en México y su legado permitió a las mujeres mexicanas acceder a espacios que históricamente les habían negado. Desde el ámbito político comenzó a cuestionar los roles de género y abrió el camino para que más mujeres comenzaran a luchar por sus derechos. 

Hoy a propósito de su aniversario luctuoso, recordamos su gran legado y su trayectoria en la lucha por los derechos, la equidad, la justicia y la libertad de las mujeres de México. En este mismo sentido, la presidenta electa Claudia Sheinbaum conmemoró a Hermila Galindo a través de una publicación en sus redes sociales, en la que mencionó parte del trabajo que ha dejado la defensora de derechos humanos. 

“Una de mis tareas como primera mujer electa para la presidencia es reconocer y hablar de las mujeres que han permanecido en el olvido. Hoy recordamos a Hermila Galindo Acosta, una mujer nacida en Durango, que tomó la decisión de oponerse a la dictadura de Porfirio Díaz, apoyar la Revolución y luchar por los derechos de las mujeres. Participó en el periodismo en el órgano constitucionalista El Pueblo. Su primer artículo se tituló "La mujer como colaboradora en la vida pública”, escribió en su cuenta de X.

¿Quién fue Hermila Galindo?

Hermila Galindo nació el 2 de junio de 1886 en la ex Hacienda de San Juan de Avilés, Municipio de Ciudad Lerdo, Durango y falleció el 19 de agosto de 1954. Estudió taquigrafía, mecanografía y telegrafía, a los 13 años de edad comenzó a impartir estas disciplinas en  Lerdo, Gómez Palacio y Torreón.

Posteriormente, Galindo se incorporó al grupo "Admiradoras de Juárez", en 1906. Cuatro años después comenzó a involucrarse en los asuntos públicos y reivindicar el papel de la mujer, esto a raíz del discurso del abogado Francisco Martínez Ortiz, que criticaba el régimen porfirista. En 1911 se mudó a la Ciudad de México, donde trabajó como profesora y secretaria particular del general Eduardo Hay, militar cercano al entonces presidente Francisco I. Madero. 

En esa época ingresó al "Club Abraham González" y se convirtió en la oradora de la agrupación, gracias a su oratoria y a su talento en la escritura. En 1914, pronunció un discurso en el cumpleaños de Venustiano Carranza, desde ahí se convirtió en su secretaria particular.

De esa fecha hasta el 20 de mayo de 1920, Hermila Galindo se dedicó a difundir los principios del feminismo en nuestro país y luchar por la educación libre de la mujer. 

Legado de Galindo

Hermila Galindo trascendió por su firme labor en la defensa de los derechos de las mujeres. Entre sus oratorias, destaca la ponencia "La mujer en el porvenir", en el marco del Primer Congreso Feminista en México, celebrado del 13 al 16 de enero de 1916, en Mérida, Yucatán, su escrito se centro en la sexualidad de la mujer, en la importancia de la educación.

Además, señaló las prácticas de desigualdad como anticuadas. Por este poderoso discurso, intentaron censurarla. De acuerdo con la secretaría de gobernación, la congresista Consuelo Zavala o Isolina Pérez intentó que no se leyera el texto, por considerarlo "inmoral". En su texto se puntualizó que la educación sexual se enseñará en la secundaria.

Galindo al escribir sobre el tema de la sexualidad femenina “constituye un trastocamiento del imaginario de la época, esa línea divisoria entre los ámbitos público y privado y el establecimiento de la participación civil de la mujer en cualquier espacio, tanto en el hogar como en la política. En su ponencia en el Primer Congreso Feminista, defendió el derecho absoluto de la mujer a tomar las riendas de su propio destino”, según la investigadora mexicana Laura Orellana. 

Primera candidatura en un cargo público 

El 11 de marzo de 1917, Hermila Galindo, hizo historia en nuestro país y contendió por el distrito electoral de la Ciudad de México. Aunque no obtuvo la victoria, su candidatura marcó la historia democrática de nuestro país porque permitió reconocer el derecho de las mujeres a votar y ser votadas.

Otros de sus legados fue el libro que escribió entre 1918 y 1919; “La Doctrina Carranza”, el cual es considerado la base del derecho internacional moderno.

Por otro lado, también destacó su trabajo como periodista, cuando se mudó al estado de Veracruz, Hermila Galindo escribió en El Pueblo y su primer artículo “La mujer como colaboradora en la vida pública”, en la columna llamada “Crónica dominical”, en el que afirmó que las mujeres deben aspirar a una vida con las mismas oportunidades que los hombres.