¿Has sentido que no puedes definir el tipo de relación que tienes con una persona? ¿No sabes si  son pareja o amigos  que sólo comparten intimidad física? ¿te has sentido agotada por la ambigüedad y simplemente evaden hablar sobre el futuro? Probablemente te encuentras atrapada en una situationship, una nueva forma dating común entre las personas jóvenes. 

Una situationship es similar a “un casi algo”, una relación entre dos personas que no se formaliza como pareja, pero que sí vive como tal. Se define como una “asociación romántica” o como una relación transitoria que no está definida ni acordada explícitamente entre las personas involucradas.  En el vínculo sí se establecen muestras de afecto propias de una relación monógama acordada, como intimidad física, vulnerabilidad emocional, y hasta exclusividad.

Aquí no se definen explícitamente límites sobre la intimidad física, disponibilidad emocional, canales de contacto e integración en la vida de la otra persona. El vínculo suele durar meses y regularmente una de las personas involucradas desea profundizarlo pero no es correspondida.

Este tipo de relaciones surgen de arreglos informales donde no hay reglas y las personas involucradas pueden tener múltiples relaciones al mismo tiempo. La incertidumbre de no saber qué tipo de relación se tiene puede provocar confusión, estrés y daños en la salud mental.

¿Cómo saber si estoy en una situationship?

Resultados de la encuestadora YouGov arrojaron que aproximadamente 50% de personas estadounidenses de entre los 18 y 34 años de edad han tenido una situationship. Esto se debe en parte a que los jóvenes buscan relaciones flexibles, en las que puedan nutrir su individualidad sin límites y que no repliquen comportamientos de las relaciones de pareja tradicionales.

Imagen

Así que si llevas meses en una relación que no puedes definir, probablemente estás atrapada en una situationship. Algunos otros rasgos que puedes identificar en estas relaciones son los siguientes:

  • Ambigüedad del tipo de relación que sostienen: esta es una de las principales características de las situationships, la confusión y la incertidumbre por no definir la relación. No hay un acuerdo verbal ni una plática al respecto.

  • Comunicación arbitraria: la comunicación en este tipo de relaciones suele ser esporádica, nunca se sabe realmente cuándo hablaran en persona o incluso por mensaje de texto, esto se debe a que estas relaciones también surgen de la conveniencia.

  • Conveniencia y tiempo muerto: las personas recurren a su contraparte cuando surgen cambios de planes en sus agendas. Generalmente se relacionan con el otro  cuando no se tienen alguna actividad que cumplir, los planes son apresurados y  no se prioriza el tiempo de calidad.

  • Inhabilidad de progreso: una o ambas partes de la relación no tiene intención de platicar sobre el futuro de la relación, aunque alguna de las partes puede querer establecer reglas y el tipo de vínculo no lo hace por temor al rechazo. 

  • Inhabilidad de terminar la relación: al no tener límites acordados y no tener un vínculo definido, las personas sienten que no pueden terminar la relación porque verbalmente no existe. 

  • La relación no es exclusiva: al no definir límites ni reglas, la relación transita entre la simulación de la exclusividad y la relación con otras personas.

  • No hay responsabilidad afectiva: la estabilidad, consistencia y falta de empatía emocional se traduce en falta de responsabilidad afectiva. Aunque no se tengan definidas etiquetas, la incertidumbre y el poco compromiso provoca estrés y ansiedad.

Repercusiones en la salud como consecuencia de vínculos ambiguos

Las situationships también repercuten en la salud física y mental de las personas, especialmente en las mujeres. 

La falta de un acuerdo de exclusividad tiene consecuencias en la salud sexual y emocional. Estudios han demostrado que en este tipo de relaciones el uso de métodos anticonceptivos como los condones disminuye, debido al sentimiento de estar en una relación monógama. Sin embargo, la multiplicidad de parejas íntimas sin protección puede incrementar la posibilidad de contraer una enfermedad o infección de transmisión sexual.

Las repercusiones en la salud mental van desde sentimientos de estrés hasta la reevaluación de la autoestima. En el fondo, suele aparecer la sensación de ser insuficiente para la otra persona, motivo por el cual no se puede comprometer en la relación. 

Los intervalos de no comunicación también tienen consecuencias en la salud; esta actitud denominada como ghosting provoca traumas a nivel neurológico, lo que complejiza aún más el proceso de desapego. 

Y es que en este tipo de relaciones, en las que se cumplen todos los requisitos de una pareja monógama, la separación es complicada. El luto, la aceptación, el enojo y los sentimientos de humillación dejan heridas profundas. Se pasa por el duelo de una relación que jamás se concretó.

Es por eso que es importante establecer límites desde un principio, comunicar tus sentimientos e intenciones y cuidar tu integridad física y mental. Así que en estas fechas de diciembre, no cedas ante la presión de llevar a alguien a casa de tus padres, y menos con una persona que no tiene responsabilidad afectiva ni tiene planes de conversar contigo sobre el estado de su relación.