Tras las complicaciones que la pandemia trajo consigo, como el desempleo, debajo de la Glorieta de los Insurgentes, un punto simbólico por su cercanía con la Zona Rosa de la Ciudad de México, se levantó la Tianguis Disidente, un espacio de resistencia ante la violencia sistemática a la que se enfrenta la población LGBTQ+.
Mujeres trans, personas no binarias, entre otras decidieron tomar las instalaciones debajo de la Glorieta de los Insurgentes para crear un espacio autogestivo que les permita trabajar sin ser discriminadas. "Como chicas trans tenemos pocas oportunidades (laborales). Inclusive en los mismos tianguis de la Ciudad de México yo era muy discriminada y violentada; yo me cansé de eso", comentó Laura Glover, integrante de gestoras trans de este espacio, en entrevista con La Cadera de Eva.
"También me cansé de que el movimiento feminista me excluyera, entonces nosotras nos vimos en la necesidad de iniciarlo porque estábamos muy desahuciadas por la pandemia, necesitábamos generar y también necesitábamos tejer redes entre las chicas trans", explicó Glover.
En 2022, el 10.7% de la población mexicana respondió que no estaría de acuerdo en contratar a una persona trans, de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Discriminación (ENADIS) 2022.
- Se estima que el 11.3% de la población de hombres de 18 años y más no estaría de acuerdo en contratar a una persona trans;
- mientras que el 10.2% de la población de mujeres opina lo mismo.
"La Tianguis es un espacio de resistencia económica LGBT. Somos un grupo diverso de personas, orientaciones sexuales, identidades de género, posturas políticas", mencionó Frida Cartas, integrante de gestoras trans de este espacio. Laura Glover aseguró que este lugar está conformado por toda la comunidad LGBTQ+, pero también todas las personas que estén en situación de vulnerabilidad.
Las personas LGBTQ+ también se enfrentan a la discriminación para adquirir una vivienda. En 2022, el 33.4% de la población de 18 años y más no estaría dispuesta a rentarle un cuarto de su casa a una persona trans, mientras que el 29.8% de la población no se lo rentaría a un hombre gay o una mujer lesbiana.
La Tianguis Disidente se conforma por un espacio de tres bloques, donde se reúnen para vender ropa, artículos de belleza, papelería, comida y bisutería alrededor de 200 personas emprendedoras; como Afrodita, una mujer trans que vende productos de Hello Kitty, comida cannábica y ropa de segunda mano.
Naila es una mujer trans que creó su propia marca de ropa llamada "Pene de mujer", utilizando ropa usada crea nuevas prendas que vende en La Tianguis Disidente. Pedro también acude a este espacio para ofrecer sus bordados y pinturas.
"Vivo a unas cuadras de acá, siempre pasaba por aquí y veía que estaban todas las hermanas hablando, jangueando y dije 'es el momento para conectar con las personas de mi comunidad'. Vendo la ropa que no uso para generar un poco más de ingresos", comentó Alice M. Flebes, una mujer trans venezolana de 28 años.
Amenazas y violencia a la que se ha enfrentado La Tianguis Disidente
Aunque La Tianguis Disidente es un espacio que les permite trabajar y subsistir a la población LGBTQ+ se han enfrentado a diversos problemas para mantener el espacio.
Uno de los principales conflictos que se presentaron fue cuando, en septiembre de 2021, algunos comerciantes de la calle Génova, ubicada en Zona Rosa, acudieron con palos a este espacio para golpear a los, las y les vendedores que se colocan en La Tianguis.
Durante las agresiones, las, los y les vendedores afirmaron que la policía no intervino, aunque cerca de La Tianguis se encuentran trabajando muchos elementos policiales.
Frida Cartas, gestora trans de La Tianguis, afirma que se han enfrentado a amenazas de narcomenudistas por no dejarles vender en la zona, conflictos con otras personas que también forman parte de este espacio, e incluso se han tenido que enfrentar a personas que acosan a las mujeres trans que trabajan ahí.
"Hay mucha violencia de gente de afuera, pero también aquí llegan a existir casos de transfobia, hay que comunicarlo y no dejar que este tipo de discursos de odio sigan sobrepasando en lugares o espacios donde se busca la libertad de diversidad", explicó Naila.
Naila también compartió que "viene mucho macho a violentar a las morritas trans, sólo toca defendernos. Aquí me siento segura porque sé que si pasa algo puedo gritar la palabra de auxilio y todes van a venir", mencionó mientras se acomodaba la blusa y agregó "luego hay mucha bandita que no acuerpa y tiene que acuerpar más porque no es sólo un espacio para vender, es una protesta".
También se han enfrentado a la persecución de la alcaldesa de la Cuauhtémoc, Sandra cuevas, quien ha iniciado una "limpieza social" en la alcaldía. El pasado 23 de junio publicó un video a través de su cuenta oficial de Twitter en el que aseguró que a partir del lunes 26 de junio estaría prohibido el comercio en la calle Génova.
Cuevas aseguró que si los comerciantes no se retiran voluntariamente, "tendremos que implementar un operativo para poder levantarlos a cada uno... Vamos a rescatar Zona Rosa por el bien de este país".
Las, los y les integrantes de La Tianguis se organizaron este lunes 26 de junio para protestar y conservar su lugar de encuentro y venta, para reclamar y "resistir un espacio que históricamente nos pertenece", se lee en la publicación en Instagram que realizaron.
"No nos iremos ni hoy ni nunca, no queremos su inclusión en este desastre, queremos ver arder toda intención de asimilación y burocracia", afirmaron los, las y les integrantes de La Tianguis.
"Este es un espacio con un rastro histórico muy importante, en primer lugar porque aquí se reúnen muchas personas de la comunidad, personas que habitan la calle, personas que ejercen trabajo sexual, entre otras. Creemos que es un espacio que históricamente lo hemos ocupado, este es un lugar donde históricamente hemos dormido cada vez que nos hemos quedado sin casa", compartió Laura Glover.
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Descontento dentro de La Tianguis
Dentro de La Tianguis Disidente conviven diferentes personas y posturas ideológicas, en un espacio tan diversos podría esperarse que no todos, todas y todes estén de acuerdo en la toma de decisiones. Las gestoras trans de este espacio afirman que han notado que "no son queridas" por otros grupos.
"Desde el año pasado nos quedamos un grupo de mujeres trans, entre 11 y 15, gestionando actividades, notas, protestas, ideas tanto promocionar de manera individual a las compañeras que venden sus productos como para invitar a seguir viniendo. La Tianguis ha tenido demasiados conflictos en todos estos años, en una etapa había mucha gente anarquista que se peleó con la policía por ejemplo; en otro tiempo había muchas lesbianas feministas y separatistas que llegaron a golpear a algunos fulanos", mencionó Frida Cartas.
Cartas también explica "desde que estamos el grupo de mujeres trans acá, organizando actividades, nos hemos dado cuenta de que no somos queridas. Nos han dicho que odiamos a los hombres trans, a las personas no binarias, a los gays, porque hemos decidido priorizar a la población de mujeres trans. No hay ningún hombre trans o persona no binaria que viva aquí en la calle, las que viven aquí en la calle son cuatro mujeres trans".
"Nos hemos enfrentado a amenazas de que nos creemos las dueñas, nos han dicho que no mandamos pero en realidad no queremos mandar, queremos hacer actividades para visibilizarnos. Entendemos que el espacio no es de nadie, pero eso no significa que no podamos colectivizar acciones que nos ayuden a la población en general": Frida Cartas
A través de redes sociales, La Cadera de Eva recibió un mensaje de una persona que forma parte de este espacio en el que se exponía que en La Tianguis Disidente no se reconoce algún tipo de autoridad pues se trata de una "protesta anarquista". También agregaron que Laura Glover cuenta con "denuncias públicas por agresiones a personas no binarias y transmasculinidades".
La Cadera de Eva buscó a las personas que no coinciden con las gestoras trans de La Tianguis, sin embargo, nos comunicaron que se encuentran preparando un comunicado sobre la situación.
Piden que se reconozca como tianguis cultural
“Una de las actividades que empezamos a gestionar este año es que en medio de esta ciudad LGBT-friendly no hay un monumento o una representación de mujeres trans asesinadas que hacen trabajo sexual. Entonces queremos instalar un monumento que las visibilice en el primer cuadro”, compartió Frida Cartas.
Datos del año 2020 permiten calcular que en México la esperanza de vida que tienen las mujeres trans es de 35 a 37 años debido a la discriminación y violencia de la que son víctimas por su su identidad y expresión de género, señaló el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la CDMX (Copred).
En 2022 se registraron al menos 87 muertes violentas de personas LGBT+ en México por motivos presuntamente relacionados con su orientación sexual o identidad o expresión de género, de acuerdo con el informe "Los rastros de la violencia por prejuicio: violencia letal y no letal contra personas LGBT+ en México, 2022", realizado por Letra Ese.
“Las mujeres trans fueron la población más afectada, al registrar 48 transfeminicidios, esto equivale al 55.2% de los casos totales”, advierte el mismo informe.
“Hemos buscado la presencia del gobierno en el apoyo para garantizar la seguridad del espacio, para tener más oportunidades pero nadie nos ha recibido”, mencionó Cartas, quien vende libros y stickers en La Tianguis.
“Llevamos más de dos años habitando este espacio y no ha habido ningún diálogo productivo con gobierno, nosotras requerimos una mesa de diálogo pero gobierno nos ha ignorado y ha preferido que sigamos en estas condiciones paupérrimas”, criticó Laura Glover.
Las gestoras trans de La Tianguis expresaron que están buscando que el Gobierno de la CDMX reconozca este espacio como un Tianguis Cultural LGBT porque eso les permitiría regularlo.
“Al ser un espacio público no podemos controlar lo que se vende y nos parece que es un riesgo porque la población LGBT y las mujeres trans tenemos este escarnio y persecución”, mencionó Frida Cartas.
Laura Glover recordó “la comunidad LGBT estamos fuertemente hostigadas por las condiciones de desempleo y violencia, este año subió un 11% los crímenes de odio y estamos contra las cuerdas”.
La Tianguis Disidente es un espacio de resistencia en el que hasta las paredes gritan la desigualdad, discriminación y el abandono que las personas de la comunidad LGBTQ+ han tenido que vivir y que las ha llevado a crear alternativas para poder subsistir.
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